Una para todos nosotros (Tokyo revengers x tn)

Cap 28

Pensaban contármelo?-pregunte observando a cada uno de mis hombres,que evitanban mi mirada intensamente dolida,mientras del fondo de su pecho gruñian y ronroneaban en desaprobación,al oler mi inseguridad,mi miedo,mi todo.

El silencio lo dice todo...-suspiré levantándome de la cama y dirigiéndome a la cocina,seguida de toda la manada

Dejanos explicarte,cariño...-suavizó la ronca voz de Mitsuya con miedo al ver mis ojos vacíos y reacia a su tacto,al de todos ellos.

De quien es...el cachorro,de esa mujer?-hablé dolida observando de nuevo sus rostros,reflejando su ira contenida,su tristeza resplandeciente y su miedo a perderme,con sus orejas esponjosas agachadas,con sus miradas decaídas,perdidos en un mar de incertidumbre,del que solo prometía dolor.

Nara...amor...por favor,no nos hagas esto...dejanos explicarte,si?-rogó entre ronroneos la voz de Hanma,mientras se arrodillada frente a mi y abrazaba mi cintura,pegando sus orejas peludas a mi abdomen,escuchando los pequeños latidos del bebé,ser acompañado de un frenético y dolido corazón,que amenazaba con romperse en cualquier momento.

Y de nuevo me separe de su roce,de su tacto,manteniendo una distancia prudente,dándoles la oportunidad de hablar,explicar realmente lo que tanto temían,lo que tanto les costaba admitir en sus bocas silenciosas.

Ella...-empezó diciendo la bestial voz de zorro que Sanzu poseía,con tanto miedo y temor reflejado en sus ojos verde oliva,que tanto me gustaban.

Esa mujer forma parte de nuestro pasado...-siguió la profunda voz de Ran junto a su hermano,meneando sus orejas lobunas,atentos a mi reacción,pensando en las miles formas de recompensar ese fallo que tanto dolía,con tal de que permaneciera a su lado.

Nunca llegamos a tener algo serio con esa mujer,solo nos ayudaba con nuestro celo,cariño...-prosiguió con un ronroneo gatuno Kokonoi mostrando sinceridad en sus palabras, mientras que con miedo bañado en sus ojos,intentaba acariciar con la yema de sus dedos mi mejilla,como si se tratase del mismo cristal

Pero un día,se obsesionó con algunos de nosotros y tuvimos que dejarla...jamás pasó por nuestras mente que ella...bueno,que ella quedara embarazada de nuestro cachorro y que vendría a buscarnos,a deshacer todo lo que habiamos creado,contigo...mi niña,escuchanos...por favor!-finalizó Draken nervioso arrancando de un tirón la coleta de su trenza,hasta dejar su cabello largo y suelto,con desesperación en sus palabras,con ruego en sus profundos ojos de híbrido, que tanto me atrapaba,hasta el punto de casi robarme el aliento.

Mi amor...por favor...-susurró Wakasa por primera vez mostrando una ligera voz rota y ronca que amenazaba salir de su pecho,con sus ojos gatunos fijos en su preciosa esposa,en la única mujer que le había entregado tanto,hasta atrapar su corazón,su mente,su deseo más primitivo de formar una familia,una manada.
Mostrando tan intensamente lo roto que estaba,el extraño dolor que estaba experimentando por primera vez,culpando al amor,exigiendo respuesta de porque estaba pasando todo aquello,mientras su mente se nublaba,al ver como su mujer se escapaba de sus manos,se alejaba de todos ellos,su compañera de vida,su hembra,su mas preciada familia,al notar como su mundo,era derrumbado con aquellas palabras,por esa estupida hembra de cabello oscuro que juró amar falsamente alguna vez,tan mala como una víbora,arrasando todo a su paso,dejando un intenso y profundo dolor amenar sobre su pecho,con el objetivo de terminar todo,dejando grabado a fuego en su mente,ese claro mensaje,que no se atrevía admitir,negándose una y otra vez,no queriendo enfrentar la realidad,a lo que ellos temían,con miedo a perder a su compañera y hembra de vida, a lo que habían creado con tanto amor,lo que habían logrado formar en su vientre,sembrando su semilla, queriendo no hacerse a la idea,de que todo había acabado.

Mi vida...para nosotros eres la única,ella no...no...-continuó Kakucho nervioso,acompañado de un rugido feroz,mientras lágrimas salían de sus ojos carmesí,llenas de dolor,mostrando lo frágil que era su corazón,viendo lo roto que estaba.