Veneno y Miel (Gojo x lectora x Geto)

Capítulo IX.- Sueño Podrido

*Recomendación: Veía el último capítulo de The boys mientras escribía este capítulo. Así que les recomiendo escuchar "Heart-Shaped Box" de Nirvana.

Tras cambiar su ropa para perderse entre el resto de chicas, (...) cayo profundamente dormida. Manipular a tantas personas consumía demasiada de su energía y no era fácil lidiar con tantas voces en su mente... Necesitaba un descanso urgente.

Pasó casi todo la noche y parte del día sumida en un sueño profundo. El resto de las chicas la rodeaban acariciando su "cabello" y rostro. Tenían una permanente expresión de felicidad en el rostro y la trataban como a una niña pequeña.

—Tenemos que estar limpias, hoy es un día importante — exclamó una de las chicas mientras sujetaba la mano de (...) —

La guiaron hasta unas duchas comunales, recordándole lo importante que era esa noche... Pues habría una ceremonia.

—Es como si fueran máquinas... me está costando mantener el control en ellas —murmuró (...) para si misma —

Con un suspiro, volvió a colocarse la peluca sobre su cabello, ajustándola con cuidado. El atuendo que llevarían esta noche era diferente al que usaban cuando estaban encerradas: casi todas llevaban kimonos cortos en colores claros, sujetos con obis oscuros que contrastaban y medias que llegaban hasta la rodilla. Sin embargo, cinco de ellas destacaban entre el resto, vestían únicamente un camisón blanco.

—Ellas han sido bendecidas —dijo una chica que estaba a su lado, esbozando una sonrisa

Bendecidas, (...) tenía un mal presentimiento por lo que decidió contactar a Suguru.

"Pide refuerzos... Esto está más jodido de lo creí... Tienes que sacarme esta noche de aquí"

(...) envío el mensaje de ayuda rápidamente volvió a esconder su teléfono en su kimono, se acercó a una de las ventanas descubriendo que estaban cubiertas por rejas de grueso metal. Se alejó un poco de la ventana y sintió un golpe repentino en la parte posterior de la cabeza. Su vista logró distinguir a una mujer de cabello negro que la observaba con una expresión fría y calculadora.

Un segundo golpe, más fuerte que el anterior la dejó indefensa. Los guardias levantaron a (...) del suelo y la ataron firmemente a una silla de ruedas, la llevaron por un pasillo un tanto descuidado apenas iluminado, la dejaron en una sala con aspecto de hospital abandonado, al centro había una cápsula y cinco tinas de baño rodeándola...

De repente un cubo de agua helada le fue arrojado al rostro, haciéndola despertar bruscamente. Al levantar la vista se encontró con tres figuras. Frente a ella estaba la mujer de cabello negro que le había atacado, el hombre que se hacía llamar el administrador y un hombre vestido con un traje obscuro y elegante. Tenía un aire sofisticado y enigmático, con rasgos que recordaban a un joven Mads Mikkensen; su mirada era penetrante y cargada de frialdad sobrenatural.

El hombre de traje obscuro la observaba con una expresión extrañamente satisfecha, como si hubiera esperado ese momento por mucho tiempo. Finalemente se inclinó hacia ella, sin apartar su mirada de la suya.

—Crei que no volvería a verte — dijo en un tono bajo y controlado sus palabras cargadas de una familiaridad inquietante — Has crecido... mucho —

(...) aún estaba aturdida, sentía como si su cabeza fuera a estallar.

—¿Quién carajo es usted? — apenas logro decir (...) mientras levantaba la mirada — ¿Y por qué me habla como si nos conociéramos? —

El hombre sonrió levemente y se acercó aún más para susurrarle.

—Yo... soy tu verdadero padre, de dónde crees que viene esa maravillosa técnica—

(...) se quedó en silencio incrédula.

— Tu madre era de mis favoritas, pero decidió huir contigo — habló el hombre mientras caminaba de un lado a otro — Mis hombres no tardaron en encontrarla, estaba sola y se negó a revelar tu ubicación... se suicido antes de que pudiera adentrarme en su mente —

—No es cierto... Mi padre es parte del consejo de hechicería — balbuceó (...), intentando evadir sus palabras —

—Tienes una pequeña cicatriz en el vientre en forma de cruz, ¿no? — habló con una sonrisa arrogante — Toda tu vida es una mentira cariño, has sido la única de mis hijos que ha heredado mi poder y ahora cumplirás el propósito por el que fuiste concebida —

(...) se quedó en silencio, como podría ese hombre saber lo de su cicatriz.

—Esa es la marca que usamos con todos los que pertenecen al culto —

Las mujeres "bendecidas" comenzaron a ingresar una en una a las grandes tinas, sumergiéndose en un líquido transparente y espeso que las envolvió.

El hombre de traje elegante, no había desviado la vista de (...) ni por un segundo, esbozó una sonrisa serena mientras extendía los brazos, parecía estar ebrio de poder.

—Serás parte del núcleo — dijo dirigiéndose a (...) con devoción — Tu conciencia es parte fundamental para nuestra utopía... Despertaremos en un nuevo mundo, donde la pureza y el amor brillarán sobre todos nosotros. En esa realidad, seremos uno solo, una mente unificada con mi guía... Seremos dioses en un nuevo mundo —

(...) sintió un escalofrío que recorría su cuerpo, mientras aquel hombre hablaba, las piezas del rompecabezas empezaban a encajar. Ese hombre estaba recreando un ritual prohibido, una técnica maldita que solo se había escuchado en leyendas.

Recordó que su supuesto padre le había hablado de ello cuando era pequeña, un ritual donde múltiples mentes se unían en una sola conciencia, el "núcleo" era sostenido por varias almas. Este ritual tan complejo requería tanto de los vivos como de los muertos y el sacrificio de un usuario del "cortejo del titiritero"... como ella.

Sintió el peligro que se cernía sobre ella, (...) empezó a forcejear en su silla, aunque las ataduras parecían apretarse más cuanto más intentaba liberarse. La desesperación la consumía.

El hombre volvió a acercarse y, con una suavidad escalofriante, colocó una mano sobre su mejilla. Inclinándose hacia ella, murmuró con una expresión entre amorosa y posesiva:

—Tranquila, mi pequeña. No sentirás dolor... no voy a permitir que desaparezcas. Tu consciencia seguirá aquí, como una diosa en nuestra utopía. Serás eterna—

La fría convicción de sus palabras hizo que (...) sintiera que su sangre se helaba. Se acercó y tomó su rostro entre sus manos, besó su frente, en una muestra de afecto retorcido.

La desesperación comenzó a convertirse en rabia. (...) no permitiría que la usaran con ese propósito y que la convirtieran en un símbolo muerto de una "utopía" perversa.

Unas horas antes, tras recibir el mensaje de (...), Suguru actuó de inmediato. Llamo a Yaga poniéndole al tanto de la situación, él estaba consciente que no podría sacarla de ahí sin ayuda.

—La prioridad es sacar a (...) de ahí... Satoru Gojo va en camino —

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Gracias por leer ✨