Pasaremos a la historia

Capitulo 11

Esta historia es una simple traducción nada me pertenece todo y está prohibido copiar la traducción o la trama de esta historia ya que no me pertenece. Es de elenaxriddle

El punto de vista de Hope

Para alguien que tiene toxinas letales corriendo por sus vasos sanguíneos, Kol se mueve muy rápido. No tengo idea de cómo logró salir del carruaje en primer lugar, cuando estaba casi inconsciente hace un par de minutos.

Lamentablemente, esa no puede ser mi principal preocupación en este momento, ya que estoy demasiado ocupado luchando por mi vida.

Kol me ataca con todo lo que tiene, pero no usa sus colmillos por miedo a que mi sangre le afecte de la misma forma que anoche. Pero es solo cuestión de tiempo antes de que se dé cuenta de que, ahora que la luna llena ya no está en el aire, mi sangre ya no es tóxica.

De hecho, si se alimenta de mí, mi sangre tríbrida realmente lo curará.

1

Empiezo a ver estrellas cuando sus puños chocan contra mi mandíbula y luego contra mi pómulo. Me defiendo lo mejor que puedo, tratando de recordar todo lo que Alaric me dijo durante nuestras sesiones de entrenamiento.

Recibo varios golpes fuertes antes de poder asestarle un puñetazo en la barbilla a Kol. Se tambalea durante unos segundos, pero luego regresa y me ataca con aún más ferocidad.

Rápidamente me doy cuenta de que, si no fuera por el veneno de hombre lobo que todavía está presente en sus venas, estaría muerto. No importa lo bien que luche, no soy nada, absolutamente nada, contra un ser de setecientos años como Kol.

Caigo al suelo y Kol me agarra el cuello, como si quisiera torcermelo.

Se oye un chasquido y, por una fracción de segundo, me pregunto si estoy muerto.

Pero luego me doy cuenta de que el sonido no viene de mí.

Miro con los ojos muy abiertos el cadáver de Kol, que yace sobre la nieve como si fuera una exhibición.

—No está mal —dice mi padre mientras se sacude el polvo de las manos—. ¿Quién te enseñó a pelear?

"Un amigo de la familia", gruño mientras me levanto del suelo. Noto que mi muñeca está doblada en un ángulo extraño y dejo escapar un grito de dolor mientras vuelvo a colocar mis huesos en su lugar.

"Bueno, este 'amigo de la familia' claramente no tenía idea de lo que estaba haciendo", dice mi padre, mientras mira los moretones en mi cuello y mi cara.

"Fue un gran maestro, muchas gracias", escupí, "simplemente me tomó por sorpresa, eso es todo".

—No —dice mi padre con sencillez, encogiéndose de hombros—. No, era un profesor terrible. ¿Sabes por qué? —dice, y continúa antes de que pueda interrumpirlo—. Porque no tuvo en cuenta lo que eres.

"¿Qué soy yo?" Me burlo.

—Sí —dice mi padre—. Por un lado, eres un hombre lobo y, por otro, eres una niña.

"¿Qué carajo significa eso?" digo incrédulo.

"Eso significa que tienes una constitución más pequeña que tus oponentes. Pero, al mismo tiempo, como hombre lobo, tienes más poder en tu cuerpo que cualquier otra especie en la Tierra. Toda esa fuerza, compactada en una pequeña masa. Esto debería ser suficiente para decirle a cualquier mentor decente que necesitas concentrarte en la fuerza de tus piernas y que necesitas atacar a tus enemigos usando la atracción gravitatoria de la Tierra como una ventaja".