Dream Boy

Capítulo Trece

Él tiene el sentido de las líneas divisorias, una vez más, de sí mismo como si él estuviera durmiendo, pacífico, como si que se hubiera quedado en una orilla escuchando las olas de un mar.

Está confundido. Hay gente en la casa, más de lo que puede contar, que pasan por debajo de los pasillos y fuera a lo largo de los porches. Las voces de la gente en todas partes, voces negras y voces blancas, haciendo eco.

Él no puede decir si el tiempo está pasando o si que se ha quedado en ella completamente inmóvil.

Roy se cierne sobre él. Nathan sabe que es un recuerdo y que no debía abrirse a eso. Pero se deja ver Roy, la cara triste limpia colgando como una nube.

Entonces su padre sustituyendo a Roy, que ha desaparecido. Papá sacude el paño de Nathan. Es un día frío, Nathan está muy frío ahora, él no está seguro de qué día es hoy, y papá está despegando la tela que lo mantiene caliente. Linternas son encendidas en Nathan para aumentar la luz de la tarde. Papá no está solo, hay otras voces, otros hombres, y el crepitar de una radio. Papá está mirando hacia abajo en él. Esto no es un recuerdo sino otra cosa. ¿Puede papá ver el agujero? Seguramente él puede.

Por un momento, el miedo vuelve, tan real como en la casa de Rose Hill. Es como si este es el padre de aquella noche, hace mucho tiempo, con los huesos más pequeños que ese padre y la piel más suave. Él con su vientre plano y las manos fuertes se inclina sobre Nathan, y hay algo tierno y triste en su expresión. Nathan se pregunta cómo papá llegó aquí. Nathan se pregunta lo que papá va a querer hacer esta vez. ¿Va a hacer alguna diferencia que Nathan tenga un agujero en el cráneo?

Pero en cambio, papá coloca el paño sobre él con ternura. Es como una visión de algún momento en el futuro, o como algo salido de un sueño. Papá cubre el rostro de Nathan con la tela de gasa y Nathan está agradecido por el pensamiento de la blancura tranquila que espera debajo de ella. Excepto, justo en el momento en que el paño se asienta sobre él para siempre, él ve Roy esperando detrás de papá, con el rostro que emerge de la sombra, triste y demacrado. La visión llena a Nathan con un anhelo que apenas puede contener.

Él sacudirá la cabeza para liberarse. Ha practicado el gesto toda su vida, él lo encontrará fácil. Cuando lo haga, estará en el presente de nuevo, y él estará despierto, y papá estará lejos. Él sacudirá su cabeza, y encontrará a Roy.