3-. Mama..

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NARRA SAMANTHA

John me llevo a la cama, algo que agradecí, le ofrecí acostarse en mi cama, junto a mi, necesitaba Apoyo además, era lo mínimo que podía hacer, me hizo un gran favor quedándose conmigo.

Me he despertado temprano, estaba desesperada por saber de mi madre, yo me hacia una idea de quien le había echo todo ese daño, el daño por el que esta al borde de la muerte, como me quiten a lo que mas quiero.. La que morirá seré yo. Mis pensamientos me aterran..

Junto a mi veo a John, es tan lindo cuando duerme, al verlo así, tan junto a mi, me a provocado una risita, por lo que lo he despertado. El me mira con una pequeña sonrisa lo que me he sonrojado, así que antes de que me vea bien, me escondo bajo las sabanas, como si se tratase de un juego, a lo que el responde buscándome entre ellas y haciéndole cosquillas, un tanto encantador. 
Al ver que no salgo, se mete conmigo debajo de ellas, y me empiezo a reír a carcajadas, por lo que salgo de debajo de las sabanas al notar que me quedaba sin aire debajo de ellas. Me he intentado levantar pero algo tira de mi brazo para que me acueste, es John, sin duda, me acostumbraría a despertarme así todos los días, entre juegos y risas, junto a el.. 

Me encuentro en el mismo sitio de antes, la cama, la única diferencia, que ahora no puedo salir de ella, pues John se encuentra sentando encima mía haciéndome cosquillas.

- ¡para, para, por favor!-. Casi sin aliento le grito entre risas.

- si quieres que pare, me tienes que prometer que me darás un beso, como si se tratara uno de buenos días-. Asentí con la cabeza haría cualquier cosa por que me dejara, no quería morir por un ataqué de risa.  Así que me ha soltado, para que se lo de, y se lo doy en la mejilla, pero el niega con la cabeza, por lo que esta vez cierro los ojos y le planto el beso en su boca, lo más rápido que puedo, nunca lo había echo, y la vergüenza que siento al hacer esto es extrema, el se ríe, el ha ganado. 

Me levanto y cojo ropa, lo primero que pillo, me voy al baño, y me baño, una ducha rápida, para estar despierta, me cambio y entro de nuevo a mi habitación, donde esta John, me esta embobado mirando para mi, por lo que suelto el cepillo con el cual me estoy peinando y me tiro fuertemente encima de el, provocando que se caiga de la cama conmigo encima, y que estallemos a carcajadas en el suelo.

- eres mas tonta, ahora por tirarme me debes algo, ¿sabes el que?-. Niego con la cabeza y comiendo a reír de nuevo, es algo que no puedo evitar, al ver la cara de pena que me ha puesto. John trata de decir algo, pues se quedo con la palabra en la boca, ya que mi teléfono sonó. Se acabaron lo que hasta ahora fueron risas.

- Samantha, ¿eres tu?, soy Mateo, tu padrastro, creo que debes de venir, tu madre ha empeorado, no creen que dure mucho, y creo que te gustaría verla por ultima vez aunque la veas en las condiciones que estas... Y a ella.. También le gustaría verte..-. Su tono de voz va bajando cada vez mas, y su voz se escucha rota, le han arrebatado a la mujer de su vida..

- ¡Mateo!-. Se me quiebra la voz.. - no tengo dinero aquí, iré caminado o un amigo me llevara, intentaré estar allí lo antes posible-. Comienzo a llorar repentinamente y cuelgo, clavo mi mirada en John el cual me mira desesperado a que le cuente.

- mi madre se encuentra en pésimas condiciones, necesito ir a verla, y quiero que me lleves tu, de ser posible-. El se queda paralizado, al escuchar la tremenda noticia que le suelto sin mas, a decir verdad, desde ayer me había empezado hacer la idea de esto.

- claro que te llevare, cuenta conmigo para todo, pero antes debemos de ir a mi casa a buscar el coche, pero primero de todo, ven anda, dame un abrazo se que lo necesitas, pequeña-.

Cuando me quiero dar cuenta ya estoy en el coche de John, en el pequeño trayecto apenas nos dirigimos la palabra.  El esta muy concentrado mirando a la carretera, en un punto fijo, mientras yo jugueteo con mi pelo, revisando mis puntas o cosas parecidas, siento que me mira un poco, luego vuelve a mirar a su punto fijo, por lo que sale una risita de mi, y claro, el tiempo en el trayecto transcurre todo así.
Al poco rato, ya estamos en los aparcamientos del hospital, y yo me encuentro un tanto nerviosa, no me quiero bajar, pero si la quiero ver, tengo miedo de ver en el estado en la que me la puedo encontrar, si tan mal esta será por algo..
John estaciona el coche en un aparcamiento, cerca de la entrada, se baja y me abre la puerta, yo trago un poco de saliva y bajo del coche, no estoy preparada para lo que me pueda esperar. John en estos momentos se encuentra agarrándome de la mano, puede ser de la cara de pánico que tengo, mientras Mateo me espera en una pequeña sala, creo que a mi padrastro le ha sorprendido que fuera acompañada, y mas por un chico, además agarrándome de la mano.

- buenos días Sami, a ver si tengo el privilegio de conocerlo ¿no?¿no me lo piensas presentar?-.

- este es John, un amigo, el me ha traído hasta aquí-. John le tiende la mano y se dan un apretón, un saludo de hombres se puede considerar creo.

- bueno, ¿y mama?-. Pregunto un poco preocupada.

- la primera habitación a la izquierda, creo que debes entrar tu sola...-. Asiento, y le pido a John que se quede con el que para mi, ha sido un padre. En la cara de John se refleja preocupación, debe ser porque sabe que no quiero entrar sola, pero lo debo hacer, debo vencer esto que tanto le temo.

Voy por el estrecho y largo pasillo, de paredes blancas y aterradoras, por donde pasa alguna que otra persona, y dos o tres enfermeras, este lugar me da miedo. Por fin tras recorrer el largo pasillo veo que puedo ir hacia la izquierda pues es lo que hago, y me planto frente a la primera puerta, como me dijo Mateo.

Cojo un poco de aire, y entro, veo la peor imagen que podía ver, mi madre con un aspecto horrible, enchufada a sueros supongo que serán eso que veo, y muchas mas botellas parecidas que cuelgan del hierro ese.  Sigo avanzando hasta quedarme al pie de la cama, le cojo una mano y le beso la frente, al parecer esta dormida, así que espero a que se despierte, no quiero despertarla, debe descansar si quiero que se recupere, y tenerla devuelta conmigo, creo que pasa bastante tiempo, o el tiempo va muy lento en aquella habitación de aquel hospital.

Quédate conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora