EL PRINCIPIO DEL FIN.

CAPÍTULO VEINTE: DÍAS DESPUES.

Se había acercado año nuevo y todos decidieron de común acuerdo que era mejor que la pasarán todos juntos.

Iban a reunirse en la casa de Sol que tenía un gran espacio en el jardín... La casa de Sol no, mejor dicho la casa de Christian y Sol.

-¿Alejandra ya estás lista?-preguntó Ezequiel.

-Ya casi-gritó Alejandra desde la pieza.

Cuando Alejandra salió de la pieza, llevaba puesto un vestido y tenía el pelo planchado.

-¡Por fin! Vamos a llegar tarde a la fiesta-exclamó Ezequiel.

-Es temprano todavía-dijo Alejandra riendo-. Vamos papá.

Ezequiel se quedó impactado ante lo que había dicho Alejandra, ya que no se esperaba que le dijera papá tan rápidamente luego de todo lo que había pasado.

-Me dijiste papá-dijo Ezequiel lentamente.

-En algún momento lo iba a tener que hacer, y creo que mejor empezarlo en este año que va a ser un borrón y cuenta nueva en todo lo que pasó-dijo Alejandra.

Ezequiel miró a Alejandra y le sonrió mientras que ella le devolvió la sonrisa. Salieron de la casa y apagaron las luces, subieron al auto y se dirigieron en dirección a la casa de Sol y Christian.

Aunque había perdido a Carla, la convivencia con Alejandra le había ayudado a poder llevar la mejor la situación a Ezequiel. A pesar de que Alejandra también extrañaba mucho a Carla ya que ella le había salvado la vida, sabía que ella hubiese querido la felicidad de Ezequiel y Alejandra se lo tomó como un objetivo a cumplir y a hacer valer ese deseo.

Christian estaba terminando de darle los últimos detalles a la mesa y a la casa antes de que llegaran los invitados, mientras que Sol estaba en la habitación terminándose de preparar para la noche.

Mientras Sol bajaba por las escaleras, Christian había entrado a la casa ya que estaba todo listo, y su mirada se quedó paralizada en Sol que bajaba las escaleras. Sol se reía al ver la expresión de Christian mientras que él había quedado hipnotizado mirando a Sol de pies a cabeza.

-Estás hermoso-dijo Christian aún sin poder dejar de mirar a Sol.

-Gracias, tú también y mucho-dijo Sol rodeando el cuello de Christian con los brazos y Christian la besó.

-¿Ya está todo en su lugar?-preguntó Sol después de unos minutos.

-Todo en orden y listo-dijo Christian.

-Entonces, tendremos que esperar a que lleguen-dijo Sol y encendió la televisión.

Christian tomó el control de la televisión y la apagó.

-Bailemos-dijo.

-¿Bailar? Soy horrible-dijo Sol.

-Deja que te lleve y verás cómo podrás bailar-dijo Christian y encendió el equipo de música y puso un tema lento.

Después de media hora bailando sonó el timbre, pusieron música movida y fueron a atender.

-Eso no combina-dijo Micaela por tercera vez.

-¿Qué quieres que me ponga entonces?-preguntó Lucas cansado.

Micaela abrió el placar y comenzó a buscar ropa que le quedará bien a Lucas y por cuarta vez Lucas entro al baño y se cambió. Cuando salió tenía puesto converse negras un pantalón chupín y una camisa a cuadros.

-Mírate al espejo-dijo Micaela.

Lucas se acercó al espejo y vio como le quedaba la ropa y como había dado su aprobación ya podían irse.