Lunes 5 de agosto de 2002
Ichigo y Rukia se separaron y se miraron con sonrisas insoportables. No estaban en un área muy traficada y no habían llamado la atención, lo cual era igual de bueno porque no tenía el corazón para dar conferencias a ningún subordinado en ese momento.
Se frotó la parte posterior de la cabeza mientras miraba hacia otro lado. "Hizo sonar que estaríamos viviendo juntos."
"No ya lo estamos?" ella preguntó.
"Bueno . . . sí, pero—" comenzó.
"No te preocupes tanto", respondió a la ligera.
Ichigo la miró hacia atrás y en el momento en que sus ojos se encontraron con los suyos se encontró dando una sonrisa tímida.
Ella sostuvo su mirada por un momento y dejó que sus párpados cayeran y la expresión cambiara un poco en aprobación. "Lo manejaste bien."
"Simplemente hice lo que parecía correcto", dijo, antes de murmurar con algo de humildad "Me imagino que en algún momento voy a tener que amenazar con romper algunas piernas en nombre de Karin y Yuzu, así que me imaginé lo que tendría que ver y escuchar para estar satisfecho en sus casos."
Rukia parpadeó antes de reírse de la imagen mental de Ichigo actuando como Byakuya cuando amenazaba a los futuros novios de sus hermanas.
"Qué?" preguntó, de repente se ve irritable.
"Estaba pensando en lo similares que pueden ser los hermanos mayores a pesar de sus otras diferencias", bromeó.
"No digas cosas así", respondió Ichigo de mal humor.
"Tal vez puedas preguntar nii-sama para obtener consejos en algún momento", continuó, antes de mirar. "De todos modos, estamos aquí ahora, así que hay algo que quieras hacer antes de regresar?" Se habían ido por menos de una hora. De alguna manera, todo había sido anticlimático, aunque eso era definitivamente preferible a la alternativa.
"En realidad no", dijo, considerando. Realmente no había nadie que conociera y necesitara hablar o ver que no se habían encontrado recientemente, excepto tal vez los hermanos Shiba, y aún no estaba listo para presionar ese punto si Rukia no lo estaba. "Probablemente deberíamos agradecer a Renji nuevamente, pero cruzar el Seiretei consumiría mucho tiempo y sería un poco extraño después de encontrar a Byakuya para ir a su División", agregó.
Rukia asintió y sacó su buscapersonas del alma, diciendo "Estaba pensando que podríamos ir al parque Yoyogi y algunos lugares por allí."
Él respondió "Sí, estaba pensando tal vez eso o Ueno Park." Cerca había varios otros puntos de interés. "Eso podría tener más sentido dado el clima", agregó.
"Miraste los planes?" ella preguntó con leve sospecha.
"Pensé que apreciarías que tuviera una opinión informada", dijo con un toque de reproche arrogante, cruzando los brazos.
"No es muy caballeroso husmear en las pertenencias de una dama, incluso si lo haces por una buena causa", castigó mientras le movía un dedo.
Ichigo dejó escapar un hmph pero tomó el punto sin objeciones, mirando a su alrededor. El clima en Soul Society fue bastante menos dramático que en Tokio, siendo soleado y cálido sin estar caliente. "Sabes, ir a un solo conjunto de lugares no es probable que ocupe todo el día a menos que sean los viajes a Toshimaen o Fuji-Q Highland, y si los quemamos rápidamente, no nos quedará mucho más de interés que los clubes nocturnos, restaurantes y tiendas", reflexionó. Aunque estaba dispuesto a ir a los principales museos, parques y santuarios, no estaba particularmente interesado en ir a los más oscuros, por lo que tuvieron que ser reparados a tiempo.
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Demonios del sol y la luna -HIATUS-
FanfictionIchigo y Rukia se reencuentran inesperadamente en Tokio el verano después de la derrota de Aizen. Al descubrir que tienen que aceptar sus formas de lidiar con la guerra, con ellos mismos y con los demás, comienzan otro viaje juntos que eventualmente...