Kyung condujó muy rápido y aparcó el coche en el garaje.
Me abrió cortesmente la puerta pero no quería salir. El garaje era muy grande y me empezaba a dar miedo todo.
No le pasará nada si yo estoy con usted.- Dijo kyung tomando mi mano.
Me llevó pegada a el y subimos hasta casa.
Será mejor que nos lavemos las manos...- Dijo mirando sus manos.
Esa chica murió por mi culpa...- Susurré aterrorizada.
No diga eso...-Dijo kyung en voz queda. Y cogió mi mano para dirigirme al baño.
Esa chica...
BASTA!.- Escuché como kyung gritó.- No es su culpa deje de mortificarse.
Pero es algo evidente park kyung! A este paso más gente morirá por mi culpa...peter...incluso tu.- Espeté gritando.
Peter y sus familiares estan custodiados las 24h así que estarán bien...y en cuanto a mi no me importaría morir por usted, Sr Bell usted es lo más importante para mi en esta vida.- Me miró a los ojos cristalizados.
Kyung lavó meticulosamente mis manos hasta que no quedó sangre en ellas.
Kyung...no me vas a dejar aún si tu vida corre peligro por mi culpa?
Jamás la dejaré Sr Bell.- Dijo mientras se frotaba con un estropajo las manos.
Lo siento...- Dije con un hilo de voz.
Era de noche, otra vez habia vuelto a llover...
Sr Bell quiere algo de cenar?.- Dijo kyung sonriendo para animarme.
Negué con la cabeza.
Debe comer.- Dijo en tono autoritario, al tiempo que mi estómago hizo ruidos delatandome.
Prepararé unos sandwiches.- Dijo dirigiendose a la cocina.
Me gustaba ver la cuidad de noche a traves de la ventana pero ahora sentía miedo.
Comí el sandwich de kyung, realmente estaba rico.
Kyung...puedes dormir conmigo a partir de hoy por favor?.- Dije timidamente.
Quiere eso Sr Bell?.- Dijo mirandome fijamente.
Asentí.- Se que no es correcto...se que puede sonar muy presuntuoso pero estoy aterrorizada kyung...- Dije llevando mis manos a mi rostro sollozando. Temía por la vida de Peter, por la mía y por la de Kyung.
Noté como kyung apartaba mis manos de la cara y ponía las suyas en ella acariciandola suavemente.- Tus deseos son ordenes para mi sr Bell.- Dijo secando con sus dedos mis lágrimas.
No pude contenerme mas e por inercia me arrojé a los brazos de kyung.
Tranquila pequeña.- Dijo acariciando mi pelo entre sus manos.- Estoy contigo nadie te tocará.- Noté como el corazón de kyung estaba acelerado y me aparté un poco.
Gracias kyung...no se como acabe esto pero me faltará la vida para agradecertelo si es que la conservo.- Dije ironicamente.
No diga mas en eso en mi presencia, mientras yo viva usted vivirá.- Sonrió tiernamente.
Esa noche y otras muchas en adelante kyung me agarraria la mano y estaría junto a mi.