iv. luke

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Luke siempre fue parte de aquellas personas que observaban, esa clase de personas que se encargan de buscar algo especial, no algo en especial, algo especial. Luke por alguna extraña razón pensaba mucho en esa palabra, y se daba cuenta cuánto podía dañar ser especial, aunque fuese bueno o malo, ser especial surtía efecto en las cosas y en las personas.

Así que, como siempre, Luke se estaba ahogando en la necesidad de respirar, oír y observar el mundo que giraba alrededor suyo, sin que importase que ese mundo hiciera ruido no contando con él. Tomó asiento en aquel viejo árbol del parque y comenzó a observar lo que le rodeaba. Observó un par de autos que pasaban, y sin importar qué, se preguntó también por su funcionamiento, también observó a una pequeña niña rubia de dos colitas y no pudo evitar preguntarse en qué si aquella niña lloraría por las noches dentro de un par de años por un corazón roto, o sonreiría al ver las estrellas desde una de sus ventanas, de cualquier forma, Luke esperaba que tuviera una linda vida.

Entonces, lo vio. No sabía cómo describir la guerra que se estaba llevando a cabo en su interior, sólo podía decir que el sentimiento estaba ahí; Calum caminaba distraída mente hacia él, con audífonos puestos, escuchando un poco de Green Day y mirando el mundo a través de su cámara polaroid rosa, fotografiando la vida, y en ese momento, le pareció más que atractivo y adorable a pesar de que portaba un tierno suéter lila con un gatito blanco en él. Lo observó por un rato hasta que el moreno siguió con su camino sin que notase la presencia del rubio...o tal vez sí.

Luke miró a ambos lados en busca del moreno, pero no lo volvió a encontrar por ningún lado, extrañado se volvió a recargar en el árbol.

"Te he visto observándome." rió una voz a su espalda.

Luke alzó la vista encontrándose con Calum escondiéndose juguetonamente detrás del árbol. Le sonrió apenado, y se encogió de hombros.

"Pudiste haber saludado," dijo el moreno sentándose cómodamente a su lado. Luke rió y le dio un nuevo encogimiento de hombros.

Calum recostó un poco su cabeza en el hombro de Luke, alzó su cámara polaroid en frente de ellos, sonrió ampliamente, Luke hizo lo mismo y tomó la fotografía.

"Gracias," murmuró Calum mientras observaba cómo salía la fotografía y sonreía, Luke apenas pudo comprender su agradecimiento pero sonrió en su dirección tiernamente, observando cómo le caían los cabellos negros sobre su frente. "Quizá no interese, pero las colecciono, ¿Qué es mejor que mantener la belleza estética del mundo en una fotografía? No sólo son fotografías, algo que me encanta recordar es que estas fotografías algún día contaran una historia..." el moreno rió nerviosamente estaba volviendo a hablar de más. "Además este parque es perfecto para narrar una historia, ¿no crees? Solía subirme a este árbol, pero no pienso hacerlo de nuevo, ya caí una vez en ti." Rió.

En realidad a Luke no le importaba que cayese sobre el, en realidad comenzaba a pensar que el estaría ahí para atraparlo, y de alguna manera le agradaba la idea. Nuevamente se encogió de hombros y se encontró con el moreno observando las ramas del árbol y jugando con sus dedos. Después Calum volvió a apoyar la cabeza en el hombro de Luke mirando esta vez hacia sus pies. Y entonces Luke tragó saliva, ya se había traicionado una vez, y tenía planeado volverlo hacer costase lo que costase.

"M-me gusta t-tu suéter." susurró, y por dentro suspiró aunque le doliese la garganta.

Calum se giró y le miró con los ojos brillándole de alegría, agradeciendo que alguien por fin se había dado cuenta de su nuevo atuendo.

"¿En serio?" Luke asintió sonriéndole. "Lo he comprado en línea, no estaba muy seguro que me quedara bien, además no me gustan los gatos, en realidad me encantan los perros, además el color es hermoso," soltó una risita. "La ironía de la vida."

Luke rió y asintió. Ambos cayeron en un cómodo silencio, observando como los autos pasaban de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, hasta que inesperadamente, Calum estalló en una adorable carcajada que logró que Luke le mirara extrañado.

"Lo siento, es que...es que me he dado cuenta que el silencio solo puede existir en un ruido, y el ruido debe existir y luchar por salir del silencio." Volvió a reír en ironía, mientras que Luke trataba de compensar lo que había sentido.
...
Colocó el cigarrillo entre sus labios, rebuscando entre los bolsillos de sus jeans desgastados el encendedor. Lo encendió, inhalando de él y reteniendo el humo por unos segundos, quemando en su garganta ligeramente, exhaló. Respiraba de nuevo, o al menos la sensación de que se ahogaba parecía desaparecer lentamente de su cuerpo.
Pateando unas cuantas rocas, tomando grandes bocanadas, siguió merodeando por las calles que conducían a su hogar, demasiado consumido por sus pensamientos para prestar atención del moreno que le observaba con curiosidad.

"No sabia que fumabas" Levantó la mirada del pavimento para encontrarse con Calum, quien comenzó a seguirle por las calles. "¿Llevas mucho haciéndolo?"

El rubio se encogió de hombros "U-un par de a-años" suspiro.

"Deberías parar" sugirió "No es por nada pero..." Tosió ante el humo inundando sus fosas nasales, detestaba el olor a cigarrillo y la manera que impregnaba la ropa. "Es un mal hábito, así que apágalo"
Luke le miro sorprendido ante el tono demandante del mayor y negó ligeramente con la cabeza.

"Apágalo" hizo un enorme puchero "Apágalo o... o te haré la ley del hielo"

Luke reprimió una risita ante la amenaza, aunque el cigarro aún continuaba en su boca.
"Bien no pienso moverme hasta que lo apagues" declaró sentándose en la acera y cruzándose de brazos.
El rubio le observó, su cabello ligeramente despeinado y su puchero le hacían ver un tanto infantil pero adorable. Calum le hacía sentir algo especial, no algo en especial, algo que le hacía olvidar por unos instantes todo.
Suspiró sentándose junto a él ,aplastando el cigarro con su pie, y abrazó sus piernas recargando su cabeza en sus rodillas. Quería decir algo pero no podía.

"Ves así es mucho mejor" sonrío el moreno "es terrible como el olor a vainilla se arruina con el cigarrillo"
Luke asintió, a pesar de sus intentos no podía dejar de sentir la falta de oxigenación en él.

"Luke" Calum murmuró, tomando nota en cada acción y movimiento que el rubio hacía "¿A qué le temes?"
Su pulso parecía haber acelerado, su respiración era corta y rápida.Era demasiado personal, algo demasiado profundo en su ser para sacarlo a la luz; así que guardo silencio como usualmente lo hacía ni una palabra salía por su boca pero demasiadas gritaban en su mente, era un caos y Calum solo era capaz de notarlo en su mirada.
"Esta bien si no quieres decírmelo" susurro el moreno dándole una sonrisa incómoda.
"A-algún di-di-día" prometió.
Permanecieron en silencio por minutos, y al rubio le gustaba el silencio junto a él.
"Tengo que ir a casa, mis padres estarán preocupados y ya puedo imaginar su sermón de diez horas 'Calum te hemos dicho que vagar por la calle tan tarde es peligroso, bla bla bla'" Luke río, el moreno le regaló una sonrisa "Me gusta tu risa, deberías reírte más seguido es tierno y... Dios de nuevo hablo de más. Bien debo irme, espero verte mañana Luke ,te quiero"
Sorprendido asintió despidiéndose con la mano.
...
Te quiero. Te quiero. Te quiero.
Las palabras sé arremolinaban en su mente, como huracanes peligrosos destruyendo su cordura.
Te quiero. Te quiero.
Observo las teclas debajo de sus dedos, y observo las partituras. Toco cada una de ellas, de manera temblorosa. Te quiero. Intento pero no funcionaba, las notas no sonaban correctas, no podía crear la melodía de la manera perfecta como usualmente lo hacía.

Te quiero Luke. Te quiero.
Pero esta era otra voz en su cabeza, una tan familiarmente dolorosa. Te quiero. Golpeo a puño las teclas, un sonido desagradable emitiéndose del piano. Y continuo con lagrimas silenciosas cayendo de sus ojos y creando los ruidos de desesperación que no podía hacer con sus cuerdas bucales a través del piano en su cuarto.
Dos palabras, ocho letras. Y vaya que se le hacía familiar todo lo que podían causar las palabras.

+
Heeey babes
Bien hoy es 7 y como prometimos, aquí esta el capítulo. Lo siento por la tardanza de dos meses pero hemos cambiado de escuelas, ya no nos vemos diario (aun lloro por eso) pero tratamos de seguir en contacto y trabajar en las fics siempre que la tarea no nos consuma. Trataremos que el siguiente capítulo sea para el próximo 7, ojalá les haya gustado.
Voten, comenten, compartan bc eso nos da mas motivación para seguir con esta historia.

Les queremos

- Regina

vanilla » c.h + l.hDonde viven las historias. Descúbrelo ahora