Adaira nunca creyó en el amor, después del dolor tras la pérdida de su padre, acostumbrada a ver relaciones rotas y promesas incumplidas. sus ojos se cruzaron con los de Rodri. Adaira comenzó a ver que el amor verdadero puede surgir en los lugares m...
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Desde que él llegó a mi vida, he descubierto que el amor no es solo una palabra, sino una experiencia constante de aprendizaje y crecimiento. Con él, el amor ha dejado de ser una idea abstracta para convertirse en un refugio real, en un espacio donde la confianza, la comprensión y la pasión se entrelazan de una manera única. A su lado, he aprendido que amar es entregarse sin reservas, pero también saber recibir con el corazón abierto. Cada día con él es una nueva oportunidad para sorprenderme de lo que podemos construir juntos, para sentir que, a tu lado, lo que parecía imposible se vuelve nuestro mayor logro. No hay dudas en mi corazón: el amor que compartimos es mi mayor fortaleza, y no hay nada que desee más que seguir creciendo con él, día a día, juntos.
“Cada vez que pienso en él, siento una paz profunda, como si el mundo entero se alineará en su lugar.”
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Como escritora aficionada, quiero advertir que esta historia nace del corazón y no de la perfección literaria. No soy una escritora profesional, y sé que probablemente encontrarán errores en la trama, en la estructura o en la forma de narrar. Sin embargo, cada palabra y cada línea reflejan lo que siento y quiero compartir. Esta es mi manera de expresarme, de contar una historia que me conmueve, y aunque no sea perfecta, la escribí con todo el cariño y la pasión que tengo por la escritura.