Se despierta y lo primero que ve son las altas y fondosas copas de los árboles. Se incorpora lentamente hasta quedar sentada y mira a su alrededor hasta ver a la sombra, su salvador.
-No te asustes- sale con paso lento, y de pronto deja de ser una sombra para convertirse en... un chico. Es alto y delgado, su pelo es negro y lo lleva largo, a la altura del cuello. Sus ojos son azules, como el hielo. En su antebrazo lleva una serpiente tatuada con tienta negra. En realidad va entero vestido de negro, una camiseta y unos vaqueros largos, unas deportivas y una cazadora.
-¿Por qué...? Es decir ¿Cómo...? ¿Qué está pasando?- consigue decir Dalia después de un rato
-Te lo contaré, pero dudo que me creas- sus ojos reflejan... ¿tristeza?- Todo el mundo creé que cuando la gente muere su espíritu sube al cielo o baja al infierno, bueno pues la verdad es que hay una tercera opción. Cuando una persona muere depende de la muerte que haya tenido ocurre una cosa u otra, si ha sido un suicidio ha decidido acabar con su vida irá al infierno, por el contrario si su muerte ha sido por causas naturales o por un error, el alma debe pasar un periodo de prueba, en él se la deja un mes para que vaya convirtiéndose en sombra, si durante ese mes permaneces a salvo te quedas como sombra para siempre, si eres descuidado desapareces, y si otro alma te mata tu subes al paraíso y el asesino va al directo al infierno.
Y... solo una sombra puede ver a otra sombra, los humanos vivos no pueden vernos.-Pero... si yo te estoy viendo... ¿quieres decir que yo estoy...?
-Dalia, no quiero que te asustes, pero si, falleciste hace 8 días. Durante el desfile de carnaval hubo un tiroteo y una bala te alcanzó por error. Por norma general cuando una persona muere hay un alma que se le asigna para poder explicarle todo lo que sucede y en que se va ha convertir, pero como había tanto ajetreo tu alma guía no llegó a tiempo y por eso todo este tiempo has pensado que estas viva.
-Osea que llevo 8 días muerta ¿y al imbécil de Borja no se le ocurre otra cosa que lanzarse a los brazos de Mónica? Será hijo de p...
-¡¡LIA!! No, él no está con ella, cuando se enteró de lo que había pasado estuvo a tu lado 3 dias enteros, pero luego no lo aguantó más y se derrumbó, Mónica fue su punto de apoyo nada más.
-¿Cómo sabes quienes son ellos?-preguntó sorprendida.
-No es importante ahora mismo.
-Dimelo, ¿y por qué sabes como me llamo?
-Esta bien. Llevo 12 años muerto, nosotros las sombras nunca envejecemos, es una de las ventajas. La cosa es que un día paseando por la calle va a una chiquilla pasear contenta de la mano de sus padres y la empece a seguir solo por curiosidad.
Me gustaba tanto verla feliz que la seguía a todas partes, pero hace nueve años, cuando ella tenia tan sólo 8 sus padres murieron en un accidente de tren. Desde entonces he velado por ti, procurando que no te faltase nada, ni siquiera la compañía.-¿Por qué me has detenido hoy cuando fui a saltar?
-Cómo te he dicho antes, si un alma sufre algún daño en el mes de proceso de conversión desaparece y yo no puedo permitir que te vaya de mi vida.
-Y ¿por qué yo no soy una sombra?
-El periodo de cambio es largo, tu cuerpo aun debe adaptarse, por el momento tu no puedes elegir cuando convertirte y cuando no, pero llegará el momento en el que tengas tu el mando.
-¿Y por qué los vivos no vemos, eeh quiero decir, ven cosas flotando cuando las cogeis... cogemos, ya sabes por eso de que no nos pueden ver y todo eso?
-Todo aquello que toquemos podemos volverlo sombra si lo deseamos, así los vivos no se asustan por ver un móvil flotando por la calle, o un batido siendo absorbido por el aire.- Le mira con una expresión tierna en los ojos, divertido por todas las preguntas que tiene.- Luego podrás hacerme más preguntas, ahora que estas cambiando quiero que conozcas a unas... sombras muy especiales en mi vida.
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SOMBRA DE LUNA
FantasíaDalia es ahora una sombra, pero no sólo tendrá que lidiar con los problemas comunes de los seres de los que ahora ella también forma parte, sino que además, después de más años de los que se puedan contar, aparecerá la descendiente de la Luna. Dali...