Don't Scream

10: detrás de ti

- ¡V-vete de a qui o llamare a la policía! - Grito Lucy tratando de amenazar al sujeto que estaba detrás de la puerta. No tenia nada con que comunicarse así que solo estaba vacilando al tipo. Esperando a que se lo creyera.

- Hazlo - Se escucho la voz psicópata y divertida que Lucy antes había escuchado en sus sueños acaso ese era el tipo que siempre vagaba por las pesadillas de esa chica?

A la ojiverdes la tenían prácticamente contra la pared, el tipo sabia que no lo podía hacer ya que este tenia su celular, y la había escuchado buscarlo desde hace varios minutos. 

El tenia la ventaja en este momento.

- ¿Que quieres? ¡toma lo que quieras y vete! - Le grito lucy ya presa del pánico. 

- ¿Porque no abres la puerta? - Dijo del otro lado en tono burlón moviendo la perilla haciendo que a Lucy se le pusieran los pelos de punta. - Solo quiero hacerte hermosa JAJAJA - esa risa psicópata, Lucy también se le hacia familiar esa risa. 

"¿Porque mis pesadillas se hacen realidad?"  Se quejo la chica tapándose ambos oídos para no escuchar la terrible risa del Psicópata que estaba detrás de la puerta. "¿Esperen que dijo?" reacciono Lucy a lo que el tipo había dicho antes.

- Esto es el colmo - se llevo sus manos hacia su rostro y dio un gran suspiro. Se acerco a la puerta pero también se percato de no estar suficientemente cerca de ella - ¿Porque me seguiste? - Lucy se asombro así misma, no había dudado en preguntarlo en voz alta haciendo que la risa del sujeto de detuviese.

- Me recuerdas a alguien. . - El tono que le daba ahora era uno profundo, misterioso y casi serio. La chica sintió escalofríos en su ser al escucharlo, sentía que estaba dentro de la habitación pero era prácticamente imposible. Volteo para cerciorarse que estaba sola en su habitación y así fue. 

Al parecer ya estaba alucinando un poco mas de la cuenta. 

su mirada se detuvo al ver la ventana, al menos ahora tenia una forma por la cual salir de la casa y correr como si no hubiese un manaña hasta la casa de Alex. 

Para no levantar sospechas, Lucy continuo hablando con el tipo mientras habría la ventana:

- ¿Q-Quien es ese alguien? - Pregunto moviendo unas pequeñas figurillas que estaban en la ventana. La perilla de la puerta se movía ahora con mas brusquedad. Como si supiese que Lucy trataba de huir de ahí.

- A ti no te debe importar eso - La perilla hacia cada vez mas ruido y Lucy lo aprovecho para abrir completamente su ventana. Gracias que no tenia protección se le hacia muy fácil el salir, lo único que hacia mal calculo era la altura. Lucy temía a las alturas así que no sabia como bajar, tan solo ver hacia abajo le daba vértigo. camino hacia atrás y se lo pensó dos veces para lo que próximamente haría.

La perilla se detuvo y escucho un filo que sin dudar era de un cuchillo. Se podía escuchar como el psicópata acariciaba la madera de la puerta con este. Lucy no le dio importancia y puso una pierna fuera de la ventana, luego la otra y las dejo colgando en el aire. Si saltaba mal o aterrizaba mal, Seguramente saldría con un hueso roto. Y al parecer tenia mas miedo a saltar de esa altura que al psicópata que estaba detrás de la puerta. Pero solo esas opciones tenia, ¿no?

La ojiverdes cerro sus ojos, el cuchillo dejo de hacer ruido y suspiro.

Salta y rueda, salta y rueda. . .

El sonido de la puerta abrirse hizo que abriera los ojos y volteara hacia atrás, pudo ver la silueta del psicópata en la entrada de la puerta, y sin dudar, salto desde el segundo piso de la casa hasta aterrizar en el patio trasero. Tenia una gran cantidad de adrenalina en su ser, nunca antes había saltado desde tan alto. Ni siquiera en su infancia. Se cercioro de que su cuerpo estaba bien, al no sentir dolor alguno se levanto para correr como si no fuese haber un manaña. 

