Capítulo 3

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(KEVIN)
Es lunes, hoy nuevamente es colegio y suena mi alarma, no quiero levantarme tengo demasiado sueño, la apago y sigo durmiendo. Entonces siento el contacto de unos labios en mi mejilla y abro los ojos como puedo.
-Buenos días Kevin- Me sonríe mi madre, pero no es la misma sonrisa parece que le preocupa algo.Decido no hablarle y me doy media vuelta al otro lado.
-Kevin... Se que no quieres que Ryu viva con nosotros... por eso...-La interrumpo y me levanto de la cama. No quiero oír hablar más sobre Ryu y sobre mi futura hermana. La echo de mi habitación con una mirada y ella agacha la cabeza, sale y cierra la puerta. Me duele verla así, no esta tan sonriente como todas las mañanas, se que es por mi... Pero es el padre de Ryonosuke, el chico que más se burla de mi en la escuela... Y no soporto la idea de tener a su padre metido aquí en casa y que Ryonosuke y yo seamos hermanastro. ¡NO QUIERO!. Me visto y bajo a desayunar parece que Ryu no esta en casa. Que extraño.
-Mamá ¿Ryu no iba a vivir aquí con nosotros?.
-Sí, pero bueno... veras... hemos discutido y creo que es mejor que no viva aquí con nosotros no me gusta ver a mi pequeño así de mal- y me sonríe mejor que la anterior vez.
-Eso esta bien mamá, por cierto.. Me e enterado de que voy a tener una hermanita ¿no?
-Así es Kevin...- Y vuelve a agachar la cabeza.
-Bueno, pues la cuidaré como si fuera un padre y cuando sea más fuerte le enseñaré supertecnicas increibles- Le respondo con una gran sonrisa.
-Sí- y vuelve a sonreirme pero esta vez es una sonrisa más verdadera, más preciosa
-Bueno mamá ya es hora de irme.
-Pero Kevin no has desayunado.
-Adiós mamá.-Hoy parece que voy bien te tiempo.
-Hola Kevin.- Suena detrás mía con voz aguda, me volteo y es kiara. Ella es la única chica que habla conmigo es muy simpática y encantadora aunque muy timida tambien.
-Hola ¿Qué tal?- La saludo
-Muy bien, que extraño que llegues temprano a la escuela ¿no?-Me dice con tono divertida.
-Bueno... si...- Me sonrojo.
-Ya estamos aquí- me sonríe y se adelanta para entrar en clase.
-Vamos Kevin- insiste.
Me quedo mirándola, es muy linda.. ¿Pero que estoy pensando? Es mi amiga, además a mi me gusta zenda.
-Vooy- Le respondo y entro en clase después de ella.
Todos parecen nerviosos hoy, hablan de unas piedras mágicas.
Bah yo no creo en esas cosas. Apoyo mi cabeza en la mesa y no puedo parar de mirar a zenda... Ella es como un ángel, tan linda con esa sonrisa...
-Hey Kevin ¿tienes sueño?-me levanto muy rápido y me encuentro con Kiba muy sonriente.
-Hola Kiba ¿Qué haces aquí?¿Por qué me hablas?
-Bueno ayer no vinistes, quedamos en que iríamos todas las tardes y no te vi, así que me preocupé, además ¿Qué tiene de malo hablarte?
-A bueno.. No fui porque suelo estar en casa, ya te dije y No me acordé. Y no es sea malo pero bueno, eres el chico más popular y yo.. yo no..
-Jajajaja ¿El chico más popular? Jajaja para mi aquí no hay nadie más ni menos popular todos somos iguales Kevin.
Entra Jano-sensei y nos pide que nos sentemos en nuestros sitios.
-Bueno hoy vamos hablar sobre las piedras mágicas.
Otra vez con el tema.
-Eso no existe- Grito
-Kevin, no digas eso sí aún no las has vistos.
-No necesito verlas para saber que esas piedras no existen.
-Kevin, calla- me grita -Hoy explicaré las piedras y os enseñaré como funcionan yo tengo 3 Kevin y te mostraré que si valen. Vamos al patio.
-Tonto.
-Eres idiota.
-Mira que pensar que las piedras no existen..
Me dicen mientras van pasando.
-Todo el mundo se equivoca- les replico.Les sigo hasta el patio y Jano-sensei se coloca delante.
-Veras yo tengo estas 3, hay muchas más pero primero os enseñaré las mías.
-Mirad esta es la Amastista- Una piedra morada haber que hace con esa pienso y me sale una pequeña sonrisilla maliciosa.
-Con esta puedo controlar el hierro.-Levanta su mano y aparece una lanza de hierro. ¿Qué? ¿Así que es verdad? La boca me llega al suelo. No puedo dejar de mirarlo y cuando me doy cuenta todos están mirándome y riéndose de mi.
-¿Qué, listo? Con que no existian no.
Me quedo callado y miro a otro lado ignorandolo.
-Esta es la benitoita...-Continúa mi sensei.- Con ella puedo controlar el hielo. Mirad.
Pone los brazos horizontalmente uno debajo del otro con las muñecas unidas y las manos abiertas y salen disparadas pequeñas agujas de hielo.
Todos le aplauden y se quedan sorprendido. Yo sólo me limito a observarlo.
-Y está es mi última piedra. Es un ópalo y con ella puedo hacer ataques de burbujas como éste.-Comienza a soplar y salen pequeñas burbujas muy rápido casi ni puedo verlas y corta una rama de un árbol. Guau pues si que es increíble.
-Bien chicos esto es todo por hoy. Podéis iros a casa.
Todos van comentando lo de las piedras y riendose de mi por no haberlo creido.
Yo meto mis manos en los bolsillos y ando a mi casa.
-Kevin espera, voy contigo.
-¿Kiba?
-Sí, Hola, ¿Qué pasa?
-No nada, sólo que me extraña que vengas conmigo.
-¿Por qué? Ahora somos amigos ¿no?- Me responde las dando la cabeza y con una gran sonrisa.
¿Amigos? Nunca había escuchado eso antes... Yo nunca e tenido amigos...
-Sí, bueno eso creo...-Respondo algo nervioso.
-¿Y esa cara? ¿Acaso nunca has tenido amigo?
-No...-Agacho la cabeza me sonríe y me da una palmada en el hombro.
-¿Sabes Kevin? Yo tampoco e tenido amigos nunca. Todos hablan de mi y creen que soy genial. Sin embargo sólo soy Kiba-Lasiur. No tengo amigos ni soy nada especial.
No puede ser ¿Kiba? ¿Sin amigos? Espera. ¿Cómo es eso?
-No me creo que nunca hayas tenido amigos.-Me río.
-Bueno es la verdad-agacha la cabeza.
Le sonrió y le doy una palmada en la espalda.
-Bueno ya tienes uno.

Kevin-Parvol (Terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora