Entre Charlie y Nathan

Los recuerdos de Charlie: Un doloroso fallo.

24 de diciembre, 2012.

Nathan: Sé que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te escribí. Quisiera decir que tengo una excusa para justificar mi comportamiento inmaduro, pero la verdad es que no la tengo.

Charlie, no te escribí porque sentí que aquí, en Nueva York, tendría un nuevo comienzo. Y un nuevo comiendo implica dejar todo atrás, y tu eras algo que debía dejar atrás. Simplemente porque, como tu dijiste, debimos haber dado el adiós definitivo ese día en el aeropuerto. Pero la verdad es que no pude hacerlo, te amaba tanto que simplemente no podía. Aunque sabía que una relación a distancia nunca iba a funcionar, tú y yo ya habíamos acordado que simplemente terminaríamos. Me hubiese gustado que, como ex's normales, nos hubiésemos alejado el uno del otro, y continuáramos con nuestras vidas, quizás odiándonos porque el otro fue muy idiota.

Pero yo no puedo odiarte.

No hago más que pensar en ti, todo aquí me recuerda a ti, y ha pasado más de un año desde que terminamos. La chica del departamento de al lado todas las noches, sin falta, pone música clásica y todas las mañanas sale con un leotardo puesto y el cabello recogido en una trenza, creo que ha intentado coquetear conmigo, hasta me dio su número, pero te juro que todo lo que pienso es en ti con una trenza y un leotardo iguales a esos, la manera en que te movías cuando bailabas.

Muchas veces me han pedido que pintara mi más grande inspiración y, Charlie, solo puedo pintar a una bailarina en el aire, no me imagino si quiera pintando algo más. Es todo lo que me viene a la mente, es todo lo que la ocupa.

Muchas veces intenté salir con chicas, pero siempre terminaba huyendo, me haces buscarte en todas partes. Y nadie es como tú.

Esto seguirá como siempre, simplemente porque no puede ser. Pero cuando vuelva a casa haré todo por recuperarte, sigues en mis pensamientos como la vez en que saliste corriendo al baño porque Emily Wilson te estaba molestando, dejaste tu cuaderno en clases y lo hojeé, desde ese momento no pude dejar de pensarte. Sé que he sido un idiota y solo espero que cuando todo esto acabe, puedas perdonarme.

Te amo.

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