Me dormí pensando en el último beso que kyung me dió. Era la unico que me hizo sentir bien aunque solo fuera para callarme.
Desperté estiré mi mano pero no encontraba la mano de kyung, me levanté sobre saltada.
Kyung...donde estas?.- Dije alarmada. Lo vi aparecer por la puerta en cuanto escuchó que lo llamaba.
Estoy aqui sr Bell.- Dijo sonriendo.
Me..a...aasu..aachiss.- Dije estornundando sin poder acabar mi frase. Lo que hizo reir fuerte a kyung.- Tenga.- Me extendió un pañuelito de papel.
Gra...aachuss.- Dije estornundando nuevamente.
No se preocupe, me parece que alguien esta enfermo..- Susurró.- Anoche se empapó.
Estoy bien...achis.- Dije frotando mi nariz con el pañuelito.
Ire a prepararle una taza de chocolate le hará bien.- Solo asentí y kyung salió de la habitación. Me dirigí torpemente hacia el baño, no podía sosterme y la cabeza me daba vueltas y caí al suelo.
No recuerdo nada más...
Desperté tumba en la cama, entreabrí mis ojos y ví como kyung quitaba algo de mi frente.
Que ha pasado?.- Dije confusa agarrando institivamente la mano de Kyung.
Se desmayó...en el baño, me alarmé mucho sr Bell usted estaba incosciente y tiritando en el suelo...-Dijo triste.-Necesita descansar todas estas situaciones la han estado afectando mucho.-Dijo agarrando mi mano fuertemente.
Volví a dormir pero caí en una pesadilla.
En ella estaba bailando un vals con Peter felizmente cuando de repente unas gotas cayeron, no era agua eran rojas en ese momento Peter no estaba sino que estaba en brazos de ese tipo. Bailando entre demonios y gotas rojas.
KYUNG!!!!!.- Grité muy fuerte levantándome y mirando a todos lados.