Solo dile que la amo

2

Megan le pego un cachetazo tan fuerte a Jeremy que le quedo marcado.
- Lo siento - dijo él.
- ¡¿CÓMO HACES ESO?! - le gritó.
- Solo quería hacerlo y ya, solo quería sentir tus labios, no te enojes conmigo Megan.
- ¡¿Qué no me enoje contigo?! Estas realmente loco.
- Loco sí, pero por ti.
Megan estaba preparándose para irse, agarro sus cosas y Jeremy dijo:
- Por favor no te vayas, hablemos de algo, podemos ver una película, podemos hacer lo que quieras.
Megan lo pensó y accedió.
- ¿Qué te gusta hacer? - dijo ella.
- Me gusta mirarte en las clases de literatura, me gusta pensarte cuando no estas cerca y me gusta cocinar - dijo él.
- ¿Te gusta cocinar?
- Obvio, mi comida es la mejor de todo el mundo - dijo sarcásticamente.
- Bueno creo que te cree ¿De dónde viene el apellido Levremonde?
- Es un apellido Francés, es lo único que sé.
- ¿No sabes la historia de tu familia?
-No, pero ahora me toca preguntar a mi ¿Estas saliendo con ese chico llamado Zack?
- Sí (ella no sabia porque le respondió eso)
- Vaya, ojalá les vaya muy bien como pareja, se ven lindos juntos.
- Gracias, de hecho me pidió matrimonio y nos casaremos a finales de julio - dijo sarcásticamente ella.
- Ah, ya entiendo, quieres sacarme celos, pero lamentablemente eso no funciona en mi señorita Megan.
- ¿Darte celos? ¿Para qué quisiera sacarte celos?
- Para conquistarme, obviamente.
- No tengo ninguna intención de conquistarte.
Los 2 se quedaron mirando directamente a los ojos y Jeremy se empezó a acercar, Megan mordió sus labios y lentamente se besaron.
Entro la mamá de Jeremy y dijo:
- ¿Qué tipo de trabajo es este?
- ¡MAMÁ TIENES QUE TOCAR ANTES DE ENTRAR!
Megan solo reaccionó a agarrar su mochila y salir corriendo, y eso hizo, salió tan rápido que parecía que volaba.
- Oh por Dios - pensaba Megan.
Llego a su casa y su mamá, ni sus hermanos estaban, no tenía llave, así que fue a un parque cerca de su casa. Estuvo 2 horas pensando en que había hecho con Jeremy, lo que tal vez pensaba su mamá con lo sucedido, que vergüenza ver a Jeremy al verlo el lunes por la mañana. Megan tenía tantas cosas que pensar, de pronto alguien le tapa los ojos por detrás.
- Adivina ¿Quién soy? - dijeron.
- Hmmm.... Suéltame Jeremy - dijo ella enfadada.
En realidad no era Jeremy, era Zack, oh por Dios, Megan se enrojeció tanto al ver que se había equivocado, ya que la voz de Jeremy y la de Zack no se parecían en nada.
- Hm... Parece que no me esperabas a mi - dijo él.
- Oh, lo siento Zack, solo que no sé que pensaba.
- Sí sabes lo que piensas, piensas en el tal "Jeremy" .
- No, solo que pensaba en mi trabajo de literatura, y lo siento. ¿Qué haces aquí?
- Bueno, te vi sola cuando pase con mi hermanita y pensé en hacerte compañía y toma... Te traje unas flores.
- Oh gracias Zack, son muy lindas.
- Bueno, solo quería que sepas que me gustas Megan.
Megan se sentía tan incomoda hablando de los sentimientos de Zack y ella solo pensaba en lo sucedido con Jeremy, además la campana para entrar a clases no la iba a salvar ahora, tendría que hablar con Zack, aunque no quisiera, no podía rechazarlo tan cruelmente por lo sucedido con Verónica, chica de ultimo año, bueno la historia fue así, Zack estaba enamorado de Verónica, salieron como por 5 meses sin compromiso, Zack había planeado una tocata fuera de casa Verónica, lo hizo, llevo unos mariachis a su casa y cuando llego vio a la entrada de la casa, vio a Verónica con otra chica besándose, fue humillante para Zack ¿bueno para quien no? Y le destrozo el corazón a Zack, todos en el colegio se enteraron por Peter, era el vecino de Verónica. Zack no era un mal chico, era lindo, amable, preocupado, tierno, lo que una chica quería.
- Oh Zack - dijo ella.
- No digas nada por ahora, el siguiente viernes será el baile de bienvenida y soy feliz que vayas conmigo.
- Me tengo que ir, se esta haciendo tarde y no quiero que me reten, nos vemos el lunes Zack.
- Bueno, adiós Megan, nos vemos.
Megan no sabia si en su casa estaría alguien, tal vez su mamá a un no llegaba, solo no quería hablar con Zack ahora. Lo bueno es que si estaba su mamá en la casa.
- Hola mamá.
- Hola Megan ¿Qué tal tu día?
- Bien, ya hice mi trabajo ¿qué hiciste tú?
- Nada, estuve en la casa lavando ropa todo el día, como todos los días.
Megan no entendía porque su mamá le oculto que salió, pero no quería preguntarle más del tema.
