SCARS | H.GRANGER|

Solo amigas

Lynn abrió los ojos lentamente, y una sonrisa ladeada se dibujó en su rostro al ver a Hermione dormida a su lado. Los primeros rayos de luz iluminaban la habitación, y todo parecía extrañamente tranquilo. Lentamente, se inclinó hacia Hermione, acariciándole suavemente el cabello.

Hermione se removió entre las sábanas y abrió los ojos, encontrándose de inmediato con la mirada traviesa de Lynn.

—Buenos días, princesa de Gryffindor —susurró Lynn, con una sonrisa enigmática.

Hermione rodó los ojos, pero sonrió y se incorporó un poco

— es el apodo más ridículo de todos - se rió suavemente, parecía en una especie de trance

— no puede negar que te gusta - susurro Lynn sonriendo de nuevo y robándole un beso

- debo volver a mi habitación, pronto se despertaran todos y no quiero un escándalo - suspiro Hermione

- no - Lynn alargó la última letra quejándose - quédate más tiempo, da igual que se enteren que hemos vuelto - Hermione soltó una carcajadas bastante alegre mientras tomaba sin permiso la camisa de Lynn

- oh preciosa,  Pero si tú y yo aún no hemos vuelto - aclaro la chica - lo que me hiciste no lo olvido tan fácil, ¿Acaso creciste en estos meses? esta camisa es demasiado grande.

— Espera, ¿cómo es eso de que aún no me perdonas?, sobre la camisa te ves... francamente encantadora. —Lynn le guiñó un ojo, mientras Hermione negaba con la cabeza, divertida.

Justo en ese momento, mientras compartían una sonrisa, la puerta se abrió de golpe. Ron entró, y se quedó congelado al ver a Hermione frente a la cama, usando la camisa de Lynn, ambas riéndose como si compartieran algún secreto prohibido. Su rostro pasó de la sorpresa al enojo en cuestión de segundos.

—¿Qué demonios está pasando aquí? —gritó Ron, con los puños apretados—. ¡Esto… esto es una traición! Hermione, ¡me estás apuñalando por la espalda!

—Oh, por favor, Ronald —respondió Hermione, cruzándose de brazos, claramente irritada— no grites, es muy temprano

— ¿Cómo pudieron?, no espera, ¿Cómo pudiste Hermione?, caer tan rápido en las garras de esta traicionera

Lynn, que observaba la escena con calma, sonrió burlonamente

—Oh, vamos, Weasley. No es lo que parece. Bueno, tal vez sí, pero... ¡relájate! Hermione y yo solo estábamos… recordando viejos tiempos —Y luego, con una sonrisa traviesa, añadió—: Aunque, claro, esta noche fue un poco... inolvidable.

Hermione le dio un leve codazo a Lynn, sonrojándose levemente, aunque no pudo evitar reír.

—¡Inolvidable! —Ron parecía estar a punto de explotar—. Hermione, ¿te parece gracioso? Esto es una broma para ustedes, ¿no? ¡Es como si no me conocieras, como si no importara!

Lynn le guiñó un ojo a Hermione, que no parecía en absoluto dispuesta a retroceder.

—Mira, Ron —dijo Hermione, levantando las manos—, no entiendo por qué estás tan enojado. Hasta donde se, no habíamos formalizado algo real y Lynn solo es… una amiga.

—Ajá, solo una amiga —murmuró Lynn, con una sonrisa provocadora—. Qué interesante elección de palabras.

Ron estaba a punto de lanzarse hacia Lynn cuando Harry entró, empujándolo suavemente para evitar que la situación escalara.

—¡Ya basta! —interrumpió Harry, con tono autoritario, mirando a todos seriamente—. ¿No creen que tenemos cosas más importantes de las que preocuparnos? ¡Estamos perdiendo el tiempo en tonterías! Necesitamos hablar con Ollivander, no estar aquí peleando por… —hizo un gesto vago, sin saber muy bien cómo describir la escena—… esto.