PROLOGO

10.6K 308 6
                                    

Mi nombre es Lauren Michelle, tengo 21 años, estudio arquitectura. Frío... carácter frío e indolente; es lo único que escucho cuando alguien quiere hacer una descripción mía. Carente de sentimientos, emociones, hay quienes incluso se atreven a afirmar lo siguiente, que si bien no mueve nada en mi puede ser perturbador de pensar que su aseveración sea verdadera: sin alma.

¿Pero como llegue a este punto? No, ustedes no quieren saber mi historia, es aburrida, aunque si se las cuento no faltara quien diga que soltó un par de lagrimas. ¿Porque? Esa es la naturaleza humana siempre compadeciéndose de cualquiera y de esa manera nos sentimos bien con nosotros mismos, aunque nuestra propia vida sea un asco y nadie se apiade de nosotros. Ya para este punto tendrás ganas de darme una navaja o directamente darme un tiro y te lo agradecería. Pero mi estado no es ''emo'' que si bien solía burlarme de ellos, porque no comprendía todo lo que conllevan, no es solo una moda, es algo mas, pero este relato no es para hablar de ellos y de como suicidarme, que todos modos no pienso hacerlo.

¿Quieren mi descripción para imaginarme? Pero que originales... tal vez no quiera dárselas. Esta bien lo diré; de estatura 1.63 estoy en lo común, tez clara, cabello largo negro, ojos color verde, pero a nadie suele importarle eso, no es una característica que resalta, siempre a la gente le importa mas prejuzgar por mi vestimenta, lo cual no lo niego siempre es de lo mas despreocupada, porque a fin de cuentas no comprendo la estúpida moda, si no tuviera el cabello largo dirían que soy un chico, pero esperen, me han dicho que soy rockero o un heavy, que me deje la barba y el bigote, después se disculpan cuando se dan cuenta que soy una chica, aunque es difícil de darse cuenta, no es que no tenga atributos porque los tengo, pero supongo que abajo de todas esas sudaderas holgadas que uso no se nota mucho.

Transcurre mi monótona vida, debo ir a la universidad porque mis padres me lo exigen y como no tengo dinero para largarme debo hacer lo que me dicen al menos por ahora. No es mi primer día de clases, es el segundo año de esta misera tortura, porque esta no es mi verdadera pasión. Pero el punto no es que me hayan encaminado a algo que no quería estudiar, el punto es que no sirvo para nada y si por mi fuera seguiría pensando que estudiar así pasaran los años, lastima que no pueda simplemente trabajar.


''Mich'' - CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora