10.Traicionada

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Adrián nota que me pongo tensa y me mira preocupado. Cuando ve a Borja y a Isabel besándose justo a nuestra derecha me pregunta si me apetece irme, yo niego con la cabeza, necesito saber de que va todo esto.

-Estoy dividida- dice Isabel- me siento un poco mal porque Dalia se haya ido pero la parte buena es que ya no tenemos que fingir delante de ella.- vuelven a besarse, esta vez con más pasión que antes.

-Bueno era mona pero desde luego siempre te he preferido a tí, estos últimos ocho meses contigo han sido una maravilla.

¿Ocho meses?

No hay que ser un genio para darse cuenta de que hace más o menos un mes Borja y yo estábamos saliendo, con lo cuál, es muy fácil saber que tanto Borja como Isabel me han traicionado. Cada vez tengo más motivos para odiarla. Adrián me ve alterada y le noto ponerse tenso por mi culpa.

-De verdad, si quieres que nos vayamos y lo dejemos para otro día... -se que lo hace por mi y que está ofreciéndome una posibilidad de no pasarlo mal sacrificando así nuestra velada juntos. Podría ser egoísta y decirle que me llevase a casa, pero no se lo merece.

-Tranquilo Adri, estoy bien. Solo ha sido eso, la... ¿sorpresa? No me esperaba que el me hubiese puesto los cuernos.

-Hay que ser gilipollas para serle infiel a alguien y más si esa persona es tan fantástica como tú.

Sonrió y me pongo roja. La película empieza y ayudo a Adrián a sacar tapers con comida. Alcanzo uno que tiene zanahoria cortada en tiras a lo largo. Amo la zanahoria, de pequeña mis padres me decían que era pelirroja porque comía mucha zanahoria, sonrio al recordarlo. Echo de menos a mis padres. Miro a Adrián y sonrio inconscientemente. Es una persona muy agradable y siempre sabe como ayudarme y como interpretarme. Apoyo la cabeza sobre su hombro, mi gesto le pilla por sorpresa, pero enseguida pasa un brazo por mi espalda y abrazados de esta extraña forma vemos la película. Después de dos horas acaba la proyección y anuncian por un megáfono que en media hora pondrán la segunda parte para aquellos que quieran quedarse a verla. Adrián se levanta y me pregunta que si quiero un helado. Yo asiento con la cabeza y le digo que me lo pida de nata y me lo traiga porque tengo que ir al baño.

Cuando salgo de los lavabos del parque y me voy a lavar las manos veo a la parejitas de traidores liandose en la entrada del baño.

-Con ella no hacías esto ¿a que no?- dice Isa acercándose aun más a Borja. Él niega mientras sigue besandola y manoseadole el culo. La empuja contra la pared del baño y mientras él le sube la falda ella le desabrocha el pantalón, desconocía esa faceta salvaje por parte de ambos. Aquello ya no lo aguanto, no porque tenga celos, yo he venido al parque con un dios caído del cielo, sino por el rencor que siento hacia ellos después de que me hayan traicionado de esa manera. Salgo fuera del baño y voy al arenero de niño que esta justo enfrente. Cojo un cubo de Mickey Mouse y lo lleno de agua, pero no de agua de grifo no, el agua del váter que cae cuando tiras de la cisterna. Ellos se callan un segundo cuando oyen la cadena pero cuando ven que nadie les va ha interrumpir siguen con sus gemidos, pobres ingenuos. Me subo sobre la tapa del váter del cubículo continuo al suyo, saco el móvil y les hago fotos, después les hecho el agua por encima. Isabel se pone a gritar porque se le va ha estropear el pelo y Borja mira hacia arriba intentando descubrir quién ha sido. Salgo del baño y justo detrás de mí sale Borja medio corriendo intentando que nadie le vea salir del lavabo de señoras. Le pongo la zancadilla y se cae de cabeza a la arena. Yo me rio a carcajadas. Cuando por fin me canso decido volver al parque. Quedan diez minutos para que empiece la segunda película. Adrian llega unos segundos más tarde con un helado de nata y otro de fresa.

-Siento el retraso había mucha cola en la heladería.

-Tranquilo, yo acabo de llegar.

-¿Y qué has hecho para tardar tanto?- Luego parece recapacitar sobre su pregunta porque se pone rojo y dice- Vale, da igual olvídalo.

Me río con ganas ante sus suposiciones.

-Digamos que me he vengado un poco de una pareja de traidores.- Le cuento lo que he hecho y el niega con la cabeza diciendo que estoy loca pero sé que no lo piensa de verdad porque lo hace con una sonrisa en la cara.

-¿Puedo probar tu helado?- solo llevamos quince minutos de película y él ya se ha acabado el suyo.

-Shh intento ver la peli, es la mejor parte- le digo solo para molestarlo.

-Venga si eres capaz de saber que esta es la mejor parte es porque ya te la sabes, que más da.

-¿Sí te doy helado te callas?

-Lo prometo- levanta las manos por encima de su cabeza para demostrarme que no ha cruzado los dedos.

Le acercó lo que queda de mi ya casi derretido helado y justo antes de que vaya a chuparlo, levanto la mano y le lleno de helado la nariz. Me mira sorprendido y con la nariz llena de nata y no puedo evitar reírme. Coge mi helado y lo tira al suelo y se abalanza sobre mi restregando su nariz por mi mejilla llenandome de helado y haciéndome cosquillas. Después de mucho suplicar y gritar "me rindo" para y me ayuda a limpiarme la cara. Su cuerpo aun esta sobre el mio. La luna es decreciente, queda poco para que sea llena nueva, y eso quiere decir que queda poco para que yo me vuelva sombra. Miro a Adrián de nuevo y veo que sus ojos van de los míos a mis labios y se que quiere besarme aúnque no se atreve porque no sabe como reacionare. Le miró y yo también siento ganas de besarle. Nuestros rostros están muy juntos así que simplemente levanto mi cabeza y nuestros labios se juntan. Me separó de él y le miró, me devuelve la mirada y esta vez es él el que baja su rostro al mio y me besa, es un beso dulce y me encanta. Su boca y la mia se mueven al compás. Mis manos rodean su cuello y mi cintura se eleva hasta pegarse con la suya. Sus brazos rodean la parte más baja de mi espalda y su lengua juega con la mia. Se separar y se tumba a mi lado. Apoyo la cabeza sobre su pecho y él me abraza. Nos miramos de nuevo, adoro sus ojos tan azules, tan claros, los cierra y me da un pequeño beso en la frente.

-Te quiero Dalia, ahora y siempre.

SOMBRA DE LUNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora