Te esperaré

VIII

Habían pasado algunos meses desde la marcha de John, no llegaban cartas poco a poco perdia la ilusión de que Ylenia lo esperara...

- ¿Hay carta para mí? - Dijo John desanimado.

-Nada señor, lo siento.

Mientras tanto en otro lugar del mundo Sara se encontraba haciendo las maletas debía hacer algo para ayudar a John en su ausencia:

- Si mamá, debo hacerlo, tengo que saber porqué el padre de John es así, estaré con él al menos hasta que vuelva...

- Hija es un gran gesto lo que vas a hacer, acuérdate que te apoyas y no te olvides de llamarnos ¿vale? .- Dijo su madre a modo de despedida.

- ¡Por supuesto mamá!

Pasado un rato Sara llego hasta la casa de John:

- ¡Hola señor! Soy Sara no se si se acordará de mi... Bueno soy la novia de John y me gustaría quedarme aquí con usted hasta que él vuelva...

El padre que no decía mucha cosa sonrió levemente y le hizo un gesto para que entrara:

- Oh, veo que colecciona relojes. ¿Puedo ponerme alguno? - Intentó Sara a modo de suavizar el ambiente.

- ¡No es mió! ¡No vuelvas nunca a tocar mis cosas! - Dijo éste irritado.

Sara pensó que quizás sería mejor irse a otra habitación y así lo hizo, se dirigió al cuarto de John y empezó a investigar los objetos que tenía. ''Es tan mono'' pensó.

Pasaron días y parecía que Sara veía la luz al final de ese túnel de incógnitas, poco a poco la relación con el padre de John mejoraba y las piezas del puzzle encajaban. Sara se disponía a escribirle una carta a su amado:

Querido John:

Siento haber tardado tanto en escribirte, tengo tantas cosas que contarte... Decidí investigar que era lo que hacía a tu padre de extraño y ahora lo se y lo comprendo, tu padre tiene autismo, ahora puedes comprender porque es así.

John te hecho tanto de menos, han pasado meses, meses horribles, he empezado a estudiar sobre las enfermedades mentales porque quiero montar un centro para estas personas, me encanta lo que hago y deseo que vengas cuanto antes para poder ver todo esto, te amo John, no te he olvidado...Te mando una foto para que aún así me sigas recordando.

Pasaron unos días hasta que John recibió esta carta, se encontraba en plena batalla, ambos no sabían que es lo que sucedería tras esto...

- Hay carta para ti John.- Dijo un soldado.

Pasaron los días y John no podía dejar de observar dicha carta. ¿Que futuro les depararía?