Capitulo 25: Un día de playa

63 4 0
                                    

POV'Elías:

Creo que soy el primero en despertarme en esta habitación.

Todos están roncando como unas morzas. 

Me levanto de una vez por todas y me doy cuenta de que cada uno esta de una manera muy chistosa, rió lo mas bajo que puedo y me voy del cuarto, se que Loth y Cristian durmieron juntos, no quiero mas momentos incómodos; me basta tener que verlos dormir juntos para darme cuenta de que ambos se encantan y que yo me debo alejar.

camino en cunclilla y me asomo con cuidado para ver si los dos siguen durmiendo pero me dan la sorpresa de no estar ahí.

Escucho risas en la cocina, si no son ellos, no se quienes serán.

Bajo tranquilamente y veo la mesa servida, los dos tortolitos madrugaron para tenernos el desayuno  listo; se tuvieron que haber levantado muy temprano por que son las 7 y algo.

–Ya los íbamos a despertar para que comieran y pudiéramos ir a la playa hasta el medio día.–me habla Cristian.

–Pues te recomiendo que vayas a despertarlos como tenías planeado por que ellos siguen durmiendo.–le informo.

Me siento en un puesto y tomo los cubiertos para empezar a comer cuando

–Espera a que todos estemos en la mesa y comes ¿no crees?- habla Loth pero no me mira.

–¿Qué tienes?–Soy directo, pero no me acerco porque ayer al verla durmiendo con Cristian, me di cuenta cuál era mi lugar y desde ahora estaré alejado de ella, me lo repito muchas veces.

–Nada, es que tengo hambre–Me sonríe pero yo no le correspondo la sonrisa.

Dejo los cubiertos y meto mis manos debajo de la mesa.

POV'Jacob:

–¡Despierten!–gritan y golpean la puerta *pom pom pom*

Medio abro los ojos y Celeste esta con la cara contra la almohada; no se que sucedió,pero anoche soñé que eramos una pareja feliz, hasta que llegó una malvada bruja y nos separo.

Es algo estúpido, pero eso fue lo que soñé. 

Espontáneamente sonrió y Celeste abre sus ojos.

–¿De que te ríes?–me pregunta

–Ayer soñé contigo.

Ella se ríe como si no me creyera.

********

POV' Derek:

Ya todos están abajo, yo me levante y fui al baño; regrese y Gema sigue durmiendo. Creo que hasta esta roncando.

Me rió un poquito y comienzo a moverla; pero como no se levantaba, baje a la cocina y tome una olla con una gran cuchara, cuando iba a subir las escaleras Laila me habla.

–Despertaras a Gema ¿cierto?

–¿Seria muy cruel?

–Te recomiendo que se lo hagas en la oreja.–me dice y me guiña el ojo.

Termino de subir y me pongo al lado de ella.

Sin  dar aviso alguno, comienzo a golpear la olla Cómo si fuera una batería.

Al primer golpe, Gema se levanta como un trampolín y abre los ojos que pareciera que se le fueran a salir. Me lanzo a una cama y comienzo a reír, fue demasiado chistoso verla así.

–Eres un bastardo.–me grita

–¿Odias los bastardos?–pregunto

–¡Si!Y tampoco me gusta convivir con ellos.

The Feeling Donde viven las historias. Descúbrelo ahora