- ¿Y esas flores? - dijo su mamá.
- Me las regalo Zack, quiere que vaya al baile de bienvenida con él.
- ¿Y quieres ir con él?
- No lo sé, Zack es solo mi amigo y no lo quiero ilusionar, pero no quiero decirle un "NO"
- Bueno, mañana te iremos a ver un vestido para que vayas.
El día domingo no paso nada especial, Megan se levanto, tomo desayuno, miro la tele con sus hermanos, fueron al centro comercial, se probó unos vestidos, se llevo uno rojo, los zapatos los ocuparía de su mamá, comieron, se fueron a su casa, cenaron y Megan se fue a dormir.
Oh por fin era lunes pensaba Megan, pero a la vez no, tendría que hablar con Jeremy o con Zack, que sería peor, porque le hablaría de sus sentimientos y cosa cursis para ella. Pero se iba a refugiar en Jenna ese día, no quería hablar con ninguno de los 2.
- Hola Jenna - dijo.
- Megan ¿Qué tal tu sábado?
- ¡Fue horrible!
- ¿Por qué?
- Fui a la casa de Jeremy a hacer el trabajo, pero él ya lo había hecho, luego me besó, me enoje, hablamos, nos besamos, entro su mamá, entre en pánico y salí corriendo, luego fui a mi casa y no había nadie, fui al parque cerca de mi casa, me encontré con Zack, lo confundí con Jeremy, me hablo de sus sentimientos y me aburrí y me fui.
- Vaya que suerte, 2 chicos guapos intentando conquistarte - dijo Jenna con voz triste.
- ¿Pasa algo Jenna?
- No, solo que... Todavía nadie me ha invitado al baile y tenía la esperanza de que por lo menos Mike me invitara, pero invito a Rebecca.
- Oh amiga, alguien te invitara, estoy segura.
- No es tan fácil.
Justo llega Jeremy e interrumpe la conversación.
- Hola, Jenna nos puedes dejar solo un ratito - dijo él.
- ¡Claro!
- Hola Jeremy, lo siento por lo que paso en tu casa, ósea, no es mi culpa, también tuya, pero si tu mamá te castigo o algo, discúlpame por favor.
- ¿Piensas que mi mamá se enojo? - se empezó a reír.
- ¿Por qué te ríes? - dijo ella enfurecida.
- Mi mamá también se rió ese día, saliste volando y esas cosas, además está feliz de que tenga una chica como tú.
- ¿Tienes una chica como yo?
- Claro, te tengo justo a ti, oye te tengo una pregunta. ¿Quieres ir al baile conmigo?
- Oh Jeremy, no puedo, iré con Zack.
- Te entiendo, solo déjalo.
- Pero oye, Jenna no ira con nadie por ahora ¿Podrías invitarla a ella?
- Esta bien, iré con Jenna.
Por fin era viernes, Jeremy si había invitado a Jenna y ellas se arreglaron el casa de Megan, iba hacer una noche grandiosa para Jenna, le encantaba bailar. Era la hora que pasaran a buscar a las chicas, Jeremy y Zack se juntaron justo en la puerta.
- Hola - dijo Zack.
- Hola Zack.
- ¿Por qué estás aquí?
- Vengo a buscar a Megan, iremos al baile juntos - dijo Jeremy.
- Pero, ¡Megan ira conmigo!
- Solo es una broma viejo, vengo por Jenna.
Justo se abrió la puerta y salió la mamá de Megan, hizo pasar a los chicos y se tomaron la foto y se fueron, bailaron toda la noche cada uno con su pareja. Megan salió a tomar aire, Jeremy dijo que iría al baño, pero fue a ver a Megan.
- ¿Qué tal tu noche princesa?
- Buena, me divierto mucho con Zack.
- Te divertirías más conmigo.
Jeremy agarro de la cintura a Megan y la besó, fue un beso muy lindo, estaba la noche con una gran luna, era el beso perfecto, Jenna había ido a buscar a Jeremy, ya que se demoraba tanto en el baño y salió afuera y vio a Megan besarse con Jeremy. Jenna entro y le dijo a Zack que se iría a casa, que estaba mareada, que le dijera eso a los chicos cuando llegaran. Los chicos entraron.
- ¿Y Jenna? - preguntó Megan.
- Se fue, se sentía algo mareada y dijo que iría a casa - contestó Zack.
- Oh, bueno, creo que igual es hora de irnos, ya es tarde.
Eran alrededor de las 3 am, Zack paso a dejar Megan, ella solo llego a dormir.
- ¡Megan! - gritaba su mamá la mañana del sábado.
- Ya voy.
Eran alrededor de las 11:49 am, bajo y vio a los padres de Jenna en la sala de estar.
- ¡Megan, por favor dime dónde está mi hija! - le dijo la mamá de Jenna llorando.
- ¿Qué? Jenna dijo que iría a casa.
- Pero no fue así, no ha llegado, tiene el celular apagado, pensábamos que estaba contigo o que sabrías si se había quedado con alguna otra amiga - dijo el padre de Jenna.
- ¡Por favor Megan, eres su mejor amiga debes saber algo de mi hija! - lloraba la madre de Jenna.
- No lo sé - dijo Megan cayendo algunas lagrimas de sus mejillas.