Capítulo 11 - Cuando el 13 debe ser épico

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Regla número siete para tener un harem: Si un rapero es inalcanzable, demuestra quien eres.

—Ha estado bien.

Fueron las únicas palabras de Kris antes de ponerse los pantalones y salir de la habitación con la sonrisa de quien ha pasado una gran noche y está totalmente saciado. Se había convertido ya en una rutina, los dejaba tumbados en la cama con la respiración agitada y él volvía a centrarse en otro aspecto de su ajetreada vida, el trabajo.

Miró en el frigorífico y tras ver que no había nada que poder llevarse a la boca para reponer fuerzas, se llenó un vaso de agua y se quedó apoyado en la encimera. Contempló la lista que había ido creando y tachó el último nombre.

1. Chanyeol

2. Kiseop

3. Tao

4. Amber

5. Jaejoong

6. Lay

7. Baek

8. D.O

9. Xiumin

10. Sehun

11. Chen

12. Luhan

Después del encuentro con Jaejoong, tuvo que volcarse en el trabajo y no le quedó otra que buscar entre su grupo a los próximas presas. Estuvo tentado en más de una ocasión a hacer realidad los fanfics a los que últimamente se habían aficionado. Después de "Negro cautivo" y "Esperanza chocolate", comenzaron con obras como "La llama del dragón" o "Zoofilia negra". Todas eran suficientemente malas como para reírse del protagonista principal, Kai.

¿Qué ocurriría si acabase seduciéndolo? Estaba seguro de que no tardaría en caer en sus redes y que después de eso, no dejaría de recordárselo hasta que no quedara nada en el grupo. Sin embargo, no llegó a entusiasmarle la idea de que entrase en su harem, no tenía las fuerzas ni la ilusión suficiente como para hacer caer a otro "seme en potencia".

Se estaba conformando con poco y lo sabía. Al principio todo era divertido, lo de Jaejoong fue emocionante. Asumió el riesgo de tocar al "chico" de Yunho, corrió el peligro de ser descubierto y eso le motivó a seguir adelante. Amber y Tao vinieron por dos, una experiencia totalmente tentadora y con la que disfrutó mucho. Chanyeol fue el que creo este juego, hacerle caer y demostrarle que podría llevarse a la cama a quien quisiese lo llenó de vida, lo despertó de su letargo; y conseguir acostarse con Kiseop...

Negó con la cabeza, no quería pensar en él. Cada vez que alguien mencionaba su nombre tenía que rechinar los dientes. El recuerdo de otro hombre sobre él con claras intenciones de llevárselo a la cama no le hacia bien. ¿Quién se atrevía a quitarle una conquista?¿Quien tocaba algo que era suyo y se pensaba que podría seguir como si nada?

Volvió a centrarse en los nombres de su lista. Desde el número 6 hasta el 12, habían sido presas fáciles. No había habido juego, simplemente tuvo que llamarlos para que acudieran a él. Sentía que el dragón que había en él volvía a dormirse, que su don comenzaba a menguarse y todo era por culpa del trabajo.

¿Solo del trabajo?

Salió de la cocina antes de que sus pensamientos le atrapasen de nuevo. Tenía que conseguir que la última captura fuese épica. La presa número 13 tenía que ser lo suficientemente buena como para mantenerle despierto, debía ser difícil de conseguir, un trofeo con el que se llevaría la medalla al "Don Juan" del año.

¿Pero a quién?

Ha okay, okay, okay

>>You know what time it is?

El harem de KrisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora