𝑽𝒆𝒊𝒏𝒕𝒊𝒔𝒊𝒆𝒕𝒆

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                  •VALENTINA'S POV•

-Hola preciosa mía, ¿Como estás? -El Jere entró a la habitación donde yo estaba hospitalizada mientras tenía un ramo de flores en sus manos, siempre que iba a verme al hospital lo hacía.

-Bien, aunque aún un poco desconcertada. -Respondí mientras me acomodaba en aquella camilla, ya llevaba un par de días aún hospitalizada.

-La doctora me dijo que ya andas evolucionando, cada día los dolores de cabeza disminuyen y puedes pararte sin marearte, tus defensas han mejorado. Me alegro mucho de eso mi amor. -El me besó
la cabeza mientras me acariciaba la espalda.

-¿Como esta el Vicho? -Le pregunté tratando de evitar hablar de mi salud, digamos que aun me afectaba recordar todo, sin duda al salir de este estado iría a terapia.

-Bien, fue dado de alta ayer, y hablando de eso... Perdón por no haber venido a verte ayer, tuve muchísimas cosas que hacer... -Hizo una sonrisa media forzada, hasta podría decir que triste.

Desde que caí hospitalizada, el Jere vino a verme siempre todos los días sin falta a la hora de almuerzo para asi comer juntos, según la enfermera el mes que estuvo en coma el siempre venia un flores nuevas, la habitación estaba inundada de flores, había el ambiente mas lindo.

La Aracely también venia seguido a verme, siempre compartíamos momentos juntas.

-No te preocupes amor, entiendo ¿Estas bien de ánimo? -Ahora le pregunté yo.

-Si... -Dijo mientras suspiraba.

-No, no lo estás. Te conozco ¿Que pasa? -Me atreví a preguntarle, lo conozco y el bien no estaba, tenia otro brillo en sus ojitos.

-Ayer en la mañana falleció mi abuela. -Dijo mientras bajaba la cabeza.

Sin decirle nada más lo abrace. El se puso a llorar mientras se aferraba a mi e durante el abrazo, solo me dediqué a consolarlo, en estos momentos el odia verse vulnerable.

-Ya, amor. Si necesitas llorar hazlo, estare aca para apoyarte hoy y siempre. -Dije aún consolándolo, el nunca se mostraba a mi en ese estado, asique las veces que lo hacía trataba de no hacerlo sentir mal.

Duramos hartos minutos en silencio, mientras el lloraba en mi hombro yo lo consolaba.

-El funeral es mañana. -Dijo sobándose la nariz.

-Perdon por no poder acompañarte, no se cuando mierda me van a dar el alta. -Dije frustrada, llevaba muchos días acá, había subido rápido de peso gracias a las vitaminas y las comidas que acá me daban. Ya deberían de darme el alta.

-No iré.

-¿Por que? -Comente preocupada.

-No me gusta el ambiente de los funerales, aparte ando peleado con media familia, prefiero que no.

-Deberias ir a despedir a tu abuela, eras su regalón.

-Ahí vere... ¿Aun no te dicen nada sobre darte de alta? -Cambio el tema.

-La doctora dijo que podría ser dentro de esta semana. Pero es lunes recién. -Hice una mueca.

-Hablare con ella. -Dijo mientras me hacía cariños en la cabeza.

Yo solo asentí mientras disfrutaba de su tacto.

-Adivina que traje de almuerzo. -Se paró de la habitación para salir de esta.

A continuación lo que visualice fue maravilloso.

-¡Comida italiana! -Grité emocionada al ver.

-Si amor, exactamente del restaurant favorito tuyo. -Dijo levantando sus cejas.

XQ TAN SOLA?┊ 𝐽𝑒𝑟𝑒 𝐾𝑙𝑒𝑖𝑛 🐊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora