Niebla de Espejo Roto

-Capitulo 04-

Intercambio de poder y algo de culpa

—Narrador Omnisciente—

Ya habían pasado unos días y digamos que Shira le dio unos 4 días de reposo a las chicas (Menos a Kelse, Beeko y Danonina), mientras que le dio una advertencia a Clerne y Sugalay.

Pero durante esos 4 días, Clerne se fue a una pequeña misión, ya que, bueno podría ser jefa de habitación y todo ese rollo, pero como mano derecha de la directora aún tenía sus obligaciones. Así que en el último día de reposo para las chicas, ella ya estaba allí y con el objeto en mano.

—¿Cómo te encuentras?— le preguntó la robot a Girasol.

—Me sigue doliendo la muñeca un poco aun, pero estaré bien— vio aún la marca alrededor de su muñeca —¿Cómo estuvo tu misión?— hablo observando el objeto.

—Exitosa y con un poco de rasguño, pero no hay nada que solucione la pulidora— con eso dejó el objeto en la mesa de la sala de descanso y fue al lavabo, pero se asomó rápidamente y miró a la chica —ni se te ocurra tocarlo— con eso se cerró la puerta.

Girasol solamente miró el objeto, hasta que se asustó por una mano en su hombro, rápidamente se dio la vuelta y vio a Sand con Krizz.

—¿Qué es eso?— hablo con curiosidad Sand.

—Creo que es un objeto maldito que ha traído Clerne de una de sus misiones— habló la chica de nombre de flor, con un encogimiento de hombros.

—Oh guay— dijo Krizz e intentó agarrar el objeto, si no fuera por un bofetón de parte de Sand.

—Qué partes no ha oído de que está maldita esa cosa— dijo con un tono de voz de regaño.

—Oh vamos, si fuera un objeto maldito no creo que Clerne lo hubiera traído aquí— y empezaron a discutir.

Girasol solamente se apartó un poco de ellas, intentando no meterse en esa discusión. Se dio la vuelta y miró la cosa maldita, estaba con mucha curiosidad de acerca su mano o no, al final acercó la mano y lo agarró, ya sabéis el dicho, la curiosidad mató al gato.

—Pues no ha pasado nada— se giró hacia las chicas, quienes pararon la miraron —no está tan maldit- ¡QUE MIERDA!— fue interrumpida por un destello que salió del objeto, cegando a las tres chicas e iluminando toda la sala de descanso.

El destello desapareció y las chicas abrieron los ojos, se miraron la una a la otra, para luego gritar como nunca, hasta que se dieron cuenta que no pasó nada. Y justamente salió Clerne del lavabo con rapidez acercándose a ellas.

—¡Que ha pasado!— grito preocupada y se alarmó cuando vio el objeto maldito en la mano de Girasol, lo único que pudo hacer fue darse un facepalm con decepción —dije que no lo tocaras—

—P-pero no pasó nada mal- — fue interrumpida por Clerne, quien se esforzaba para no alzar la voz a gritos.

—Claro que pasa algo malo...Tocaste el objeto maldito, y esa cosa intercambia poderes— con eso suspiro y se sentó en el sofá —lo bueno es que dura 24 horas el intercambio de poderes, solamente no utilices los poderes de la otra ¿Vale?—

—Si— dijeron las tres.

En eso abrieron la puerta, y pasaron las otras 3 chicas a la sala de descanso.

—Hello— habló Beeko con una sonrisa, cosa que le faltaba a sus 3 amigas.

Kelse al notar el ambiente un poco pesado y tenso se atrevió a preguntar.

—¿Ha pasado algo mientras no estábamos?— con preocupación se acercó un poco más hacia ellas.

—Girasol tocó un objeto maldito cuando Clerne le dijo que no lo tocara— habló Krizz mientras se cruzaba de brazos.