Pero entonces escucho un crujido proveniente de su pie derecho. Prácticamente después de dar un solo paso, Lucy volvió a caer ahora con un dolor inmenso. Ese crujido solo significaba que se doblo el tobillo o algo peor, se quebró un hueso del pie.

Temiendo a que fuera la segunda opción, Lucy se acerco su pie y se quito el tennis que lo cubría. Cada movimiento era super doloroso. Se limitaba a soltar pequeños gemidos de dolor mientras lloraba. El dolor era increíblemente insoportable, y era lo que temía, Su tobillo estaba fracturado. No se movió para nada, puesto que era inmensamente doloroso el solo ver su pie. El dolor que sentía era tan grande que se desmayo.  

Ahora estaba a merced de ese psicópata que había causado todo esto.

El tipo encapuchado salto sin problema alguno desde la ventana del cuarto de Lucy. Se acerco lentamente hacia la chica que estaba tendida en el frió césped y la miro mas de cerca. Gracias a la luna, pudo apreciar el pálido rostro de la pelinegra. Sus ojos estaban cerrados. Jeff se puso de cuclillas y saco su cuchillo que tenia guardado en su polera la cual estaba con ciertas manchas rojas.

Paso el frió filo del cuchillo por toda la cara de la chica empezando con sus hermosos labios y terminando en su cuello, iba a ser un pequeño corte en esa parte pero se detuvo.

"¿En serio no la recuerdas?" Escucho una voz dentro de si que hizo que se exaltara un poco. Se pensó que estaba mas loco de lo que el creía y volvió acercar su cuchillo hacia la chica. "no lo hagas"  Volvió a escuchar la voz. Ya molesto Jeff grito internamente que esa voz se callase y lo dejara continuar. Levanto su cuchillo decidido a encajarlo a la cara de la chica desmayada, al momento de que solo quedaban centímetros del cuchillo y el ojo cerrado de Lucy, Jeff se detuvo así mismo. Su expresión era una confundida con mezcla de enojo. se guardo el cuchillo y observo mas de cerca a la chica. Giro su cabeza hacia donde estaba el tennis y luego vio sus pies. Se acerco que lo inspecciono mas de cerca tomándolo cuidadosamente. 

Inspecciono el tobillo de la chica y noto que se había dado un buen golpe en el. No lo tenia roto. Pero si estaba hinchado. Dio un suspiro y trato de no arrepentirse después, Jeff cargo a la chica llevándola hasta su habitación, no fue tan difícil pero era muy incomodo para el hacer este tipo de cosas. La dejo en su cama y fue a un baño de la casa para buscar un pequeño paquete de emergencias. Al fin cuando lo encontró, saco varias gasas y ungüento para ponérselo al tobillo de la chica. 

- ¿por que carajos estoy haciendo esto en vez de matarte? - Le pregunto a la chica con confusión. Al terminar de vendar el tobillo miro hacia su cuarto. Y noto que debajo de un escritorio había un marco de fotos. Camino hacia el y lo tomo. Se congelo al instante cuando vio que había una gran familia: los dos padres y tres hermosas niñas idénticas la una a la otra.

"¿Ahora la recuerdas?" Volvió a escuchar esa voz. Lanzo el marco haciendo que el vidrio de este se rompiera y camino hacia atrás. Aun no lo podía creer, lo recuerdos de esa noche le llegaron a su mente. 
Recordó que había matado a la madre de esa chica, recordó que también había echo lo mismo con las otras dos niñas. Y cuando encontró a esa chica. . .

Jeff se acerco presurosamente a la chica que descansaba en su cama, le quito su chaqueta y no fue necesario quitarle su camiseta puesto que tenia una sin mangas.

Se congelo al ver que tenia la cicatriz que el había echo hace ya mucho tiempo atrás: una carita feliz en su hombro derecho. 

- No no, es imposible, ¿como es que nos volvemos a ver? Se exalto Jeff pensando que que esa chica era la dulce niña a la cual le perdono la vida.

Dos veces. .