1. Me tropiezo con la nada y me reencuentro con mi hermana.
-¡Esto es indignante!
-Cálmate, Aby. Sólo serán unos años.
Esa es la forma que tiene mi madre de convencerme para que salga del coche y vaya a la estúpida cárcel... Digo, academia. La estúpida academia donde van todos los hijos de padres que han descubierto algo que me da igual, o simplemente por tener contactos. Que es mi caso. Mi madre conoce a la hermana de la tía de la florista, que curiosamente es sobrina de la profesora de robótica experimental (una clase tan aburrida como lo parece. ¿Quién dijo que nada es lo parece? Alguno que no tendría ni idea de lo que es colegio).
-Abigail Dog, como no bajes ahora mismo del coche te juro que te quemo la cama -farfulla mi querido y para nada amargado padre.
En un abrir y cerrar de ojos ya me encontraba viendo cómo se iba el coche. "Todo por mi cama" pienso. Me giro resignada. Sólo mi familia es capaz de dejar a una pobre adolescente, sin idea de nada, sola a la intemperie. Camino cuesta arriba, mirando hacia todos lados sin encontrar la academia. Maldita mi hermana, lleva estudiando allí tres años y ni me dice dónde queda. Sigo andando hasta que siento el impacto de mi cara contra algo y caigo al suelo de culo, espera, que no tengo culo.
Olvidemos eso.
Miro hacia arriba, para saber cúal ha sido la causa de que me caiga y me encuentro con la nada. NADA. ¿Tan patosa soy que hasta me choco contra el aire? Me pongo en pie y levanto hacia delante las manos, para evitar volver a chocarme con el aire. Eso sonó raro. Debo replantearme mi vida, en serio.
Los siguientes diez minutos me los paso andando como un pato. Brazos hacia delante, culo para atrás. Sigo así hasta que una voz me asusta haciendo que me caiga de nuevo.
-¡Mierda! -me sobo el culo, o lo que debería ser el culo. Mi hermana debería compartir un poco, parece la Kardashian de nuestra época (Mi padre al menos me dijo que esa tenía un culo enorme). Miro a la propietaria de la voz. Una chica alta y rubia se reía en frente mía.- Gracias por ayudarme -Ruedo los ojos y me pongo en pie y sacudo la suciedad inexistente de mis pantalones.
-Perdona -la rubia consigue calmar su risa, que es muy escandalosa para mi gusto. Vuelvo a rodar los ojos- ¿Se puede saber cómo te caíste?
-Pues creo que me caí con el aire, no lo sé.
-¿El aire? -la rubia alza una ceja- Apuesto lo que sea a que fue el campo -estira el brazo hacia delante hasta parecer que toca algo-. Vaya, que raro, tengo razón - Se vuelve a mirarme-. Mi nombre es Sasha Prier.
-¿Sasha? ¿Ese no es nombre de perro?
Su rostro se vuelve rojo, de la furia tal vez. La verdad es que me daba igual.
-No.Es.Nombre.De.Perro -Separa las palabras, como si se estuviera reteniendo las ganas de pegarme un puñetazo.
-Vale, vale, no es nombre de perro -Alzo las manos-. Pero no me ataques, por favor.
-Lo intentaré -sonríe.- El campo de fuerza que rodea la academia -contesta a la pregunta que estaba a punto de hacer. ¿Tan obvia soy?
-¿Un campo de fuerza rodea la cárcel? Digo, academia -Abro mucho los ojos, aunque no debería sorprenderme; en la Tierra 2 es incluso normal que los edificios "públicos" estén rodeados por uno de esos.
-Sí, sólo tienes que decir tu nombre completo y te dejará pasar. Deberías saberlo, lleva ahí toda la vida -Sasha pone una cara extraña, como si hubiera reparado en algo-. A no ser que... -murmura, me mira y pega un chillido.- ¡¿ERES NUEVA?!
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GALAXIDE
General FictionLa Tierra a lo largo de sus numerosos años se ha ido deteriorando, hasta llegar a su fin. Los humanos debieron crear un nuevo planeta. No les fue fácil, obviamente, pero contaron con la ayuda de los mejores físicos y astrólogos, entre otros. L...