𝐌𝐲 𝐀𝐧𝐠𝐞𝐥 ( 𝐘𝐨𝐨𝐧𝐦𝐢𝐧 )

† 18 †

Lavaba los servicios siempre teniendo cuidado de no romper ni uno, Jungkook había ido al colegio y la limpieza en la casa era escencial para que él pudiera solo concentrarse en sus trabajos del colegio.

No sabía cuánto tiempo había pasado y no quedaba mucho que hacer o eso creía, ya que no podía seguir sin hacer nada, así que me dispuse a limpiar algunos adornos de la casa, mientras pasaba uno por uno con aquella franela intentaba decifrar que figura era el adorno.

- Que haces? - Aquella voz me tomó de sorpresa provocando que soltará el adorno que tenía entre mis manos

- Y-Yo... Lo siento mucho no lo escuché entrar - hable disculpándome para intentar recoger los fragmentos de vidrio o porcelana, pero sentí como me tomaba del cuello para ser empujado al suelo con brusquedad

- Ya he tenido suficiente, no puedo creer que seas demasiado torpe - dijo en un tono de desprecio mientras yo buscaba cubrirme con mi brazos, no sabía que hacer o como reaccionar esto jamás había pasado

- No puedes golpearme, no tienes derecho a amenazarme - respondi parandome pero fui callado por el golpe que recibí en mi mejilla

- Eres un débil y asqueroso omega, con quién crees que estás hablando eh? - sentí como jaloneaba mi ropa para volverme a empujar al suelo

Me senté de golpe sintiendo mi corazón latir muy rápido, estaba sofocandome mientras que mi estómago se revolvía, así que intente levantarme pero caí torpemente, no pude evitar quejarme de dolor.

Me levanté como pude comenzando a buscar la pared para guiarme hacia la puerta, para ingresar y gatear hacia el tazón del baño y así comenzar a vomitar todo lo que anoche había logrado comer.

Mi cuerpo no dejaba de expulsar todo lo que tenía en mi estómago hasta que aquel característico sabor metálico tocó mi paladar.

Mis ojos se llenaron de lágrimas debido al pánico y mi corazón volvió a doler.

- No más....por favor... - susurre volviendo a arrojar

Llevaba días haciendo lo mismo, mi cuerpo ya estaba cansado y sin control alguno las ganas de vomitar se volvieron más bruscas, todo aquello estaba acompañado de los recuerdos pasados, los cuales hasta el día de hoy me siguen atormentando.

Unos suaves roces sobaron mi espalda mientras me aferraba al inodoro, llegue a pensar que se trataba de Jungkook pero no era su aroma, así que intente alejarlo pero las arqueadas fueron más fuertes.

- Tranquilo... - Un suave susurro llegó a mis oidos, sorprendentemente como las anteriores veces yo no tuve miedo, pero aún no podía bajar la guardia.

Sus feromonas envolvieron poco a poco mi cuerpo provocando que dejara de vomitar, cansado y sin fuerza me recosté en el inodoro, las lágrimas se acumularon en mis ojos.

"Impotencia"

Eso era lo que yo tenía al no saber cómo poder valerme por mi mismo, y colapse, nuevamente había tocado fondo, mil pensamientos y los recuerdos volvieron a abrumarme, lamentandome de lo tan desgraciado que era.

Aquel aroma se hizo más fuerte provocando que un profundo sueño me golpeará, mis ojos se sentían pesados, y sin más sentí como me cargaban, sus cálidas manos me tomaron con delicadeza, por instinto hundi mi rostro en su cuello, necesitaba más de su aroma.

Fui recostado en la cama pero antes de que se alejara logré tomar su mano.

- Por favor... - suplique no queriendo soltarlo, no era solo yo quien pedía su cercanía, mi lobo también lo rogaba.