La 8ª miembro de BTS

13ª Parte

Durante el concierto tenía ligeros malestares, pensaba que lo que comí horas antes me cayó de alguna manera mal, pero para mi sorpresa el dolor estomacal pasaba a peor cada vez que bailaba. Junté todas mis fuerzas para poder soportarlo hasta que nos fuéramos a cambiar de vestuario.

Al terminar la última canción, se apagaron los focos y corrí con desesperación en busca de ayuda; no pude llegar a donde estaban todos los del personal y caí al suelo sobándome la barriga para aliviar los dolores pero era imposible.

- ¡Yuwon! - Namjoon corrió a socorrerme - Mi niña, ¿qué tienes? ¿estás bien?.

Yo solo me removía incómoda y sollozaba, no podía articular ninguna palabra. Sentí que alguien me levantó del suelo y corrió conmigo en brazos hasta llegar a un sofá para tumbarme y ver qué me pasaba.

Menos mal que siempre había uno o dos médicos en los conciertos por si algo como esto pasaba. Escuché como éste me preguntaba donde me dolía, yo solo le señalé la parte baja de mi estómago. Me levantó la camisa y acercó un fonendoscopio, busqué con mi mirada a Hobi y mediante un gesto le pedí que me sujetara la mano, de alguna manera el me daba mucha paz.

- Yuwon, no vas a poder seguir con el concierto, tienes que ir al hospital conmigo a que te haga las pruebas pertinentes.

Me asusté de la manera en la que lo dijo, parecía que era algo grave ya que su cara transmitía mucha preocupación. Miré a los chicos con lágrimas en los ojos, no quería irme, esperaba con ansias este concierto y pensar que debía irme ahora nada mas haber empezado me daba rabia.

- Ve al hospital, Yuwon. Si te quedas empeorará tu salud, por favor. Nosotros terminaremos el concierto por ti, no te preocupes - Hobi acarició mis manos y besó mi frente para tranquilizarme.

- Vendrán después a verme... ¿verdad? Os necesito... - No pude terminar la frase y rompí en llanto.

- Claro que iremos, pequeña. Estaremos siempre contigo en las buenas, en las malas y siempre que tú nos necesites - Taehyung me abrazó haciendo que los demás se unieran al abrazo.

- Gracias chicos - Asentí con un sonrisa - Deben preparase ya, Army os espera.

Namjoon, Suga y Jin me dieron un último beso en la frente mientras que Jimin, Jungkook, Hobi y Taehyung me lo depositaron en la mejilla y corrieron a prepararse ya que se les hacia muy tarde. Reí por lo bajo al verlos correr desesperados mientras se quitaban las camisas y lo lanzaban donde podían. En cambio yo me levanté como pude junto con el médico y dos chicos de seguridad, cogieron mis pertenencias y subimos al coche.

Durante el trayecto al hospital quise llamar a Mingyu y contarle sobre lo que había pasado, no para preocuparlo sino para tener ese apoyo que necesitaba en ese momento. Le pedí que no le contara a mamá ya que se preocuparía, además de que yo seguía pensando que era un simple dolor estomacal así que me aferré a esa idea.

Me hicieron una infinidad de pruebas de sangre y ecografías, los resultados tardarían un par de horas asi que me tuvieron que ingresar en una habitación temporalmente hasta que supieran que era lo que tenía. Mientras miraba con tristeza hacia las vistas de la habitación escuché como alguien tocaba la puerta, en ese momento estaba sola ya que apenas llevaba en el hospital una hora y supuse que los chicos no podrían ser.

- Adelante.

Se abrió la puerta lentamente pero lo único que pude ver era un gran ramo de flores, ahí me di cuenta de quién se trataba.

- Pero amor... ¿cómo llegaste a Busán tan rápido? - Pregunté con una sonrisa pero tenía curiosidad por lo que me diría.

- Llegué esta mañana para sorprenderte en el concierto, pero no estoy solo. Dino me acompañó pero esta hablando con el doctor, vendrá enseguida - Dejó el ramo en la mesita y se acercó a acariciarme suavemente mis mejillas - ¿Qué te pasó, cielo?.

- Aún no estoy segura pero me duele bastante el estómago, noto un bulto en la parte baja.

- Oh, mi bebé. Espero que no sea nada malo - Su cara se tornó triste pero aún así mostró una sonrisa tierna.

En ese momento vimos a Dino entrar junto con el doctor, Mingyu se sentó en la cama a mis pies mientras que ellos dos se quedaron estáticos enfrente nuestra. Mi hermano estaba cabizbajo como si le preocupara algo, eso me hizo entender que sabía lo que me pasaba por lo que me preocupé mas y mi cuerpo se tensó.

- Ya tenemos los resultados, señorita Lee. No sé si lo que os voy a decir a continuación sea una buena o mala noticia para ustedes - Mingyu y yo nos miramos atónitos, ambos sabíamos a lo que se refería.

- ¿Acaso estoy embarazada?.

- ¿Qué? - Mingyu se exaltó haciendo que todos los que estábamos presentes nos asustáramos.

- Por dios, chicos van a ser papás - Por fin Dino habló pero parecía estar enfadado.

En realidad era entendible que estuviera así ya que aún somos bastante jóvenes y tenemos toda una vida por delante. No me veía teniendo un bebé ahora, claro que soñaba con algún día casarme y tener hijos pero no ahora. Pero ya no había marcha atrás y yo no pensaba abortar, siempre he sido partidaria del "no al aborto" aún así debíamos hablarlo entre los dos.

- ¿Puedo hablar en privado con mi hermana? - Admito que tenía miedo de hablar con él y que me echara la bronca o algo por el estilo.

Le sonreí con delicadeza a Mingyu y al doctor, ellos asintieron y salieron de la habitación.

- ¿Hermanito? - Le miré con ojitos de cachorrito a lo que él solo suspiró y se sentó a mi lado acariciando mi mano.

- Claro que no, tonta. Solo que no me esperaba esta irresponsabilidad de vuestra parte, ¿acaso era lo que querían?.

- Entiendo tu enfado pero no debes tratar esta situación como una irresponsabilidad, voy a seguir adelante con mi bebé pase lo que pase. Sabes que soy muy responsable y actúo con madurez siempre que tenga que tomar cualquier decisión respecto a mi vida, solo quiero que respetes mi decisión y nos apoyes. Eres mi pilar más fundamental después de mamá y papá, si tu me fallas me derrumbaré.

Él no supo qué responderme, sus ojitos se llenaron de lágrimas y solo tuvo el impulso de abrazarme y susurrarme al oído un "lo siento". Le sonreí y le dije que todo estaría bien y que seria cuestión de acostumbrarnos a esta nueva etapa que se nos presentó antes de tiempo.

Respecto a Mingyu, él pensaba lo mismo que yo, ambos queríamos seguir adelante con la idea de formar una familia. En cuanto a los chicos, se lo veían venir y sus reacciones fueron épicas, era la primera vez que veía a Suga llorar de felicidad, tanto que me abrazó y besó las mejillas como si de un peluche me tratara.

Desde ese día no me han dejado hacer nada, ni siquiera bailar aún sabiendo que me encanta hacerlo ya que me relajaba bastante la mente y el cuerpo. Maldita sea la hora en la que el doctor les contó que mi embarazo era de riesgo debido a mi edad y al ser mi primer embarazo.