𝙐𝙡𝙩𝙧𝙖𝙫𝙞𝙤𝙡𝙚𝙣𝙘𝙚 || (𝐭𝐨𝐥𝐥)

10.

¿En qué momento esto acabó así? en realidad no hice nada malo, en ningún momento, no sé simplemente siento que Tom exageró un poco las cosas.

-¿Quieres contarme?- Andrew iba conduciendo y yo solo iba mirando por la ventana mientras limpiaba mis lágrimas una tras otra.
-Tom terminó conmigo- dije sin más aún mirando por la ventana.
-No preguntaré por qué, ya me imagino la razón...- solté un pequeño suspiro pero no hablé- creo que es mejor, Bill- esta vez lo miré- ¿no te has puesto a pensar que realmente te celaba de una manera no muy normal?- desvié mi mirada hacia enfrente y seguí en silencio- no soy quién para opinar ¿de acuerdo? solo estoy diciendo lo que noté, solo puedo decirte que lo siento... quizá no debí invitarte a tomar una cerveza en ese bar- sonó serio, pero simplemente me quedé en silencio.

Terminé de guiarlo, y lo único que dije fue "gracias" no tenía ganas de hablar con nadie, de dar explicaciones, simplemente quería llegar a mi cama y descansar... pero no me esperaba que una persona estuviera en la sala de mi casa platicando animadamente con mi madre y Harper.

-Bill, hijo, que bueno que llegas- dijo mi madre y se puso de pie- Tom llego hace unos minutos- no procesaba lo que estaba pasando, él me había terminado ¿qué hacía en mi casa?.
-¿Qué haces aquí?- fue lo único que dije ignorando a mi hermana y a mi mamá.
-Eh Harps, creo que lo mejor será dejarlos solos- dijo mi madre.
-Esta bieeeen- mi hermana se puso de pie y Tom también- fue bueno verte Tom, nos vemos- se despidieron de beso en la mejilla, mi madre solo le hizo un movimiento con la mano en el aire y ambas se subieron.

Yo aún seguía cerca de la puerta, y Tom seguía de pie frente al sofá.

-Te hice una pregunta- hablé.
-¿Te trajo Biersack?- solté una risa irónica y cerré mis ojos.
-Mejor vete, no quiero discutir- caminé hacia las escaleras pero Tom fue rápido y me tomó de los brazos e hice una mueca, me dolía el brazo que anteriormente me apretó con fuerza.
-Escúchame... por favor- buscó mi mirada pero yo la desvié lo más que pude- perdóname, por favor perdóname, sé que no debí reaccionar así, fui un imbecil, un total y completo imbecil...- un nudo en mi garganta comenzó a formarse así que no dije nada- dije cosas sin pensar, explote sin razón alguna... me hice ideas en la cabeza totalmente estúpidas, por favor perdóname- me tomó de mis mejillas e hizo que lo mirara, a este punto ya estaba llorando, maldita sea.

-Tom... yo te amo y jamás te traicionaría, ni te he dado motivos ¿hay algo mal que esté haciendo?-
-No no no mi vida... para nada, yo fui el imbecil, de verdad lo lamento- pegó su frente con la mía y limpió mis lágrimas- no llores... vamos a estar bien ¿si?- me dio un beso en los labios, uno pequeño y yo asentí lentamente- solo quiero pedirte algo...- me separé un poco y lo miré a los ojos- mantén tu distancia con él... ya no me hagas creer cosas que no son, no queremos que se repita esto ¿no?- cerré mis ojos, suspire y los abrí de nuevo.
-Si, está bien...- me sonrió y yo a él pero medianamente.

Muy en el fondo yo sabía que Tom se contradecía muchas veces, pero me estaba cegando tanto que prefiero creer que va a cambiar, dejara de ser tan celoso y además yo también tengo que poner de mi parte, porque no quiero que se moleste conmigo... además el nunca ha provocado estas discusiones, yo si.

Al siguiente día amanecí feliz, Tom y yo habíamos solucionado las cosas y eso era lo que importaba, y si todo estaba bien con él, yo estaba bien.

-Mierda...- estaba frente al espejo, y tuve que cambiar mi camiseta, Tom me había dejado una marca en mi brazo, hice una mueca y me cambié.
-¿Ya te vas?- entró mi hermana a mí habitación.
-Si, ya solo me pongo mi chaqueta- le sonreí y se sentó en mi cama.
-¿Ayer Tom y tú estaban peleados verdad?-
-Solo habíamos discutido por llamada y... pues nada, vino a hablarlo conmigo- le di media sonrisa y se me quedó mirando.
-Mmhm ¿todo bien con él?- sentía su mirada en mi, me puse nervioso que buscaba que hacer o cómo desviar su mirada- ¿Bill?- tome aire y por fin la miré- sabes que si pasa algo puedes contarme ¿no?- no sé porque extraña razón quería llorar en ese momento, pero me contuve.
-Harps...- me senté a lado de ella y tomé sus manos- gracias, pero todo está bien, solo fue una discusión- suspiró y acarició el dorso de mi mano derecha.
-Está bien, ya vete, se te hace tarde- creo que mi hermana sabía o se había dado cuenta de algo.