Capítulo 1:Mi Realidad

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Canción: I Knew I love You- Savage Garden

"I knew I love you before I met you I think I dreamed you into life. I knew I loved you before I met you I have been waiting all my life"

Album "Just Me" Lena Luthor.

Los Ángeles, California

Finales de Agosto 2015

Las notas de un piano llenaban cada uno de los rincones de aquella enorme casa ubicada en una de las zonas más exclusivas de Los Ángeles. Las teclas tocadas con maestría producían un sonido envolvente que cautivaba al que tuviera el placer de escucharlo. Las manos de una pianista se movían ágilmente sobre su más amado tesoro. El último regalo del gran del pianista "Lex" Luthor. Lo único que realmente había recibido de su padre, un piano.

Lena Luthor suspiró mientras movía sus dedos automáticamente sobre las teclas de su piano pensando en el concierto que tendría ese mismo día frente a diez mil personas. Sus ojos se perdieron en la hermosa vista del jardín que se extendía frente a ella. Era una casa enorme pero muchas veces el silencio lograba deprimirla.

¿Ella sentirse sola? Era un poco irónico y hasta risible. Ella era la gran pianista y cantautora Lena Luthor. Aclamada por la crítica y adorada por el público. De cara al público tenía todo lo que un ser humano podría desear: fama, fortuna y amor. Estaba casada con uno de los abogados más prometedores de Los Ángeles Jack spheer y Lena era muy feliz a su lado.

Habían sido amigos toda la vida desde que ambos vivían en Miami aunque al salir del instituto se habían separado. Jack había sido un niño adoptado de una familia poco adinerada que a base de becas por su talento para el basketball había logrado graduarse del instituto y de la misma forma conseguir entrar a UCLA donde había estudiado leyes. Lena por su parte siempre había sido una niña prodigio.

Primera en su clase, llena de lujos y comodidades por ser hija de uno de los mejores pianistas de esa época: Lex Luthor . Él había sido un hombre talentoso, que había heredado a su hija con ese mismo talento para la música. Lamentablemente era lo único que había hecho por ella. Lena jamás había tenido una visita de cumpleaños, un abrazo o un beso por parte de su padre. Las visitas habían sido mínimas. Un regalo de cumpleaños, una tarjeta que escribía su manager. Ese había sido Lex Luthor para su hija. Un desconocido que pagaba su colegiatura y le daba una vida llena de lujos, y que había muerto debido a una sobredosis de droga en un hotel en New York.

Un hombre que para Lena no había significado más que un artista en la televisión. Un ídolo y un imposible. Alguien que le había roto el corazón desde niña y que esa herida jamás había podido sanar a pesar de haber pasado ya veintiséis años. Su madre, por otra parte, había trabajado siempre muy duro. Ella era la única que había apoyado a Lena con su talento. Aunque dos años atrás la hubiera perdido debido al cáncer.

Pero Lillian Luthorsí había podido disfrutar del triunfo de su hija. De verla en conciertos, ganando reconocimiento y premios. Premios que en cada uno de discursos de agradecimiento había dedicado a esa mujer que siempre la acompañaba, hasta que la enfermedad la fue venciendo. Uno de los momentos más duros para Lena fue darse cuenta que a pesar de tener todo el dinero del mundo, había algo que jamás podría obtener: La recuperación de su madre.

La nostalgia llegó a ella mientras su instrumento tan querido reflejaba sus sentimientos. La muerte de su madre había quebrado su mundo. La había vuelto un poco cínica y melancólica. La muerte de su madre había matado su ilusión de triunfo y de disfrutar la vida. Se había perdido en un mundo de destrucción.

Amanecer en VancouverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora