Capítulo 6:

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Tras relajarme un rato en mi cama, decidí que era momento de explorar la isla. Con la habilidad Mapeo, podría volver a mi cueva sin perderme. Me levanté y estiré mi cuerpo, sintiendo cómo mis músculos aún respondían con fuerza tras la batalla con los Lupokais.

Salí de la cueva y comencé a caminar por el bosque.

Mientras avanzaba, noté algo peculiar en el suelo. Una planta extraña con hojas anchas y un tallo grueso sobresalía entre la hierba. Me acerqué y observé la planta con curiosidad.

— Eso es una Raíz de Tierra, Ryu. — explicó Kai, quien apareció flotando a mi lado. — Contiene una baja cantidad de energía espiritual del elemento tierra.

— ¿Por qué tiene energía espiritual del elemento tierra? — pregunté, curioso, mientras acariciaba la planta con una pata.

— Las plantas como esta suelen absorber la energía de la tierra de su entorno. A medida que crecen, van absorbiendo el elemento tierra, evolucionando y fortaleciendo su poder. Si la dejas madurar, eventualmente se transformará en una "Raíz Terrosa", que es aún más poderosa.

— Interesante. ¿Y qué pasaría si me la comiera? — inquirí, sintiendo el impulso de recogerla.

— Si la consumes, aumentará con la afinidad del elemento tierra, volviéndote más fuerte. — respondió Kai, con una sonrisa.

Pensé en dejarla ahí para que madurara, pero, al fin y al cabo, no podía garantizar que otras criaturas no la encontraran antes.

— ¿Puedo hacer que madure en algún lugar cerca de mi cueva? — pregunté, pensando en protegerla de posibles amenazas.

— Podrías, pero el proceso tomaría mucho tiempo... — respondió Kai con un suspiro. — Podrían ser meses, o incluso años, si no tiene suficiente energía espiritual de tierra cerca. Así que la Raíz Terrosa no estaría lista tan pronto como esperas.

Al escuchar eso, me decidí.

— En ese caso, me la llevo conmigo ahora. — dije, arrancando la planta de un tirón.

Regresé a la cueva con la Raíz de Tierra entre mis garras y me senté en el suelo para examinarla mejor. La planta tenía un color marrón oscuro, casi como si fuera un trozo de tierra. Su tallo era grueso, cubierto de pequeñas protuberancias ásperas, y las raíces entrelazadas en la base.

Sin dudarlo más, llevé la raíz a mi boca y la mordí. Su sabor era terroso y amargo. De repente, sentí un pequeño pinchazo en mi interior, como si algo se estuviera formando.

Una extraña calidez se propagó por mi cuerpo, y una sensación de estabilidad, de firmeza, comenzó a extenderse por cada fibra de mi ser. Al abrir los ojos, noté una pequeña notificación flotando frente a mí:

Habilidad Desarrollada: Núcleo de Tierra

— Kai, ¿qué es esta habilidad? — pregunté con curiosidad.

— El Núcleo de Tierra es una habilidad de afinidad elemental que te permite canalizar la energía del elemento tierra para hacer algo. A medida que la domines, podrás usarla para crear otras habilidades de tierra. — explicó Kai.

— ¿Cómo puedo empezar a desarrollar habilidades de tierra? — inquirí, mientras me preparaba para experimentar.

— Primero, tienes que concentrarte en el núcleo dentro de ti y conectarte con la energía de tierra que ahora fluye en tu interior. Deja que esa energía se extienda por tu cuerpo y trata de manifestarla. — respondió Kai, observándome con atención.

Seguí sus indicaciones y cerré los ojos, concentrándome en esa calidez que había sentido antes. Mi respiración se ralentizó, y dejé que esa energía se moviera lentamente a través de mí.

Reencarne con un Sistema KaijuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora