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No le di tiempo al agente de reaccionar. Me levanto rápido y me separo bruscamente de su agarre, introduzco mi mano en el bolsillo de la chaqueta y saco rápidamente y decidida el arma, volteo a verlo y... No era un agente.

- tranquila- dice con sus manos alzadas en forma de defensa. Es una chica. Se nota que es Joven, y no se encuentra muy bien físicamente.

"No debes confiar en nadie"

Me repito en mi mente la frase con la que vivo todos los días. En este mundo no hay nadie en que confiar, todos son traidores y embusteros, todos son una mierda.

Mi mano sostiene fuerte el arma y con decisión, no dudaría, claro que no. Estoy lista para atacar, cualquier movimiento en vano de la chica y estaría muerta.

- tranquila, no te haré daño, además estoy desarmada, mira- dijo y puso al descubierto sus bolsillos y no había nada. "Es una trampa", me repito. Estoy muy angustiada, no se si dispararle o salir corriendo.

- soy Virginia- dice después de un momento, mostrándome una sonrisa torcida y en sus facciones se nota lo asustada que esta. Ella estira su mano lentamente y apunto aun mas el arma hacia ella, así que vuelve a poner su mano en su lugar. Ella sabe que no dudaría en dispararle.

- por favor baja el arma, te juro que no haré nada, además también soy una fugitiva como tu- dice mientras sus ojos miran los mios, y se nota que la escena que esta presentando no es muy agradable. Me tranquilizo un poco y bajo el arma, pero no la guardo por si acaso.

La chica lanza un suspiro de alivio y después vuelve a mirarme. Estamos una frente a la otra, sin saber que hacer o decir. Pero yo si tengo algo en mente, debo salir de aqui.

- soy Virginia y me escapé de esa horrible prisión donde me encontraba- dice, pero no la miro- y cual es tu nombre?- pregunta, pero no caeré en esa trampa.
- que te importa?- le digo molesta. Ella parece dudar si responder o quedarse callada, pero al final decide la primera opción.
- pues yo te dije mi nombre, tu podrías decirme el tuyo...
- No. No podre decirte el mio, que tal si nisiquiera ese es tu verdadero nombre y solamente eres una impostora?- pregunto enarcando una ceja.
- No me importa si me crees, pero ese si es mi nombre- dice y empieza a jugar con un mechón de su cabello rubio.
Virginia es una chica realmente bonita. Ojos azul claros como el cielo y cabello rubio que cae por su espalda.

- podríamos aliarnos- dice. Yo volteo a mirarla con una cara de "Ni lo pienses" y antes de que pueda decir algo, ella habla - es encerio, mira, podríamos hacer un buen equipo- dice con orgullo
- no claro que no, yo puedo sobrevivir por mi misma- digo y me levanto del suelo donde nos encontramos, para luego girarme y empezar a caminar.
- pero yo seria muy útil- dice como si fuera lo mas importante. Yo me giro y me cruzo de brazos.
- a si?, a ver... Sabes manejar un arma?, eres capaz de matar a alguien?- digo y ella se queda callada- lo ves, no me sirves, necesito a alguien que sirva, no a una carga- digo con desprecio la ultima palabra.
- sabes donde encontrar comida?, imagino que no- dice y me mira desafiante.
- No. No se me hace la busca de comida, pero sobrevivo- le digo y ella sonríe
- yo puedo hacer de que tengas comida, la necesaria. Tal vez no sirva en un ataque, pero de seguro si para sobrevivir ante hambre, además tengo mucho conocimiento acerca de las plantas y diferentes frutos- dice y me quedo pensando. Tiene razón, ella puede servirme par encontrar comida, pero, podría ser una trampa. Podría estar trabajando para unos de los dueños de esclavos, y yo solo seria una esclava más.

- si?- dice y la miro dudosa. Es muy extraño que me este insistiendo tanto en algo, pero ella sería útil.

- Si, pero tendrás que hacer todo lo que yo te diga si quieres seguir con vida, entiendes?- le digo seria y ella asiente- bien. Tienes algún sitio en especial donde tengas tus cosas?- pregunto y ella asiente.

