Capitulo 38

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-Como te atreves si quiera a apuntarme con una espada - dijo Katherine con el ceño fruncido. Tomó la espada con su mano lastimándose con el filo y botando un poco de sangre. Sin importarle se la arrebató a Annabeth y la lanzó lejos.- No te metas en mis asuntos niña- se acercó a ella- me sacaras de quicio- le susurró.

- Eh... ¿por que estas cubierta de sangre?- preguntó Grover. Katherine le dio una mirada fría- si, ehh mejor me callo- dijo nervioso.

Katherine siguió su camino chocando con el hombro de Annabeth, le dio una rápida mirada a Percy y le dijo mentalmente:

- Resuelvelo rápido- luego se fue del lugar seguida por Derek en dirección al departamento del hombre lobo.

- Necesito darme una ducha ¿me ayudas?- preguntó la sirena cuando entraron.

-A-ayudarte? - Derek tragó duro-¿por que?

-Necesito sacarme todo el hedor a gente muerta y como sabes que sale una gran cola con solo mojarme no podré limpiarme bien- rodó los ojos-no seas un pervertido tonto, se lo que pensaste.

Katherine se deshizo de la bata blanca que traía quedando en ropa interior y se adentró al baño seguida de Derek.

Antes de mojarse se sentó en el suelo de la ducha para evitar un fuerte golpe al caer.

Derek comenzó a regale agua con la regadera haciendo que la sangre saliera de su cuerpo.

Por otro lado, los príncipes llevaron a Esmeralda al hospital. Ahora ella no podrá caminar.

Ellos no sabían como sentirse con esto, Peter se sentía decepcionado y traicionado. No sabían que pensar de Kate, se había convertido en un monstruo según ellos, pero lo que no sabían es que ella ya lo era.

Desde hace mucho tiempo.

Todo lo que le ha sucedido la ha convertido en un monstruo y ya no podrá cambiar.

Percy se encontraba fuera del departamento de Derek tratando de convencer a sus amigos que lo dejaran.

- Te dije que era peligrosa Percy - le reprimía Annabeth- que no ves como estaba cubierta de sangre, parecía salida de un psiquiátrico.

-En eso tiene razón, no podemos dejar que te haga daño así que recoge tus cosas,es hora de irnos-le dijo Grover.

- No pienso ir a ningún lado, se que ella no esta bien ahora pero me necesita y no la abandonaré.

- Pero acaso...

-Ustedes no lo entienden, no tienen idea de lo que ocurre ni de lo serio que es.

-Entonces dinos, puedes confiar en nosotros.

- Lo sé pero no hacerlo.

-Acaso sabes a cuantas personas maté para que estuviera así como la vimos la vimos? Preguntó histérica Annabeth.

-Tan solo fueron más de veinte hoy- dijo Kate sonriendo desde la puerta. Vestía una simple camiseta blanca de botones unas tallas más grande que le llegaba por los muslos. -Ah y le rompí las piernas a una chica- recordó. Bajó las pequeñas escaleras que daban a la entrada dando pequeños saltitos hacia Percy y cuando estaba junto a él lo besó. El semidiós se sorprendió pero le siguió el beso.

-¿Kate?- pregunta sonriendo.

-La misma- vivió a sonreír- creo que puedo ocuparme de todo yo misma por ahora así que regresé- le dije-.

- Espera ¿que?- dijo Grosero confundido-

-Mejor entremos-dijo Kate y tomó la mano de Percy para arrastrado dentro del departamento.

-Derek, ella...- dijo señalando a Kate.

-Si te refieres a que es la chica mas bipolar del mundo, acertaste y totalmente fastidioso-rodó los ojos.

- Así que ya no eres Katherine-concluyó Percy.

-Sigo siendo Katherine, no se te olvide que somos la misma persona.

- No entiendo nada-volvió a decir Grover.

-Oh me olvidaba de ustedes- Kate se puso seria y cruzo sus brazos bajo su pecho, soltó la mano de Percy.

- Aquí vamos de nuevo- soltó Derek un suspiro.

-¿Que rayos hacen aquí?.

-Vinimos a asegurarnos de que Percy estuviera bien.

-No se metan en mis asuntos, no les conviene, ya vieron que Percy esta bien así que pueden largarse-dijo Kate fríamente.

- Oye como te atreves hablarnos así.

-¿Cuanto tiempo estuve desaparecida?.

-Como 12 horas- respondió Derek.

-¡No me jodas!. ¿Que hora es?.

- 3 de la tarde-me respondió Percy mirando su reloj.

-Tenemos 5 horas antes te de ir por el tridente. Será peligroso Percy habrán muchos tritones tratando de conseguir lo que nosotros queremos.

-¿Estas bien armado?.

- Tengo mi espada.

-No es suficiente-aseguró-Derek ¿donde están mis armas?.

-Primer armario a la derecha.

Kate fue hacia el lugar indicado y tomó su bolso.

- Bien...ahora que podría retener a unos tritones... Emm- miró sus armas-lanzas o mejor balas, si eso no podría retenerlos.

-¿Sabes usar una pistola?.

-No...

-Derek enseñale como-el asintió.

-Pero...- lo miré.

- Hoy no podrían usar lo que normalmente usan para el defenderse. Ellos podrían controlar sus armas ya que tienen el poder de manipular algunos objetos y no quieren quedar indefensos solo porque les quitaron las espadas.-pensó un momento-Pero...no pueden detener las balas ni flechas que vayan a gran velocidad.

- Nosotros podemos ayudar-dijeron Annabeth y Grover al unísono-.

-Siempre que no estorben.

- No lo haremos.

- Okay, entonces todo está listo.

Tocaron el timbre.

Kate fue a abrir y se encontró con alguien que no esperaba.

- Peter...

El retorno [ADUS #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora