Todos los días eran iguales, como siempre, el Azabache llendo a comprar cafe en el mismo lugar, ya nisiquiera compraba cafe en el supermercado.
—No puedo creer que me hayan asignado compañero —murmuro con molestia.
—Solo di que no te caigo bien y me bajo de la camioneta Reed —dijo la Alfa.
—No es eso Lucía, agh, olvidalo —estaciono el coche.
—¿Porque paramos aqui?
—Necesito comprar cafe
—Ou, te acompaño, te lo pediria pero soy estricta a la hora de ordenar cafe
El azabache solo bajo, llego a la cafeteria pero extrañamente estaba cerrado.
—Que extraño, normalmente abren a las 6
—Ya te sabes, jah, ¿deberia sospechar?
—¿Porque sospecharias sobre esto?
—Por na- espera —su rostro paso a una bromista a una seria—. ¿Hueles eso?
—¿Acazo es?. . .
Lucía saco su arma y Tom fue delante suyo.
El olor a sangre abundaba.
Tom golpeo y pateo la puerta hasta tirarla y la escena lo impacto.
Una mujer mayor estaba tirada al suelo, estaba desangrando y estaba inconciente. Y por su parte estaba el Omega peliazul que de igual forma estaba inconciente, sus ropas estaban algo rasgadaz, tenia una cortada en el pómulo de la mejilla y tenia una marca de golpe en la mejilla.
—¡Llama a los paramédicos! —ordeno Tom.
—¡Por mientras deten la emorragía de la señora! —Dijo Lucía sacando su telefono.
Tom rapidamente tomo un pedazo del mandil del peliazul y comenzo a meter preción en la herida.
Lucía aun en la llamada seguia las indicaciones de los paramédicos, Lucía despues se encargo de la mujer mayor y Tom se encargo de re animar al Omega.
—¡Despierta!, ¡vamos!
—Ja-jake —solto la anciana—. Mi nieto, ¿esta bien?
—No haga esfuerzo señora, esta bien, tranquila, soy Lucía, el es mi compañero Thomas, estamos aqui para ayudarlos
—Manche el suelo, pobre de Jake, tendra que limpiar —decia con la mirada perdida—. Tra-trabaja tan duro, cre-creo que cerraremos temprano pa-para que de-descanse —la dificultad del habla comenzo lo cual alarmo a Lucía—. Ja-jake, mi mu-muchacho t-tan tra-trabajador
—¡Se-señora, re-resista, ya casi llega los medicos!
La mayor simplemente se quedo con la mirada perdida, el brillo de sus ojos desaparecio, se quedo inmovil, ya no presentaba signos de vida.
—¡SEÑORA! —Llamo Lucía el shock.
—¡MIERDA! —Gruño frustrado el azabache.
El azabache sintio como algo apreto de sus ropas, era el peliazul quien apenas estaba reaccionado, pero tenia la conciencia suficiente como para haber visto tal escena que lo desgarro.
—¡MIRIAM! —Grito y lloro a la vez al ver a la mujer que era como su abuela.
—¡Tranquilo, estamos aqui para ti, ya casi llegan los medicos! —trato de calmar Lucía.
—¡No!, ¡no!, ¡NO! —Lloraba.
. . .
Ya vieron las audiciones ‼️✨️
Ay Anastasia 😻🫦🥺‼️💗
Me urge ver la de Spencer 😻
