Me quedaré con usted esta noche.- Dijo Kyung.
Recuerdo que se recostó en la cama de lado mirando hacia mi sin soltarme la mano.
Sentí que mi corazón se aceleraba, nunca habia estado tan cerca de un chico y menos en la misma cama.
Gra..cias...- Dije tímidamente.
No tiene que darlas...sr Bell.- Tragó saliva mientras masajeaba mi mano haciendo pequeños circulitos en ella.
Peter también me masajeaba mi mano.- Sonreí al recordarle.
Oh entonces supongo que no le molesta.- Dijo susurrando.
No, se siente muy bien.- Me acerqué un poco más instintivamente a kyung quedandome dormida agarrada a su mano.
Buenas noches sr Bell...- Dijo susurando bajito.
Los rayos de sol entraron por la ventana molestando a mis ojos, el sol había salido trás la tormenta.
Abri los ojos y ví a Kyung dormido, parecia tan pequeño, este aún sujetaba mi mano, no la había soltado en toda la noche...
Decidí no molestarlo y me quedé viendo como dormía un ratito más, intenté levantarme pero kyung tiro de mi mano haciendome que estuviese a cm de su nariz.
Majare que le ha dado pensé.
Rose...no te vayas no me dejes NO!.- Dijo sobresaltado.
Kyung despierta despierta me deshice de su mano y le moví.
Ale...sr Bell...
Solo fue una pesadilla...- Dije para tranquilizarlo.- Estas bien?.
Asintió.- Sr Bell lo siento.- Dijo rascandose la nuca.
Solo fue un sueño Kyung...nadie los controla todo esta bien kyung.- Le somreí. El me devolvió la sonrisa.
Me levanté y me aseé kyung se quedó un rato más mirando al techo, quien sería Rose me pregunté.
Abrí el frigo por inercia pero no habia nada, lógico Alexandra.
Iba a salir de casa pero recordé la llamada de anoche.
¿Sr Bell esta lista?.- Dijo kyung cogiendo las llaves del coche.
Lista para qué?.- Alcé una ceja.
Debemos ir a la peluquería.- Dijo muy natural.
Qué?.-Dije extrañada.
Se que no es muy genial pero en casos así cuanto menos pueda reconocerla ese...bueno ya me entiende es hora de cambiar de look.- Dijo poniendose los zapatos.
No no no no quiero...mi pelo no me lo cortaré.- Dije agarrandolo entre mis manos.
Tranquila Sr Bell...solo serán las puntas y su color.- Dijo divertido.- No permitiré que un cabello tan bonito como el suyo este corto sería una lástima.- Dijo agarrando un mechón de mi pelo en sus manos.
Subimos al coche, asegurandonos que no habrían sospechosos a la vista. Llegamos a la peluquería.
Lista srBell.- Me miro fijamente.
Negué con la cabeza repetidas veces.
Kyung se rió y tiró de mi hacia la puerta, habló con el peluquero y me hizo un gesto que me sentara.
Nunca habia ido a una peluqueria...no al menos a una de un local, siempre tuve peluquera personal.
De que color lo desea?.- Preguntó el peluquero.
Miré a Kyung con el ceño fruncido, este se encongió de hombros.
Color caoba violin, tirando a rojo.
Sr Bell no llamará mucho la atención?...
Shhh es mi pelo kyung.- Mire de mala gana.
El peluquero asintió y comenzó su trabajo, despues de unas horas ya esta lista.
Y bien que tal sr?.- Dijo el peluquero.
Mire a la persona que se reflejaba, ahora era medio peliroja oscura y con el pelo escalado, no estaba mal.
Sonreí hacia kyung que miraba algo boquiabierto.
Pagé el tinte y el corte, subimos al coche y mi estómago comenzó a sonar fuerte.
Kyung rió.- Vamos al supermercado compraré algo para usted.- Dijo metiendo la primera marcha del coche.
Compramos suficiente comida como para un mes pero antes de regresar pasamos por un restaurante a comer.
Kyung esto ahora vuelvo.- Me excusé para ir al baño.
Entré al baño noté como uno de los grifos estaba abierto, algo más sonaba, el suelo estaba encharcado de agua. Retrocedí hacia la puerta para abrirla cuando divisé un rio de liquido rojo en el suelo, no quería saber que era pero un avion de papel voló por la ventana manchado de sangre en el que decía "Tu serás la próxima"....
KYUNG!!!.- Grité a pleno pulmón.
Kyung estuvo a mi lado en menos que cantaba un gallo.
SrBell que ocurré?!.- Dijo nervioso.
Le entregé el papel horrorizada mis manos estaban manchadas de sangre también. Kyung lo leyó y lo arrugó aplastandolo con su pie.- Maldito bastardo.- Bufó.
Con cautela abrió la puerta, trás ella encontramos el cuerpo de una chica sin vida.
Horrorizada me tapé los ojos, pude sentir como la mano de kyung me agarraba y me sacaba de aquel baño.
Kyung llamó a las autoridades y al jefe que llevaba mi caso. Kyung informó de todo.
Estaba en el coche aún con las manos manchadas con sangre de esa inocente chica. Había muerto por mi culpa...Sacudí mi cabeza y una lágrima salió de ojo.
Kyung abrió la puerta del coche y condució muy rápido hasta casa. Ya no sabía si podría estar segura aqui.