Me dormí pensando en James. Fue casualidad encontrarse con alguien tan guapo. Era... en fin sexy. Espera, ¿yo he pensado eso?
Da igual.Soñé que estaba con mis padres, pero de repente empezaba un tiroteo y ellos eran alcanzados. Veía como caían al suelo y me acerqué a ellos.
-Te queremos cariño.- me dijo mi madre
-Nunca lo olvides- suspiró mi padre. Y acto seguido los dos murieron.
-No- chillé- ya me habéis dejado una vez, no lo podéis repetir. Os necesito, por favor.- sollocé.Me desperté agitada y llorando. Si eso me pasaba más a menudo debería ir a un psicólogo.
Me levanté de la cama y decidí bajar a beber un vaso de agua.
No se por que todo tenía que ser tan complicado. No se por que mis padres tuvieron que morir. Todo esto es injusto.
De repente sentí que me resbalaba y caí al suelo.
Suerte que no estaba bajando las escaleras.
Es que como soy tan torpe y desordenada dejé ropa tirada en el suelo y se ve que me he resbalado con un calcetin. Es que soy idiota.Bueno, cuando he ido a incorporarme, he sentido un gran dolor que recorría toda mi pierna izquierda. Mierda. Era la pierna alcanzada por la bala. Me daba miedo mirar. Poco a poco fui descendiendo la mirada y casi me mareo. La herida casi curada estaba abierta y me salía sangre. Dios, sangre no. Odio la sangre, me produce náuseas y me marea. Vale, llamadme tiquismiquis pero os digo que si estuvierais en mi lugar me entenderiais.
La herida me dolía mucho. No sabía que hora era, pero necesitaba avisar a mi tía o me desmayaba aquí mismo. Pegué un grito y a los cinco segundos mi tía entró por la puerta. Llevaba puesto una bata y tenía cara de dormida. En cuanto vio mis lágrimas caer, vino hacia mi.
Yo le señale la pierna y ella pegó un grito.
Acto seguido llamó a una ambulancia y me dijo que en unos cinco minutos llegaban.
Ella me cargó y me sentó en una cama. Pero primero puso una toalla sobre las sabanas por que yo seguía sangrando.
Esos minutos no se acaban nunca. Hoy era domingo y había quedado por la tarde con James. Le tendría que explicar todo y que no podía ir.
Cogí mi móvil. Eran las 5:00 de la mañana, yo tenia mucho sueño pero con este dolor era imposible dormir.
Le mande un mensaje a Iguácel diciéndole que estaba en el hospital. Al segundo me contestó.Fanny
Estoy en el hospital. Luego te cuento.Iguácel
Tía, que ha pasado?
Voy para allí.
En q habitación estas?Fanny
Técnicamente en ninguna.
Esta viniendo la ambulancia a mi casa.Iguácel
Cuando llegues me dices el número.
Te importa q venga Jason?
Esq esta conmigo en casa.Fanny
No, que venga.
Ya vienen los de la ambulancia te dejo.
XaoIguácel
XaoEn ese instante me cogen en brazos y me colocan sobre una camilla.
Veo como uno de ellas saca una aguja y dice.-Hola preciosa, esto va a dolerte un poco pero te calmará el dolor de la pierna.
Después de decir eso me inyecta un líquido y el dolor de mi pierna va desapareciendo poco a poco.
Cuando llegamos al hospital la pierna no me duele casi. Me han conectado a una máquina que me transfiere sangre, ya que he perdido bastante.
Estoy en la habitación 42 y le envío un mensaje a Iguácel avisándole. Me contesta que está llegando al hospital.Tengo mucho sueño, así que dejo el móvil a un lado e intento dormir. No lo consigo, pues estoy muy cansada. Necesito que entre alguien y hablar, este color blanco de las habitaciones me pone nerviosa.
Como si me leyeran la mente, la puerta se abre y entra un medico muy joven y guapo.
- Me temo señorita, que le vamos a tener que llevar a quirófano para suturar la herida y que no sangre más.
Asiento con la cabeza y espero a que entren los médicos para llevarme a la operación.
*~~~~~~~~*
Aquí termino
Siento haber tardado tanto pero es que he estado súper liada.
Espero que os haya gustado el capítulo.
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Algo más que nada
Teen FictionTodo por lo que pasa Fanny es debido a un atentado terrorista, en el cual, desgraciadamente sus padres pierden la vida y ella se queda en coma. Tras despertarse y hacerle frente al la realidad, Fanny, debe irse a vivir con su tía, Ana, a Chicago. Al...