El nuevo profesor

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- ¿Qué tal las primeras clases?
-¡Horribles! Empezamos con dos horas de cálculo y luego una clase eterna de ética ¿y tú?
-Pues la verdad me aburrí muchísimo, quería estar con mi novia- Jacobo se acercó y me dió un beso muy tierno- Empezamos con una hora de química, luego una hora de proyectos de investigación, que fue básicamente explicarnos cómo tiene que ser el trabajo de grado, y para terminar una hora aburridísima de literatura con el profesor nuevo
-¿Profesor nuevo? No sabía que Óscar había renunciado
-¿Después de que el año pasado aparecieran sus listas metidas dentro de un excusado en el baño de hombres? Me extraña que no lo adivinaras amor
-Si, debí recordar eso- El último día de clases del año pasado el profesor Óscar buscó y buscó sus notas hasta que las encontró en los baños de primaria, lo curioso es que él sólo le daba clases a bachillerato- ¿Seguro que tú no sabes quién lo hizo?
-¡Que no! Ya te he dicho mil veces que yo no tenía motivo, era de los pocos del salón que no iba perdiendo la materia
-Está bien, está bien. No vuelvo a preguntarte. Vamos a comer algo y luego vas a jugar fútbol ¿si?
-No creo. Tengo reunión del equipo, voy a comer con los chicos. Tatiana ya está en la fila para comprar algo de comer ¿vas con ella?
- ¡Claro! No hay problema ¿Nos vemos en el almerzo?
-Dale. Pero antes de clase te prometió pasar a tu salón para darte un beso. Te quiero mucho hermosa.
Ya recordaba por qué quería ver a Jacobo en clase, él prácticamente desaparecía en los descansos con su equipo de fútbol. No todo podía ser perfecto.
-Majo, Jacobo me pidió que te comprara un brownie ¿Vas a comprar algo más?
-Si, necesito recuperarme de esas clases tan aburridas
Luego de pedir un sándwich de pollo y un jugo resultó que no moría de ganas por ver a Jacobo pateando un balón. Me sentía con más ganas de sentarme frente al lago y hablar con mi amiga.
-¿Qué tal las clases?
-Apuesto a que tú novio te dijo que fueron aburridas, pero para mi no estuvieron tan mal. El nuevo profesor de literatura hizo una introducción muy interesante.
-A mi me parece que lo más interesante es que es un bombón- dijo Erica mientras caminaba hacia nosotras
- ¿Y tú qué? ¿No que estabas en mi curso? Me quedé esperándote
-Resulta que salí en las dos listas. Antes de entrar a clase la coordinadora académica me buscó y me dijo que estaba en 11B. Lo siento-Se le notaba que de verdad se sentía mal por mi, pero se le notaban más las ganas de hablar del profesor de literatura.
-¿Cómo es eso de que el profesor está bueno?
-¡Más bueno que el pan caliente! Tiene unos ojos divinos, el pelo castaño, es alto y tiene una voz que enamora
-Ya puedes ver que Erica tiene fiebre de novio y ahora quiere con el profe- dijo Tatiana al borde de un ataque de risa
-¡Que exagerada! Pero el profe tiene lo suyo, hay que admitirlo
-¿De quién están rajando? Me tienen que adelantar en el tema
-Nada Lau, Eri y Tati me están contando sobre el profesor nuevo
-Tiene lo suyo el profesor
-Y tú, ¿cómo sabes? Aún no hemos tenido clase con él
-Lo vi con Casas, le están haciendo el interrogatorio con los profesores del año pasado. Después del descanso tenemos clase con él
-Bueno, igual si está lindo o no a mi me da igual. Yo tengo novio
-¿Y eso te quita los ojos? Creo que no cariño- me sorprendió que Tati dijera eso
-Pensé que no te habías fijado en lo lindo que era. Pero yo estoy de acuerdo. Majo, que uno esté a dieta no quiere decir que no peda ver el menú
- ¡Uh! Eri, tú y tus dichos que la sacan del estadio
Esto es lo mejor del colegio, sentarme con mis amigas a hablar y reír un rato. Erica nos contaba cómo conoció a su novio universitario, Laura nos tenía una lista de conciertos y películas para los próximos dos meses y Tati nos hacía una lista de series para nuestra próxima pijamada. Todo estaba perfecto hasta que sonó el timbre.
-Bueno chicas, vamos a ver qué tal el profe nuevo.
Mientras subí las escaleras al salón pensé en esperar a Jacobo en la puerta de su salón, pero Harry me dijo que él estaba recibiendo los balones para el nuevo torneo de fútbol. No tenía nada de raro que me dejara plantada por el equipo, pero me puse a pensar cómo iban a ser las cosas éste año si desde el primer día había más tiempo para el fútbol que para mi.
-Vamos a entrar antes de que llegue el profesor-me dijo Harry en un tono dulce. Seguro se me notaba el malestar en la cara.
Bueno, por los menos vamos a almorzar juntos. Pero definitivamente Jacobo necesita un poco de su propia medicina. Voy a....
-Buenos días a todos. Mi nombre es Nicolás Michelsen y soy su nuevo profesor de literatura
Pelo castaño claro, alto, se podían ver sus músculos bajo la camisa, y ojos verdes, profundos y misteriosos.
-Primero que nada quiero conocerlos. Vamos a empezar por aquí ¿Cuál es tú nombre?
Me tardé poco más de un segundo en notar que se dirigía a mi.
-Emmmm- ¡Piensa!- Me llamó María José Valencia
-¿Cuántos años tienes, Majo? ¿Te puedo decir Majo?
-Sí, claro-¡Se me va el aire!- Pues tengo 17 años ¿y tú?- ¡Bestia! Ahora todos se están riendo
-¿Yo? No me lo esperaba. Tengo 25 años, y me gusta leer ¿A ti te gusta leer?
-Muchísimo
-Bueno, ya tenemos algo en común- Me dio una mirada pícara y continuó preguntando el nombre de Laura y los demás.
¿Qué es esto? Es una situación ridícula. Estaba sonrojada y sentí que el aire no me llenaba los pulmones. Tal vez sea por Jacobo, tal vez por eso no puedo pensar bien.

Diario de una LolitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora