Capítulo 3

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«Su primer instinto a la mayoría de las cosas que le suceden es dañarse a sí misma, y ella no quiere sentir eso más»

Escucho las campanas sonar dentro de mí una vez que haya procesado sus palabras, sus brazos a mí alrededor se sienten demasiado bien para mi gusto, pareciera que estoy en su sueño.

—Tal vez sea hora de olvidar algunas cosas, ¿no? —Lo miré esperando a que continuara— Vamos a olvidar los momentos malos en tu vida, Luce.

—No es posible hacerlo.

—Soy Ashton Irwin, puedo hacerlo posible.

Lo miré y ambos sonreímos, él es Ashton Irwin, el chico que puede hacerme cambiar.

Lo abracé fuertemente cuando comenzamos el camino a casa luego de recordarme que al otro día debía despertar temprano.

(...)

Nuevo Mensaje: Número Desconocido

¿Puedo pasar por ti a la salida? Ps: soy Ashton.

No me molesté en preguntar cómo había conseguido mi número, no tenía importancia realmente. Tomé mi bolso y salí de casa camino a la de Sally.

Nuevo Mensaje: Ashton Irwin

¿Pasa algo? ¿Hay algún problema con qué vaya? Sé que me quieres ver, Luce, yo quiero.

Ashton quería verme.

Respira Luce.

Ashton quiere verme.

Es imposible respirar luego de eso.

Él. Quiere. Verme.

Sonreí al ver la última parte del mensaje para después guardar el teléfono en mi bolsillo.

—Tienes una cara de como si no hubieses dormido en toda la noche —Se burló Sally.

—Puede que sea porque alguien me obligó a salir, ¿no lo crees?

—Pero no he sido yo quien te ha obligado a largarte con Ashton a sólo ustedes saben dónde.

—Cállate.

Sentí mis mejillas sonrojarse haciendo que ponga mis manos sobre estas. En el momento en que me fui con Ashton me olvidé completamente de quienes nos acompañaban en un principio, sólo quería verle y estar con él.

Llegué tarde a clases porque estaba demasiado preocupada en mis pensamientos como para caminar rápido hacia la sala, una vez sentada en mi puesto intenté poner toda la atención posible hacia lo que el profesor intentaba explicar.

¿No crees que él sólo esté jugando contigo?

No.

¿Por qué iba a gustarle una pequeña niña que salvó de morir?

Para.

Cuando algo bueno está pasando en mi vida me encuentro aquí otra vez, luchando contra mí, luchando con todo lo que quiero ser.

Me gustaba ser amiga de Sally, ella se encontraba en cada momento junto a mí evitando que estos pensamientos volvieran. Desde un principio supimos entendernos sin decir una palabra, me acompañó en cada momento, cada oportunidad que tuvo de defenderme la tomó y, de cierta forma, sabía que jamás me dejaría sola. Estuvo junto a mí la primera vez que me obligaron a hablar en público ya que sabía los muchos nervios que sentía y ella había pasado por lo mismo, estoy segura que también estará a mi lado la última vez que sea obligada a hacerlo.

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