Háblame || Yeongyu

◖Capítulo 15◗

Beomgyu miraba con curiosidad a Heeseung quien se mantenía en silencio, e hizo una mueca al notar como este no pretendía hablar, así que le envío un mensaje.

"¿Cuál era la emergencia?"

—¡Ah, si!—. Exclamó el contrario—. Necesito ayuda con Sunoo, es muy... duro conmigo, quiero ser su amigo y él no se presta, solo me gruñe, me quiere lejos de él y no da su brazo a torcer.—Bufó el azabache con sus brazos cruzados frunciendo levemente su entrecejo—. ¿Qué hago para caerle bien?

Beomgyu abrió sus labios un poco sorprendido por lo que le decía el contrario así que no dudó en comenzar a escribir en su teléfono pues al estar de pie se le haría difícil el escribir en su su libreta.

"Solo dale su espacio y conocelo de poco a poco, si tratas de meterte sin explicación o aviso, solo harás que se ponga así de recesivo, es un niño con muchos muros". Al enviar el mensaje miró con atención al contrario, notando como este sonreía y por inercia él también lo hizo.

—Muchas gracias, Beomgyu, si tengo alguna duda más te enviaré mensaje, ¿Si?

Beomgyu asintió rápidamente sin quitar su sonrisa, sintiéndose feliz pues Sunoo siempre era así y un poco de ayuda no vendría mal para Heeseung.

—Entonces... ¿Qué hablabas con SooBin? —. Preguntó con curiosidad Heeseung.

El castaño no logro evitar el hacer una mueca al recordar la conversación que había tenido con su compañero de clase. Le dio un sorbo al café que había comprado caminando junto al contrario yendo hacia su dormitorio.

—Se te miraba triste. ¿Te estaba molestando? —. Heeseung lo miró tratando de descifrar sus expresiones pero solo lograba notar tristeza en él, eso le hizo sentirse molesto, deseaba correr hacia aquel alto chico y darle sus buenos golpes, pero tenía que aguantarse.

Beomgyu negó rápidamente a su pregunta sin querer provocar algún problema aunque en cierto punto si se sintió mal con el tema que había tocado Soobin, no le agradaba mucho el recordar el acoso que usualmente recibía pero sabía que esto aveces causaba cierta curiosidad.

—Si te llega hacer algo me dices, y se las verá con mi puño. —Heeseung alzó su puño mostrándoselo al castaño quien soltó una suave risa nasal.

Beomgyu sonrió sintiéndose cómodo con la presencia del azabache a su lado, al fin estaba desbloqueando un nuevo amigo, y eso se sentía espectacular.

Al llegar a su pequeño departamento le dio una pequeña reverencia al menor sonriéndole con calidez, tratando de agradecer con sus gestos, y al sentir como el contrario lo envolvía en un pequeño abrazo se sorprendió pero no se alejó dejando suaves caricias en su espalda.

—Nos vemos, Beomgyu.

El castaño sacudió su mano y se adentró al departamento viendo como el menor se regresaba por donde habían llegado.

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Los capítulos cortos son una característica de mi escritura, que vergüenza shhdjshaja

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—MOKKA