Heroine

Capítulo 7

Gia.

En la casa estaba este extraño chico llamado Luis mirando con una mezcla de lujuria, admiración y amor a los chicos de Saving Roses y había un silencio sepulcral, era realmente raro e incómodo.

- Harry, sé que soy hombre y...-el chico rompió el silencio, le daría las gracias pero sería muy raro- bueno, ¿te puedo hacer un hijo? O la cantidad que quieras, también podemos tener un perro y adoptar a Justin, para luego prostituirlo y vivir de él, pero solo si quieres.

Lo más raro que escuché en toda mi desgraciada vida, descontando esa vez que quede atrapada en el armario del conserje con la mascota de la escuela y sucedieron cosas extrañas, aun no puedo superar el trauma y bueno, eso fue más raro...

-¿Por qué mejor no te doy un abrazo y luego voy y pongo una denuncia por acoso?- le respondió Harry sonriendo, nunca había notado su bonita sonrisa.

-Eso también sería una opción- dijo encogiéndose de hombros.

-¿Por qué no les conseguimos una habitación y listo?- dijo Justin- y por favor, no quiero ser prostituido.

-¿Quién tiene hambre?- fue un drástico cambio de tema pero, genial.- Yo tengo mucha.

-Kyle, el día que no tengas hambre el mundo se acabará-Le dijo Nick levantándose del sillón para tomar el teléfono- Pediré comida China y todos la comerán, les guste o no.

Jack iba a decir algo pero el timbre sonó.

-Qué servicio tan rápido- dijo Mermaid que estaba al lado de Harry, últimamente se lea veía mas juntos.

-Yo abro- me levanté y abrí la puerta, la más grande sorpresa estaba frente a mí y Dios mi boca hubiera caído hasta el piso sino fuera una chica genial y supiera controlar mis emociones. Luke estaba aquí, no tengo ni la menor idea de cómo consiguió la dirección pero aquí estaba y Dios, se veía tan caliente.

-Hola Gia- Dios pero que tímido era, pero no le quitaba lo caliente, ese aro en el labio provocaba muchas cosas en mi ahora.

-Vamos afuera- salí y cerré la puerta detrás de mí. El día estaba oscuro, sinónimo de hermoso.

-¿Cómo estás?- preguntó mirando hacia el suelo.

-Mírame a los ojos, no muerdo- dije tomando su barbilla.- ¿Qué haces aquí guapo?

-Quería invitarte a tomar algo- esta vez sí me miro a los ojos y bueno, enamorada de esos ojos.

-¿Qué estamos esperando?- enlazamos nuestros brazos y comenzamos a caminar.

No lo recordaba así de tímido, ahora que me pongo a pensar, no fue nada tímido la primera vez, pero era demasiado adorable y eso me gusta.

**

-¿Sabes que una vez quede atrapada en el armario del conserje con la mascota de la escuela?- le dije mientras bebía de mi chocolate caliente.

-Muero por escuchar como sucedió eso- el en cambio estaba bebiendo un batido, en una cafetería... ese chico merece un aplauso.

-Estaba charlando con unas amigas y de repente el conserje me empujo al armario con una sonrisa tan extraña y ahí dentro estaba el chico que se disfraza de la mascota de la escuela, la cosa es que el chico simplemente estaba ahí como muerto en una silla, cuando de la nada empezó a ladrar y moverse extraño, hizo eso por unos siete minutos hasta que le acaricie la cabeza y se quedó dormido, veinte minutos después Marina abrió la puerta y me sacó corriendo de ahí. 

-No sé que es lo que acabo de oír- Luke tenía una media sonrisa en su cara, esa experiencia fue muy rara.

-Ha sido una experiencia muy extraña- le dije riendo-, aún no entiendo porque el conserje nos encerró ahí.