Después de haber despertado del juego de realidad virtual conocido como GGO (Gun Gale Online), y luego de terminar el incidente con Death Gun.
Él, había despertado y abriendo lentamente los ojos, lo primero con lo que se encontró fue con una larga y sedosa cabellera castaña esparcida en aquel colchón de hospital que lo acogía en ese momento, acompañada de una sensación cálida en su mano izquierda.
Al intentar incorporarse Kazuto, la muchacha que había estado recostada sobre la cama de hospital que él ocupaba y sujetando la mano masculina, levanto levemente la cabeza para encontrarse con la mirada del joven espadachín que tanto amaba y ya sin el Amusphere puesto. Al verse, ambos sonrieron y acto seguido Kazuto la atrajo hacia sí en un abrazo reconfortante, lleno de anhelo y necesidad.
Estuvieron solo unos segundos de esa forma ya que Aki, la enfermera que estaba al cuidado de Kazuto aún seguía en la habitación pero sin decir nada para no interrumpir, aún así los dos jóvenes sintieron un poco de vergüenza por lo que se separaron dejando ver un leve sonrojo en el rostro de ambos.
Con un poco de ayuda de Asuna, el pelinegro terminó por vestir lo que le faltaba de ropa para luego rápidamente apresurarse a salir corriendo hacia la puerta como si hubiera recordado algo importante (claro, no sin darle una pequeña explicación rápida a Asuna de la situación y de lo que debía hacer en esos momentos)
Ya en la puerta de la habitación.
- Espérame aquí por favor - Kazuto posó una mano sobre la mejilla izquierda de la joven, notando al instante como esta se tiño en un leve rojo ante pequeño el contacto.
-No te preocupes kir... - negó levemente con la cabeza y corrigió sus palabras - Kazuto kun puedo ir sola a casa - le dedicó una tierna sonrisa para que no se preocupara, pero Kazuto negó con la cabeza y le dijo.
- Volveré en un momento, por favor espérame... no quiero que te pase nada... no, si yo tengo la posibilidad de llevarte - tenía una mirada de suplica reflejada en sus profundos ojos negros y ante esto Asuna no pudo hacer mas que asentir levemente, pues conocía muy bien al joven y sabía perfectamente que él no dejaría de insistir hasta que ella aceptara esperarlo y como el incidente con Death Gun aun no había acabado del todo (al menos en el mundo real), Asuna no tuvo más opción que aceptar.
Y después de esto solo pudo ver como su amado espadachín se alejaba rápidamente en auxilio de la francotiradora que había conocido en el juego, mejor conocida como Sinon.
Al verlo desaparecer completamente de su rango de visión suspiro pesadamente y con resignación.
"Parece que salir con un héroe es sumamente difícil"
Fue lo que escuchó a sus espaldas, para luego caer en la cuenta de que no se encontraba sola y girándose hacia la persona que había pronunciado esas palabras respondió.
-No se puede hacer nada - encogiéndose de hombros continuó - siempre ha sido así - una leve sonrisa tierna se dibujo en sus labios al recordar a su amado espadachín negro - lo conocí así y aunque me preocupe... por él..., no lo cambiaría por nada en el mundo porque así es Kazuto kun y siendo de esa forma me enamoré de él.
La enfermera asintió ante las palabras de la jovencita y le dedico una sonrisa cálida pues sabía que todo lo que ella le decía era cierto y se notaba cuanto se amaban sin importar las circunstancias en las que estén.
-Claro, no puedo negarte que me preocupa mucho que se involucre en algo peligroso - bajo la mirada un tanto triste recordando la situación actual.
Ya que, nadie sabía que realmente era muy doloroso para ella el solo pensar en que algo malo le pudiera pasar a Kazuto y también estaba el hecho de que él quería protegerla a toda costa, pero no dejaba que ella hiciera lo mismo por él
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Motivaciones
FanfictionLos personajes no me pertenecen son propiedad de Reki Kawahara. Son pequeñas historias que cuentan la vida de Kirito y Asuna en el mundo real una vez que despertaron del mundo virtual