Wallflower | Aidan Gallagher

Halloween: Minicapítulo

31 de octubre, dos años atrás...

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No sabía de qué disfrazarme. Bea tenía ideas para cada estilo posible: vampiresa, sirena oscura, algo de los años veinte. Todo me parecía demasiado brillante o ajustado o simplemente excesivo. Así que terminé eligiendo un vestido negro antiguo, sencillo, con mangas largas y cuello alto, y le añadí una máscara de encaje. Solo para decir que me había "esforzado".

Bea me había invitado a esta fiesta de disfraces, como si hubiera descubierto un nuevo planeta. Recuerdo su voz emocionada cuando me lo propuso en la cafetería, mientras yo intentaba concentrarme en mi libro.

—Tienes que venir —exclamó, apoyando ambas manos en la mesa—. Es nuestra primera fiesta de Halloween siendo de noveno grado. Todo el mundo va a estar allí.

La idea de una fiesta no era exactamente lo que más me emocionaba. Las multitudes, la música alta, las conversaciones superficiales... todo eso me ponía nerviosa.

—No soy muy buena en estas cosas, además no sé si mis padres me den permiso. —respondí, mordiéndome el labio.

—Vamos, no puedes quedarte en casa otra vez. Además, puedes disfrazarte de algo fácil. Yo iré de Black Widow.

La imagen de Bea con su traje ajustado me hizo sonreír, aunque sabía que no podía seguirle el ritmo. Aun así, su entusiasmo era contagioso, y al final accedí, sintiéndome un poco culpable por decepcionarla si decía que no.

[...]

Cuando llego a la fiesta, la atmósfera está llena de luces parpadeantes y decoraciones que recuerdan a una película de terror de bajo presupuesto. Bea, por otro lado, brilla con un disfraz que la hace destacar entre la multitud. La veo moverse con confianza, riendo y hablando con amigos, y me siento un poco como una sombra detrás de su luz.

Prefiero quedarme en las sombras, al menos por ahora. Me abro camino hacia una esquina más tranquila, tratando de evitar cualquier conversación. No paso mucho tiempo en la soledad cuando alguien se me acerca, vestido con un traje cubierto de purpurina plateada. Me mira de arriba abajo, con una expresión de curiosidad.

—¿De qué te disfrazaste? —pregunta, claramente confundido.

Antes de que pueda contestar, otro chico interrumpe desde atrás.

—¿Es en serio? Es Jane Eyre. ¿Nunca has leído el libro?

La voz tiene un tono de desafío, y al volverme para ver quién habla, me encuentro con unos ojos peculiares, ocultos tras una máscara de Batman. Hay algo en su mirada que me resulta intrigante, como si supiera algo sobre mí que yo misma no comprendo. Me quedo mirándolo, y por un instante se siente como un pequeño universo entre nosotros.

—Wow —murmuro, sorprendida— alguien con buenos gustos.

Él sonríe, pero la sonrisa no dura mucho. Antes de que pueda decir algo más, alguien lo llama desde el otro lado de la sala. Él me lanza una última mirada, como si quisiera decirme algo importante, y luego se pierde entre la multitud.

Me quedo ahí, con una extraña sensación de que, aunque nunca hemos hablado, nuestra conexión ha sido más profunda de lo que esperaría. La música retumba a mi alrededor, pero solo puedo pensar en aquellos ojos que me observaron, llenos de un entendimiento que no sabía que existía.

Bea aparece de nuevo a mi lado, riendo y ajustando el cinturón de su traje.

—¿Estás bien ______? Pareces un poco... ida.

—Solo estaba... pensando —respondo, sacudiendo la cabeza para despejar mis pensamientos.

—¿Pensando? Ojalá estuvieras más como yo. Vamos a disfrutar la fiesta.

Y aunque su energía es contagiosa, mi mente sigue viajando a aquel chico misterioso. ¿Quién era? ¿Por qué sentí que conocía sus ojos?

La noche avanza, llena de risas y música, pero en algún rincón de mi mente, la imagen de esos ojos claros permanece, como una promesa de un encuentro que todavía no ha sucedido.

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Hey :)

Espero que hayan pasado un buen Halloween y que disfruten este pequeño especial que escribí para ustedes. Díganme, ¿Quién creen que haya sido aquel chico desconocido con máscara de Batman? (Creo que ya todos lo sabemos).

Seguiré actualizando siempre que se presente la oportunidad. Tengan un buen fin de semana, gracias a los que siempre están pendientes.

- A.