Capítulo 12. Hora de la verdad.

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-Hija ¿Qué haces levantada tan temprano?-exclamó mi madre que acababa de entrar al comedor.
-Te preparé el desayuno
-Oh hija no te hubieras molestado
-Siéntate.-asintió
Después del desayuno recordé que tenia una charla pendiente con mi madre.
-Madre
-Dime querida
-Tengo que hablar contigo muy seriamente
-¿Sobre que hija?-se cruzó de brazos
-Mira yo. . .-tragué saliva.-quisiera hablar, sobre. Mi padre-la expresión de mi madre se transformó en una de horror
-¿Por qué quieres hablar de él?-respondió cortante
-Quiero saber en donde esta
-Ya te lo dije; En prisión
-Eso ya lo se, pero ¿En cual prisión?
-¿Para que quieres saber eso?
-Por favor madre solo quiero saber donde esta para
-¿Irle a buscar? . . .No, no, no, no y no. No iras a buscarlo
-No planeaba hacerlo pero. . .
-¿Pero que?
-Solo quiero saber si él fue quien mató a Mateo Hooligan él padre de Santiago
-Te he dicho que si ¿Por qué te mentiría?
-Mamá por favor te lo suplico. Dime en donde esta
-¿Esto es por Santiago verdad?
-Más que nada es por mi, solo quiero estar segura de que él mató a ese hombre. La verdad es que no estamos 100% seguras de eso. Por favor madre. Dime
-. . .Bien.-suspiró-esta en el reformatorio del estado
-Eso no es muy lejos de aquí.-miré al techo-bien, nos vemos en la cena
-Un momento señorita Vanessa Hillary Baxter Hockings. No irás tu sola a ese lugar. . .-se colocó en mi camino para no dejarme pasar.-Sí quieres ir a ver a tu padre. . .te acompañaré
-Esta bien mamá. Vamos

*******

-Buenos días señoritas ¿En que podemos ayudarles?
-¿Disculpe aun es hora de visita? -exclamé
-Claro que si
-¿Podríamos ver al señor Javier Baxter? por favor
-Mmmmm. . . Javier Baxter, . . .claro que si, pasen por aquí
El policía nos guió a la sala de visita
-Por favor tomen asiento, en un momento lo traeré.-dicho esto el policía se fue dejándonos a mi madre y a mi en ese lugar que por cierto me empezaba a causar terror
-Hija, aun estas a tiempo de arrepentirte de esta decisión e irnos a casa y hacer como que nada de esto ocurrió
-Mamá. Es mi padre, no lo recuerdo, prácticamente esta será la primera vez que lo vea con pleno uso de razón. Además tengo que saber si es que mató a ese hombre
-Créeme que no lo reconocerás. Tu padre ha cambiado desde que lo arrestaron.
-¿Ya habías venido a verlo?
-Sí
-¿Y por qué no le preguntaste lo de Mateo Hooligan?
-No quería involucrarme en ese asunto. Y las únicas veces que lo he visto fue solo para arreglar los papeles de divorcio, y en la corte cuando dictaminaron su sentencia.
-¿Y. . .como es?-francamente tenia miedo, por fin vería a mi padre de nuevo. Yo necesitaba saber como era para irme haciendo a la idea antes de que apareciese por esa puerta e ir desechando la idea de como me imaginaba que era.
-Hay Vanessa, el es igual a ti. Ambos de carácter fuerte, tan duros como la roca. Y pues en cuanto al físico, pues él es un poco más moreno que tu y yo, tiene cabello color negro y unos ojos café claro. ¿Eso responde a tu pregunta?
-Sí.-suspire
La verdad aun seguía nerviosa. No podía imaginarlo ni siquiera un poco, tendría que verlo. . .y así fue. El policía apareció de nuevo en la sala y lo acompañaba un hombre que por las características que tenia, supuse que era mi padre.
"Llegó la hora de la verdad." Pensé
-Estas mujeres han venido a verte.-el policía le quitó las esposas-te estaré vigilando Baxter-el policía nos dejó solos a los 3. Nos miró por unos segundos
-¿Diana? ¿Pero que haces aquí?
-No fue mi idea venir. Escucha Javier, tu hija esta aquí por que quiere preguntarte algo
-Mi hija
-Padre ¿Acaso no me reconoces? Soy yo Vanessa, tu hija
-No es posible. Diana me dijiste que la habías enviado a un orfanato -Lo hice por que te la querías llevar del estado
-Papá. Quisiera preguntarte algo, a eso he venido
-¿Y que es?
-¿Tu mataste a Mateo Hooligan?
Mi padre se quedo en silencio, mis piernas temblaban por que tenia miedo de que me respondiera que si. Eso sólo significaba que mi padre si había matado al de Santiago y que ahora no podría tener una oportunidad con el de nuevo. Y tal vez si eso fuese mentira podría aclarar las cosas con el.
-¿Y bien papá, si lo hiciste?-una lágrima salió de su ojo
-No. . .-su respuesta fue como si me hubiesen quitado un gran peso de encima
-Y entonces si no lo mataste ¿Por qué estás aquí?
-Por qué aparte de que me culparon por ese crimen que no cometí. Hice otros crímenes, que tenían que ver con tráfico de drogas. Pero yo no maté a Mateo Hooligan. El erá mi amigo
-Pero papá ¿Cómo fue que te metiste en todo esto?
-Fue por mi trabajo, verás hija. Mateo y yo trabajábamos en la misma empresa, ahí nos hicimos amigos, pero nuestro jefe estaba involucrado en asuntos de contrabando, él quería que yo y Mateo entraramos a esos negocios. Mateo se negó pero mi error fue aceptar, había mucho dinero de por medio, quería darle a ti y a tu madre una vida mejor. Meses después nos corrieron de la empresa a mi jefe y a mi. El me dijo que Mateo nos había delatado y que había sido ascendido a jefe de la corporación, así que mi jefe me ordenó que fuera a matarlo. Pero yo no pude hacer eso por que él era mi amigo. Así que me dijo que más me valía huir del estado por que me iba a denunciar con la policía, y eso hizo. Por eso quería llevarte conmigo muy lejos, para que no te hiciera daño. Días después me enteré que mi jefe había mandado a alguien más a matarlo.
-¿Y por qué creen que tu lo mataste?
-Por qué mi jefe fue a decirle a la esposa de Mateo que había sido yo, ella como le creyó, pues me demandó y me metieron a la cárcel por tráfico de drogas y por supuestamente haberlo matado
-Ahora entiendo. Entonces la madre de Santiago no sabe la verdad.
-¿Quien?
-. . . ¿Papá no sabes si Mateo Hooligan tenia un hijo?
-Si, tenia 2. Y dime hija ¿Por qué has venido a preguntarme todo esto?
-Te pregunto esto por que mi ex novio. . .es el hijo de Mateo Hooligan
-¡¿Qué?!
-Sí padre, y por esa razón es que rompimos
-¿Tu se lo dijiste?
-Lo hice por que no sabia que era su padre. Ni siquiera llevaba su apellido.
-¿Y te dejó por eso?
-Sí
-Pues ahora que ya sabes la verdad pueden aclarar las cosas y volver a ser novios
-. . .Si. Gracias papá.-lo abracé
-Por nada hija, creo que ambos merecían saber la verdad.

Quiéreme Otra VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora