Dos meses habían pasado desde la última conversación entre Charlie y Nathan, o bueno, técnicamente, porque no era que Nathan no hubiese tratado de disculparse; las primeras semanas recibía hasta cinco mensajes de disculpa por día, luego pasaron a cuatro y de cuatro a uno, hasta que finalmente el comprendió que cuando Charlie estuviese dispuesta a hablarle entonces ella le buscaría.
El problema era que Charlie no sabía si quería buscar a Nathan. Desde su partida ella había estado tratando de convencerse de que su separación había pasado por algo, que quizás ellos no estaban hechos el uno para otro, quizás pertenecían a otras personas. Pero el mensaje de Nathan en año nuevo lo había cambiado todo, porque Charlie se sentía inexplicablemente feliz, como cuando tenía quince años.
Charlie era una persona insegura cuando conoció a Nathan, solía pensar que era como una molestia para Nathan y que nunca sería suficiente para él. Con el tiempo las cosas cambiaron, Charlie no se sentía mal porque entendía que si Nathan no la creyera suficiente simplemente se buscara a alguien que si pudiera merecerlo y ella tenía tanta oportunidad como cualquier otra chica. Ahora Charlie confiaba en ella misma, mucho más que tres años atrás, una parte gracias al ballet y otra a sus amigas que nunca la dejaron sola a pesar de las miles de veces que lloró por Nathan.
Y aun así, no sabía cómo sentirse por el hecho de que Nathan siguiera en Nueva York y no pensara en volver, Charlie no lo culpaba. Ella misma se sentía así cuando estaba en Paris, bailando todo el día, todos los días. Sabía lo que era tener el apoyo de sus seres amados, era como un rompecabezas, y en el rompecabezas de Charlie había faltado la pieza de Nathan, la que marcaba su apoyo; quizás por eso había sentido un vacío que indicaba la falta de algo y ese algo era el apoyo de la persona de la que se había enamorado, la persona que amaba de una manera diferente a sus familiares.
En ese instante supo lo que debía hacer. Quizás a Nathan le faltara eso, el apoyo de la persona que amaba y esa persona era Charlie, porque a veces sentimos que no lo podremos lograr sin el apoyo de esa persona especial.
Charlie: Perdóname, estoy aquí, para lo que sea. Te apoyo.
Perdonenme la vidaaaa, estoy de viaje y no he podido actualizar porque no tengo internet T.T como sea, les dejo aqui este bonito capitulo. Espero lo disfruten, no sé cuando volveré :c.

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Entre Charlie y Nathan
Historia CortaCharlie Grace tenía solo quince años cuando se enamoró de Nathan Harris.