- bien. Ahora mismo iremos por ellas

- qué?, no nos quedaremos donde estoy?, pero es un buen lu-

- dijiste que harías lo que yo dijera verdad?, entonces te quedarás donde yo me refugio, o sino nuestra alianza se termina- digo con una mirada amenazante.

- está bien- dice y empieza a caminar mientras yo la sigo.

Caminamos por las calles destruidas de la ciudad. Hemos tenido que escondernos, correr y muchas cosas más. Según Virginia, su escondite se encuentra un poco lejos, igual que el mío, pero hay algo en mí que dice que no debo confiar en ella, que ella será una traidora y que en cualquier momento saldrán agentes y me capturaran.

Ella de vez en cuando mira temerosa hacia atrás, como percatándose de que la siga. Hay algo aquí que no encaja... ella está muy asustada y no se porque diablos lo está.

Me canso de tanta mierda que está haciendo, es como si... dudara de donde está su escondite.

- estás segura de que es por aquí?- le pregunto y ella duda al responder.

- bueno... pues... se supone que debería estar por aquí, pero ya no distingo el lugar- dice y noto que tiene temor por saber como voy a reaccionar. Tomo un poco de aire para no explotar, pero esta chica es una total estúpida e idiota, quisiera golpearla hasta que alguna de sus neuronas funcione.

- bueno... pero trata de recordar, quieres?- digo tratando finjir mi enojo.

Seguimos caminando por el bosque, hasta que llegamos a un pequeño refugio hecho con ramas, hojas y otras cosas, pero está muy bien hecho.

- tu lo construiste?- pregunto y ella asiente tímida con la cabeza- mira, no quiero que me temas, lo siento si te eh asustado, pero me gusta que la gente me obedezca, si queremos ser un equipo, debemos coincidiar la una con la otra- digo y ella me queda viendo.

- está bien- dice y entramos a su escondite. Dentro hay diferentes cosas como una caña de pescar, unos cuencos que imagino que tienen algún tipo de estofado, diferentes frutos, hay una pequeña alacena hecha con ramas grandes y gruesas que tienen unas pequeñas bolsitas que contienen diferentes tipos de semillas, y a un lado hay un cuchillo gigante, cosa que imagino que no sabe manejar- esto es lo que tengo

- todo esto es fantástico. No puedo creer que tengas tanta comida y... sabes usarlo?- pregunto señalando el cuchillo

- No. Además no me creo capaz de matar a una persona, no, no lo haría...

- Pero si digamos... debes salvarte, no matarías a la persona, o... si debes salvar a tu familia-

- No, sabes que eso no es cierto, aquí nadie puede salvar a nadie, ni siquiera creo tener las probabilidades de que las personas que amo sigan con vida, los dueños hacen con ellos lo que quieran, no me vengas con esa mierda!- dice llena de enojo, pero sé que no es conmigo a quien fue producido, sino a los imbéciles dueños, a los que dañaron nuestra vida, a las razones de nuestra infelicidad, a nuestros demonios.

- Claro- digo- recoge lo más importante. Mañana volveremos por lo demás- digo y ella asiente. Empieza a guardar algunos frutos, semillas y cuencos en un saco y le aconsejo de que lleve el cuchillo, porque  nos sería útil.

Salimos de su refugio, y cada vez que avanzamos, borro nuestro rastro de huellas en la nieve con una rama, para que no nos fuesen a encontrar.

- Oye Virgi- paro de hablar, el impacto es fuerte, y siento como la bala me penetra el muslo izquierdo y caigo al suelo. Escucho un grito de Virginia, y escucho otro disparo, me aterra la idea de que Virginia esté muerta, pero no lo está.

Está casi en shock junto al agente tirado en el suelo, y él tiene una gran abertura en su estómago. Virginia lleva en sus manos el cuchillo, y de este escurre sangre. Por el rostro de Virginia escurren lágrimas y eso me causa mucha lástima. Esta chica me ha salvado la vida, ha matado a una persona por mí, ha hecho algo que la terrorizaba, le debo un gran favor que me sería muy difícil de recompensar.

SobrevivientesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora