Enamorada De Un Slytherin | Draco Malfoy

Capítulo 21: Locura.

"El Señor Oscuro... está de vuelta"

"¡El-que-no-debe-ser-nombrado ha resucitado! ¡El Señor Oscuro ha resucitado!"

Un grito desgarrador.

Una risa malvada.

Otro grito.

"Julienne... Ten una vida feliz..."

Otra risa malvada.

"¡Tiran! ¡No! ¡Por favor, no me dejes!

"¡Muere! ¡Avada Kedavra!"

"¡No!"

"El Señor Oscuro... está vivo"

Una risa malvada...

Un grito.

-¡No sé nada! ¡Lo juro!

"¡Mientes! ¡Crucio!"

Otro horrible grito.

"¡Para! ¡Él no tiene nada que ver con ellos!"

"¡Cállate, Julienne!"

"¡Crucio!"

"¡AHHHHHHHHH!"

"¿Cómo? ¿Por qué? ¿Él está detrás de el Elegido?

"El Señor Oscuro está detrás de Potter!"

"Ven conmigo... O voy a matarte..."

"¡Corre, Julienne, corre!"

"¡TIRAN!"

"¡Corre! ¡Ve!"

"Ya-sabes-quién ha resucitado!"

"¡Corre, Julienne!"

"Por fin ha regresado..."

"¡Carre!"

"Tonto. ¡Avada Kedavra!"

"¡Noooooooooo!"

Sangre.

Amargo.

Vino.

Serpiente.

Diario.

La Sala de los Menesteres.

Azkaban.

Mi mente se quedó en blanco cuando el último pensamiento había entrado en mi mente.

Horrocrux.

~~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~~ 

 -¡Julienne! - exclamó Draco cuando de repente ella se desmayó.

Pasos acelerados vinieron hasta la cama de Julienne y se detuvieron justo en frente de ella, revelando al Trio de oro que estaba completamente agitado.

-¡¿Que pasó?! - preguntó Hermione mientras caminaba al lado contrario de la cama de Julienne.

-Estábamos hablando cuando de repente se desmayó - murmuró Draco, no realmente en el estado de ánimo correcto para cuidar si estaba hablando con su enemiga/sangre sucia en el momento.

-¿Qué estaban hablando? - preguntó Harry, caminando al lado de Hermione, seguido por Ron.

-Su hermano fue asesinado por... el Señor Oscuro - respondió Draco, mirando fijamente al pálido, hermoso e inocente rostro de Julienne... o eso era lo que estaba pensando.

Los tres Gryffindors jadearon tan pronto como esas palabras salieron de los labios de Draco.

-¿Su propio hermano? Oh, Dios mío... - suspiró Hermione, mirando a Julienne.

Ella tomó una de sus manos y la apretó con fuerza.

-... ¿Cómo sabes esto? - Harry le preguntó a Draco, mirándolo con desconfianza.

-Ella me lo dijo... - respondió Draco, en voz baja.

Harry apretó el puño.

-La forzaste a decirlo, ¿¡No!? - dijo, alzando la voz.

Esto llamó la atención completa de Draco.

-¿¡Por qué iba a hacer tal cosa con ella!?

-¡Oh, no lo sé! ¡Tal vez porque eres un Malfoy!

-¿¡Por qué estás actuando así!? ¿¡Por qué incluso consideras que sea un imbécil con ella!? ¡Oh, ya lo sé! ¡Tal vez porque estás celoso de que ella no te diga nada, pero a mi me lo diga todo!

Eso afectó los nervios de Harry. Apretó los puños y estaba a punto de saltar sobre la cama y golpear a Draco en la cara cuando de repente Julienne se sentó. La atención de todos cayó en ella, pero el miedo se reflejaba en sus ojos.

-¿Julie...? - susurró Hermione mientras extendía la mano para tocar el hombro de Julienne. Cuando de repente Julienne comenzó a gritar.

Ella comenzó a rascarse los brazos (desde su muñeca hasta el codo) viciosamente.

-¡Haz que salgan! ¡Sácalos de mí! ¡Por favor! - gritó mientras sus uñas comenzaron a cavar en su piel.

Su piel estaba... horrible. Sus dos brazos tenían una increíble cantidad de pequeñas protuberancias. Más de 100. Y algunos tenían gusanos que salían con pus blanca.

Los gritos de Julienne comenzó a hacerse más fuerte.

 -¡Quema! ¡Quema! - gritó en agonía. Cuatro de sus miembros comenzaron a ponerse rojos.

-Oh, Dios mío... - susurró Hermione mientras observaba a Julienne hiperventilar.

-Yo... ¡Iré a buscar a Madam Pomfrey! - dijo Harry y se escapó a buscarla.

Ron y Draco miraron a la enloquecida Julienne quien había estado cavándose a si misma, locamente.

-¡Ayúdame! ¡Arañas! ¡Quema! - chilló.

-Julie... ¿Qué te pasa? - murmuró Hermione mientras las lágrimas corrían por sus ojos. Ella apoyó la cabeza en el hombro de Ron y lloró por su amiga.

Otro agudo gritó escapó de sus labios cuando la señora Pomfrey llegó a su lado, empujando a Draco en el proceso.

-Oh... - susurró la señora Pomfrey, mirando fijamente a los rasguños, cortes, hinchazones, gusanos y protuberancias en todo su cuerpo - Ella ha sido maldecida...

Harry comenzó a temblar, con ira.

 -¡Les dije que Malfoy le hizo algo! - gritó a nadie en particular.

Draco miró a Harry.

-¿¡Por qué iba a hacer tal cosa!?

-¡Porque eres un Mortífago! ¡Harías cualquier cosa Voldemort te mandara a hacer!

Draco se estremeció al oír su nombre, pero decidió ignorarlo.

-¡No soy un mortífago! - mintió - ¿¡Cuántas veces tengo que decirte esto!?

-¡Ustedes dos cállense! - gritó la señora Pomfrey - ¿Alguno de ustedes sabe exactamente por qué ella ha sido maldecida por el Señor Oscuro!?