El error de la serpiente- Dramione-EDITANDO

3. Mejor en secreto

   Hermione llegó justo a tiempo para subir al carruaje con Harry y Ron.
-¿Donde te habías metido?- preguntaron Harry y Ron al unisono.
-Eh... No, en ningún lado chicos...
-En algún lado tenías que estar- dijo Ron, y luego de un instante añadió- Digo, la gente no desaparece como si nada.
-No desaparecí, es solo que estaba hablando con unas chicas de primer año que estaban algo nerviosas por la ceremonia del sombrero, ya saben, cosas de prefectos- Mintió Hermione haciendo un gesto con la mano.
-¡Pero si a ti no te mandaron a hacer nada!- Exclamó Ron y sólo consiguió que Harry aparte la mirada y que Hermione haga una mueca para nada amigable.
   Ron no había creído en eso ni por un momento. Cuando se trataba de Hermione, por algún motivo, no podía evitar preocuparse.
   Durante lo que siguió del viaje hacia el castillo, nadie habló. Sólo se dedicaron a observar por las ventanillas. Al llegar a Hogwarts cruzaron el gran vestíbulo hasta llegar al gran comedor, donde se sentaron en la mesa de Gryffindor entre Fred y George, esperando a que el gran banquete comience.
-Estoy hambriento- dijo Ron, mientras se tocaba la panza.
-¿Cuando no lo estás?- replicó Fred y todos rieron menos Ron, quien le dedicó una mirada asesina.
   Todos hablaban de sus veranos menos Hermione. La joven no podía evitar estar como ausente. Aún no podía dejar de pensar en el beso de Draco, en la forma en que él la había hecho sentir...

    Inconscientemente echó una mirada hacia la mesa de Slytherin buscando a Draco entre la gente. Cuando al fin vio al muchacho rubio platinado, se quedó observándolo hasta que éste la miró, sonrió, y le hizo una seña con la cabeza de que lo siguiera. Fue casi imperceptible pero Hermione lo notó. Acto seguido se levantó de la mesa y salió del gran comedor.

-Lo siento, olvidé algo- mintió nuevamente Hermione, y luego añadió- vuelvo mas tarde. Se levantó de la mesa y salió del gran comedor disimuladamente, pues no quería que todos notaran que había salido detrás de Malfoy.
   Una vez fuera del gran comedor, vio la punta una túnica que doblaba en un pasillo: Draco.
   Lo siguió escaleras arriba hasta la biblioteca, donde este frenó y la miró. Estaban en la sección de runas, donde casi nadie iba y, de todos modos, nadie estaría allí en pleno banquete e inicio de curso.
-Quiero hablar contigo- dijo Draco algo nervioso. 

   ¿Draco Malfoy nervioso? Se preguntó Hermione a si misma sin creerlo. Todo era tan extraño... parecía como si hubiera una cámara oculta en algún sitio y eso fuera uno de esos típicos programas de bromas Muggle, pero no podía serlo.

 -Sí, quisiera una explicación porque no entiendo mucho...

-Bueno, es que me gustas- dijo Draco. Hermione no podía dar crédito a sus oídos, nuevamente.- creí que se me pasaría... Pero no. Sabes, he soñado contigo y no puedo sacarte de mi cabeza desde ese momento. Juro que lo intento pero no puedo y pensé que tal vez podría dejar de luchar contra mis sentimientos y darnos una oportunidad... ¿Que dices? ¿Nos damos una oportunidad?
   Eso fue suficiente para dejar a Hermione sin habla. Respiró profundo e intentó hacer que su lengua se desparalizara. Pensándolo un poco, Malfoy siempre le había resultado atractivo y además, ahora que parecía no ser un rubio hueco sin sentimientos...
-Creo que sí, tendríamos que darnos una oportuni- Hermione no pudo terminar la frase porque Draco la besó lenta y apasionadamente. Luego de unos minutos, se separaron.
-Creo que es mejor que vayamos al gran comedor o vendrán a buscarnos- dijo Hermione, a lo que Draco asintió.
-Y oye, mejor mantengamos esto en secreto, podría generar problemas-Dijo Draco pensando en sus padres y esta vez fue Hermione quien asintió.

   Caminaron por los pasillos sin decir nada, casi sin atreverse a mirarse. La tensión y el nerviosismo  podía sentirse en el ambiente.

Cuando llegaron hasta las puertas del gran comedor, Draco dijo:
-Entra tu primero, yo lo haré luego. Sería muy obvio si entráramos juntos.- Hermione puso una mano en le picaporte de la alta puerta de roble que comunicaba el vestíbulo y el gran comedor pero Draco dijo- ALTO, olvidé algo...
-¿Qué?- dijo Hermione.
-Esto- replicó Draco y la besó.
   Luego Hermione, sonrojada, entró al gran comedor y se sentó en su lugar. La ceremonia del sombrero seleccionador ya había finalizado y la comida estaba apareciendo en los platos. Se sirvió algo de pollo y comenzó a comer. Un rato después, miró a la mesa de los profesores en busca de Hagrid. Quería saludarlo pero antes de verlo a él, se distrajo con una mujer rechoncha, con cara de sapo y ropa color rosa chillón.
-¿Quien es la de cara de sapo?- preguntó Hermione.
-Es Dolores Umbridge- dijo Harry- será la profesora de defensa contra las artes oscuras este año. También la vi en el ministerio, en mi audiencia.
   Hermione lo miró sorprendida
-¿Saben lo que eso significa? El ministerio está interviniendo en Hogwarts...- dijo Hermionez preocupada. Los tres se miraron.
   De pronto se produjo un gran estrépito alrededor: el gran banquete había terminado. Se levantaron y se fueron a sus habitaciones, para dormir.

Espero que les esté gustando la historia, digame que les parece y los invito a que se pasen por mi perfil y vean mis otras obras, tal vez alguna les interese... Ah, casi me olvido: recomiendenle la historia a sus amigos, me harían muy feliz! Gracias por leer!