Capítulo 3. Londres.

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Nosotros tenemos una costumbre de ir a Londres el fin de semana de una semana antes de las semanas de exámenes para así luego tener un semana de estudios más tranquila y comenzar a presentar pero todos sabemos que a medida que pasan los días más nos estresamos y no queremos que nadie nos toque, Liz y yo ya estamos en la estación de trenes esperando por Matt y Alex para así irnos todos juntos, yo como de costumbre llevo mis audífonos puestos y canto algunos pedazos de "fallingforyou" de The 1975 que es la canción que se reproducía. Mientras esperábamos la llegada del tren no pude evitar fijarme en un chico castaño que estaba relativamente cerca de nosotros, lo que me llamó la atención fueron sus tatuajes, Dios mío el tatuaje de rosa en su cuello es que me estoy muriendo, los chicos así son mi debilidad, se ve que es joven no creo que tenga mi edad, se ve unos cuantos años mayor que yo pero no tantos y justo cuando mis pensamientos se comienzan a ir hacia otro lado y empiezo a fantasear Alex me saca de ahí.

— Límpiate la baba cariño, un poquito más y creo que le quitas la ropa —me dijo en un susurro al quitarme los audífonos.
— No me digas que se dio cuenta de que lo miraba —susurré en respuesta.
— No, pero Matt si y yo no se si es que le gustas o algo porque se ha puesto tenso —
— Eso es una estupidez, Liz y tu viven diciendo eso y yo no lo creo —
— Friendzone —dijo Liz en uniéndose a nuestros susurros.
— Venga chicas, no se de que hablan pero el tren ya ha llegado y no lo podemos perder —Matt nos empujó a las tres dentro del vagón y tomamos asientos juntos.

Hoy es viernes en la tarde y Londres estaba a unas pocas horas de Oxford así que al llegar podríamos salir en la noche y el viaje sería realmente corto, eso no quiere decir que a Alex y a Liz no les haya dado un momento para dormir, Matt y yo comenzamos a hablar desde mi corte de cabello porque me cansé de tener el cabello largo hasta llegar al tema de Oliver lo que hizo que la conversación se tornara algo incómoda yo de verdad no sabía que quería el, solo le seguía la corriente aunque normalmente terminaba mandándolo a la mierda, me perdí por unos segundos en la conversación porque de nuevo el chico de la rosa en el cuello llamó mi atención y esta vez parece que se dio cuenta de que lo miraba porque hizo contacto visual conmigo el cual tuve que romper aunque no quería.

— Charlotte ¿estás ahí? puedes dejar de ver al tipo tatuado y mirarme a mi cuando te hablo, por favor —me habló con un tono pesado y como si estuviera molesto, nunca le había visto así. 
— Y-yo lo siento Matt —me disculpé tartamudeando un poco.
— ¿Qué fue lo último que dije? —
— No lo se... —dije en un tono de voz bajo y el me volteó los ojos, al ver que estábamos cerca de llegar fui despertando a Liz y a Alex mientras sentía la mirada de Matt y al parecer la del castaño con tatuajes porque volví a hacer contacto visual con el lo que hizo por alguna razón que me sonrojara y saliera casi que corriendo del vagón al este detenerse.
— Charlotte me puedes explicar ¿qué pasó mientras Alex y yo dormíamos? —
— Te explico en la casa -le respondí a Liz mientras esperábamos por los dos que faltaban, con la suerte que tuvimos conseguimos un taxi que nos dejó de una en casa de mis padres.

Dejamos nuestro equipaje y nos arreglamos para salir, fuimos a uno de nuestros bares favoritos. Una vez ahí bailamos, bebimos, todo era diversión hasta que los brazos de un borracho me rodearon por la espalda abrazándome fuerte y pegándome lo más posible a su cuerpo, mis amigas andaban en el baño, Matt buscando más tragos y yo simplemente andaba buscando una mesa para nosotros.

— Pero miren a quien encontré, si es mi amiga Charlotte... —reconocía esa voz, intenté con todas mis fuerzas de salir de sus brazos pero era imposible.
— Oliver déjame ir, estas borracho —le digo en un tono duro aún tratando de zafarme
— No me esperaba encontrarte aquí... Mmm... Hueles tan bien —dice oliendo mi cabello.
— ¡Maldita sea! —había subido el tono de voz estaba a nada de gritar— ¡Te he dicho que me sueltes!
— Quiero hacer tantas cosas contigo... —
— ¡Ayuda! —grité antes de que Oliver cubriera mi boca con su mano y me empujara contra una pared yo no se si es que todos en el bar estaban ebrios o que pero ninguno veía la escena, ninguno venia ayudarme.
— ¿Por qué eres así conmigo Charlotte? ¿Por qué eres tan difícil? ¿Por qué no puedes ser como cualquier otra chica de la facultad? —susurraba en mi oído, yo no podía más con esto así que mordí fuerte su mano.
— ¡Maldita perra! —exclamó soltándome, rápidamente fui a donde había más gente cerca de barra pero el me tomó con fuerza del brazo haciendo que me volteara hacia el.
— Que me dejes en paz —dije volviendo a forcejear vi que iba a decir algo pero se calló y me soltó al ver a mis amigos venir hasta mi.
— ¿Qué te hizo Charlotte? —preguntó Matt con los puños cerrados viendo a Oliver alejarse.
— No me hizo nada Matt —respondí con un hilo de voz.
— Me estas metiendo ¡¿qué te hizo?! —la cara de Matt estaba roja y sus puños temblaban.
— ¡No me hizo nada! Por favor no vayas a hacer algo imprudente —le respondo viéndolo ir caminando hasta donde estaba Oliver pero mis amigas que no habían dicho nada fueron hasta el a detenerlo, pagamos por lo que habíamos tomado y nos fuimos hasta casa.

Lo que yo llamo casa es en verdad un apartamento de 4 habitaciones, 3 normales y 1 de servicio la cual se usa como una normal porque es bastante grande. Cuando mis padres no están suelen dejarnos la casa a nosotros para que tengamos más espacio, dormimos entre mi cuarto y el de servicio, cuando somos más metemos un colchón inflable en el cuarto de la computadora y ahí nos arreglamos, solo cuando es muy necesario usamos el cuarto de mis padres. Liz y Alex estaban prendidas, Matt no lo estaba tanto y yo, yo estaba prendida pero se me pasó todo con el incidente con Oliver, ahora se sus verdaderas intenciones, sabía que no me podía fiar de el.

Bueno esto es todo lo que subiré por hoy, trataré de mañana subir otro capítulo. Espero que les haya gustado :)

No way outDonde viven las historias. Descúbrelo ahora