El corazon oscuro también late

18

Todos nos preparamos lo más rápido que podemos. Pero la batalla ya comenzó.
Arqueros en los techos, espadachines en tierra, junto con los licántropos de pelea cuerpo con cuerpo. Y los que tienen las armas en los pisos. Ahora la prioridad es que no se acerquen a Daníel.
El caos esta por todas partes, miles de Cazadores atacan a mi clan. La llamada de alerta ya esta hecha, y poco a poco los licántropos van llegando.
Hay un túnel, que conecta todas las casas de los licántropos y la basílica al castillo, haciendo más rápida su llegada. Todos corren a la sala de armas y al de armamento, preparándose para salir a combatir.

-Lucy, Selene, vayan al techo y asegúrense de que nadie más pueda entrar-digo mientras meto las balas en una escopeta para Joseph.

Selene y Lucy me miran un poco ceñudas. Al parecer no siguen contentas con la idea de que Joseph nos ayude. Bien, no estoy para cortesías

-¡Muévanse!-les grito

Las chicas hacen una mueca pero asienten. Toman las ballestas y salen a toda prisa.

-Dominic, Jack, vayan a todas las habitaciones y tapen las ventanas con tablas, no quiero a nadie mas adentro.
-¿Y eso de que servirá?-pregunta Jack indiferente
-Retenerlos en lo que la demás manada llega.
-A la orden mi señora.

Jack le hace un gesto a Dominic para que lo siga. Por suerte Jack es el único que no a perdido el respeto por su líder. Solo estamos Joseph y yo.

-Veo que no les caigo bien-dice Joseph con una pequeña sonrisa.
-¿Enserio?-digo sarcástica.

Joseph y yo juntamos todo el armamento posible para nuestro uso, lo demás esta para la manada.
Tomo la caja de tornillos y dos martillos.

-Vamos con mi hermano.

Joseph asiente, tomando las tablas de madera y camina detrás de mi. Abro la puerta.

-¡Cuidado!

Jonathan me empuja a un lado evitando que una flecha me de justo en el corazón. Él toma un cuchillo de su cinturón y lo lanza con fuerza. Me asomo justo en el momento en que el cuchillo se clava en la frente de un cazador. Sonrío y miro a Joseph aprobatoria. Él solo me guiña un ojo.
Trotamos por el pasillo, con cautela, deseando (o por lo menos yo) encontrarme con algún cazador y despedazarlo.

Llegamos a la habitación de Daníel. Todo esta en orden. Hago una seña a Joseph con mi cabeza y nos encargamos de tapar las ventanas con las tablas. Le entregó un martillo.

-Las tablas-ordenó.

Joseph me entrega una tabla y juntos empezamos a cubrir la ventana, que por suerte solo es una. En eso la puerta se habré de golpe, Joseph y yo nos giramos desenvainando nuestras espadas.
Pero solo son Lucy y Selene.

-¿Que mierda hacen aquí?-les grito.- Se supone que estarían en el techo...
-Dominic a muerto-me interrumpe Selene.

Me congelo. ¿Dominic... Muerto?

-Eso no es posible-digo.- Dominic es el mejor que eh entrenado, es muy difícil vencerlo.
-Pues ya llego alguien que lo venció por completo-Selene se pasa la mano por el pelo, evidentemente desesperada.- Estamos perdiendo esta batalla Dalia, muchos de los iniciados no ah llegado y cada vez llegan mas cazadores.
-Y lo peor-intervine Lucy.- Es que no sabemos de donde llegan tantos. Es casi imposible que haya más cazadores que inmortales.
-Joder-exclamo

Debo de pensar en algo rápido. Le doy mil y un vueltas al asunto, pero no encuentro nada. En eso Joseph intervine.

-Hablare a mi manada. Ellos ayudaran-me mira serio.- Solo si juras aceptar nuestras condiciones.
-¡A la mierda con tus condiciones!-grita Lucy.- No hay trato.
-Le estoy hablando a la jefa del clan-dice secamente Joseph.-¿Acaso eres tu la jefa?

Lucy me mira entrecerrando los ojos.

-Si aceptas tu hermano te matara, y no estaré allí para defenderte.

Alzo una ceja irónica.

-¿Y de cuando acá te preocupas tanto por mi?

Lucy gruñe. La ignoro y me giro hacia mi estupido novio.

-Si me traicionas te cortare en dos-digo mirándolo a los ojos.
-¿Cuando te eh traicionado?-sonríe pícaro
-¡Esto es una mierda!-exclama Lucy.

Lucy se gira y abre la puerta. Se gira y nos ve.

-Todos moriremos por tu estupida decisión, y créeme que si te pasa algo no dejare que nadie te salve.

Se vuelve a girar, pero esta vez se detiene. Sin decir ni mover un músculo.

-¿Lucy?

Selene se acerca a ella, pero antes de tocarla, Lucy cae de espaldas. Selene grita y se arrodilla junto a su amiga. ¿Pero que mierda?
Me acerco a Selene y veo el cadaver de Lucy. Tiene una flecha clavada en el corazón. Alzo la mirada. No hay nadie en el tejado. Jalo el cuerpo de Lucy hacia atrás.

-La puerta-le digo a Selene.

Ella se levanta y cierra la puerta.

-Lucy-chilla Selene.
-Deja de lloriquear y ayuda a Joseph a entablar las ventanas.

Selene me mira feo pero obedece. Miro el cuerpo de Lucy, joder, mi hermano se destrozara al saber lo que acaba de pasar. Esto no cuadra. Los vampiros no tienen corazón (técnicamente) ¿como una flecha común y corriente la pudo matar?
Tomo la flecha con fuerza y la saco de golpe. Y es cuando me doy cuenta. La punta no es común ni corriente. Parece hecha de vidrio, por que un resplandor azul-violeta apenas se hace visible. La miro bien... Es una representación de luz solar. Rayos ultravioleta. Joder, estos malditos tienen todos los métodos para asesinarnos.

-Joseph-lo llamo

Él se acerca casi al instante. Se agacha detrás de mi y suelta un silbido pequeño.

-Así que eso la mato.
-Son unos hijos de puta-declaro
-Esto se pone peor. Iré por la manada. Será más rápido.
-¿Y qué esperas?

Joseph asiente y sale corriendo. Me levanto y veo como Joseph sale por la puerta. No la cierra así que me acerco a la puerta y mi corazón se detiene.
Camino un poco, hasta llegar al barandal. Todo es un caos. Humo, fuego, espadas, armas de fuego inundan el castillo. Cazadores contra inmortales. La batalla a comenzado. Pero eso no es lo que me paraliza de sorpresa y cierto miedo. Mi manada muere. Vamos perdiendo. Son muchos los cazadores, y cada uno de los licántropos trata de pelear con dos al mismo tiempo. Pero es casi imposible ganar. No puede ser... Mi manada... Mi familia... Muere.