Nogue

Canción de noche

No fue a primera vista. Pero fue la unión más hermosa de todas
Ella alimento mi imaginación. Llenó de mil novedades los tantos vacíos de mi mente hambrienta
Conocerla fue una poesía. Fueron mil canciones.
Grabamos un disco con las anécdotas más extrañas, mas intrigantes, más divertidas y las más bellas.
Esta aun ahí, en la mesita de luz.
Alimentó mi espíritu con ese amor ideal, tan limpio, tan puro.
Tan suave como la seda y hermoso como un sueño que se vive,
pero los cuentos de hadas no sobreviven mucho tiempo en el mundo real, y comenzó la temporada de las lluvias oculares.
Fueron muchas tormentas. Después una gran inundación, un mar de lágrimas.
Ella se fue navegando, yo me hundí en aquel mar de tristeza
Y me volví frío como un pez.
Y la presión de aquel abismo melancólico presionaba mi pecho con la fuerza de un dragón
Abajo en el abismo reina la oscuridad, y nada bello puede verse. La corriente remueve constantemente aquellos dolorosos recuerdos en un vaivén de sentimientos.
Hallé el reino de los corazones rotos, donde habitan los fríos, los que sueñan con una tibieza que no podrían soportar.
Hay criaturas que por vivir mucho tiempo en la oscuridad y el frió, se vuelven vulnerables al calor y la luz, la cual lastima sus ojos, y quema su alma.
Pude presenciar cómo son pescados con falsas ilusiones, promesas de recuerdos tibios y luz. Y después mueren asfixiados en el calor de la superficie.
O bien eran hallados por navegantes de la vida. Buenas personas que les ofrecían el más dulce calor, pero no lo soportaban mucho tiempo: aparecían llagas en su alma y huían lastimados.
Me dormí en una burbuja, para soñar con lo que pudo haber sido.
Y me deje llevar
Alimente mi anhelo con sueños
Soñando llegue hasta las estrellas.
Subí y subí
Solo que todo tiene un final...
¿Acaso la ilusión de realizarlos es lo que impide que los sueños caigan y se estrellen en una realidad pesimista? ¿Qué es lo que impulsa esas ganas de realizar un sueño, si acaso aquello que queríamos tanto resulta ya imposible?
así pensaba, mientras volaba en el tiempo, por épocas perdidas, y nostalgias ya heladas
Así concluye mi historia.
Fui y volví.
El disco en mi mesita de luz sonó muchísimas noches.
Fueron muchísimas noches de escuchar melodías alegres con letras tristes, canciones tristes con letras alegres.
Ella fue mi canción de madrugada.
Madrugada de luna y recuerdos.
No hace falta una metáfora para contar algo tan casual, lo sé. Pero hay imágenes que no me atrevo a dibujar.
De todas formas, son cosas que pasan,
de lo vivido se aprende. Porque a pesar de todo estoy contento de haberlo vivido, por los buenos momentos. Y aunque pasaron miles de lunas, sigo pensando que es una hermosa canción:

La más hermosa de todas.