En el apocalipsis zombie, Carl Grimes conoce a Eli Berman, una joven fuerte y valiente. A medida que enfrentan juntos hordas de caminantes y desafíos mortales, su vínculo se fortalece. En medio de la oscuridad y el caos, Carl y Eli encuentran en su...
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Algunas personas igual de chismosas que yo sé asomaron para ver quién era, entre ellos estaban algunos del grupo.
La puerta se abrió y nos dejó ver a aquel hombre. No era cualquiera.
No había cambiado casi nada, a excepción de la barba que ahora portaba.
Por un instante creí que estaba soñando o delirando, o quizás teniendo una pesadilla.
Ni siquiera se que sentí, ¿Felicidad? ¿Nostalgia? ¿Enojo?. Por qué creí que tenía claro lo que sentía hacia el, pero al verlo de nuevo mi mente se nublo por un segundo.
¿Qué debía sentir por el primer hombre que ame y también el primero que rompió mi corazón?
El hombre que me hirió al abandonarme.
Los primeros años me sentía tan triste, tan preocupada, pero conforme el tiempo paso todo eso se convirtió en enojo y decepción. Yo lo necesitaba más que nunca y el no estuvo.
Aún recuerdo todas las noches que lloré por mi mamá, mi hermano y mi papá en mi antigua casa. Esos meses me sentí tan asustada, se supone que el debía estar ahí, conmigo, cuidándome, eso es lo que hacen los papás, ¿No?
Mientras el examinaba todo con la vista su mirada se encontró con la mía, se quedó así unos segundos, mis piernas inconscientemente se movieron hacia el.
Sebastian:Eli... Hija...
Eli:tu no eres mi papá... —dije con los ojos inundados de lágrimas—Tú te fuiste
