Juliet (Daddy Issues) ★ Taekook ★

Noveno.

En la mañana, Kim Ara ordenó que sirvieran el desayuno tal y como a su esposo y a su hijo le gustaba.

Taehyung bajó poco después de que lo llamaran y le dio los buenos días y un beso a su madre, más tarde y con la mirada pensativa bajó su padre y en silencio se sentó a desayunar.

—Hoy debes volver a casa, Taehyung. Eso significa que nada de escapadas por ahí, ¿estamos claros?

—No. —En otras circunstancias, Taehyung hubiera permanecido callado y sin decirle o recriminarle nada a su padre, pero era tan constante que le colmaba la paciencia. —Tengo el derecho a salir, no soy un preso y no he hecho nada malo.

—Casi lo haces y no vamos a discutir eso de nuevo, ya te dije que te comportes a la altura. Eres mi heredero y ya deberías estar pensando en una linda novia y no en tus desviaciones.

Claro que era hipócrita. Demasiado.

—Comamos. Por favor, Sungye. —Suplicó su esposa.

Y solo para no avivar la discusión de siempre decidió no debatir más sobre las opiniones que tenía.

Por eso Jungkook le servía, era su escape y le devolvía a la vida y todas las emociones que sintió cuando era joven. De no haber sido por la existencia de Taehyung no se habría casado con Ara y también porque su mamá prácticamente le obligó a hacerlo.

Ara era muy bonita, no lo contradecía más que para mantener las apariencias y era una buena madre, dentro de lo que cabe, para Taehyung. Justo como lo esperaba, como lo necesitaba.

Pero Jungkook era de igual manera, con un rostro absolutamente hermoso, lleno de vida y con necesidad de elevar su cortisol, aunque fuera poco impresionable.

Las semanas siguientes continuó frecuéntadolo, seguían viéndose y le había regalado infinad de cosas que Jungkook agradeció con educación, sin embargo no desbordaron en él la felicidad que deseaba provocarle.

Es que, ¿qué no le había comprado? ¿A dónde no lo había llevado? ¿Qué no estaba haciendo bien? Nada de eso surtía efecto y no podía volver a ver esa hermosa sonrisa que ponía Jungkook cuando estaba con Taehyung, específicamente el día en el que los encontró a los dos ebrios en el estudio de Seung.

Maldito sea Jungkook y su suerte de nacer en una familia adinerada. 

Era justo eso lo que no funcionaba, no podía comprar a Jungkook con regalos costosos ni con restaurantes elegantes porque Jungkook no era pobre. La gente común se impresionaba con un buen auto, una cena elegante y regalos del mismo valor, pero ¿cómo impresionar a un chico que era de su mismo extracto social? Alguien que se podía comprar todo eso que él le daba con su trabajo o solo pidiéndoselo a su padre.

Debía ganárselo de alguna forma y para su fortuna, Sungye conocía el punto débil de Jungkook: su papá. Jungkook podría hablar más de mil horas de lo mucho que amaba a su padre y cómo lo odiaba por no corresponderle de la misma manera.

Pero la pregunta era, ¿por qué no? Jungkook era un chico muy educado, bastante inteligente que había desbordado esa energía a algo más artístico, además de ser astuto y de que era cierto que sí, era un poco rebelde. Sin contar, que ya trabajaba y que no tenía alguna necesidad de hacerlo. Nada de ello era una característica problemática, o algo más que asuntos de adolescentes de los que no había que quejarse.

Sungye sospechaba que Seung tenía un desprecio a su hijo porque era gay, debía ser por eso. Pese a que Sungye tampoco deseaba que Taehyung fuera así, su "desprecio" no era porque tuviera conflicto con la sexualidad de alguien y menos de su hijo, sino meramente por celos.

Él lo sabía, sabía que Jungkook estaba enamorado de Taehyung y que se lo había confesado una vez, pero las circunstancias y el haberse quedado con el teléfono de su hijo hicieron que este nunca lo supiera. Debía ser de esa manera, porque también comprendía que si no le ponía un límite a Taehyung respecto a Jungkook, él iría tras él. Entendía que la suerte o cualquier motivo por el que Jungkook se haya fijado en él, acabaría si tanto Taehyung como Jungkook se enteraban de que sus sentimientos eran correspondidos.

Y si debía obligar o mandar lejos a Taehyung con tal de alejarlo de Jungkook, lo iba a hacer. No podía retractarse en ello, porque debía admitir que estaba un poco obsesionado.